Hoy será el primer día

Los Asdlánticos, ese grupo cordobés que pega fuerte en el panorama pop nacional, hizo un canto al optimismo hace ya unos años con aquello de "hoy será, será, será, mi primer día, y mañana también, y el resto de mi vida...". Seguramente, nada podía hacerles pensar que el mensaje llegara a plantearse como un silogismo con la batalla que se plantea en El Arcángel. El ambiente sigue enrarecido a pesar de los intentos de aplacar los ánimos del mandamás, fichaje incluido, como consecuencia de una racha negativa que ha puesto en duda el proyecto que lidera Pablo Villa. De lo que pase esta tarde dependerá en gran parte lo que ocurra en el futuro más próximo, pues el mercado está a punto de abrirse y las cañas a orillas del Guadalquivir a su paso por El Arenal están listas. Es por eso que el partido ante un Tenerife que llega lanzado, en clara trayectoria ascendente, es vital.

Hoy hay que ganar para cerrar la herida creada por una serie de sólo una victoria en los últimos siete partidos, con una serie de apenas 9 puntos de los últimos 30. Un balance, el segundo peor de la categoría en estos dos meses, que sólo ha provocado un ligero descabalgue de los puestos de honor. Porque el play off se mantiene a tiro, a escasamente 2 puntos. Eso sí, esa es la misma distancia que hay con el descenso tras los resultados producidos ayer ya en esta jornada. Y es que esto se aprieta y ganar supone pegar un estirón brutal.

Hoy hay que ganar para que Pablo Villa siga siendo el jefe del vestuario. El hombre que ha logrado devolver la unión al vestuario tras una última temporada para olvidar en casi todos los aspectos, no se merece salir por la puerta trasera. De momento, mantiene de facto el apoyo inquebrantable de una afición que le ha preparado un pequeño homenaje, con mensaje subliminal al palco, para evitar duda alguna sobre su posición. Aunque, viendo las últimas manifestaciones públicas, no haría falta. Pero es mejor recordarlo para que la memoria se mantenga fresca.

Hoy hay que ganar porque esta plantilla tiene que reivindicarse en el momento actual, en el que surgen muchas dudas sobre su capacidad para pelear de tú a tú por un objetivo tan ambicioso como el ascenso a Primera División. Las últimas semanas han servido para revelar que el compromiso con el jefe de la caseta y el club es unánime, pero de nada servirá si eso no lleva acompañado el resultado. Es el momento que todos den un paso al frente, como el que quieren dar los lesionados Xisco y Raúl Bravo, que no están descartados, aunque esas dudas en sus sensaciones físicas haya llevado al técnico a citar a los canteranos Rafa Gálvez y Dani Espejo por si hubiera algún inconveniente. Porque que a nadie se le olvide que no hay más profesionales donde elegir, ya que Fran Cruz, Pelayo y Strahman están lesionados.

Hoy hay que ganar para demostrar a todos los agoreros que este CCF puede luchar con los mejores y que se crece en las adversidades. Si el Tenerife llega lanzado, con el deseo de alargar su serie positiva y romper su gafe en El Arcángel, hay que dejarle claro que tendrá que esperar a otra ocasión. Básicamente porque en el coliseo ya ganó el filial del Barcelona B hace un par de semanas, algo que debe quedar con una anécdota con una nueva alegría que devuelva la confianza y tranquilidad a una afición ansiosa de que este proyecto acabe de la mejor forma posible. Y para eso, el primer día es hoy.