El Teléfono de la Esperanza atiende cada año unas 1.500 llamadas

El Teléfono de la Esperanza (957 47 01 95) dedicará su Día de la Escucha, el próximo 15 de noviembre, a las personas discapacitadas, a favor de quienes esta ONG que llegó a Córdoba en 2009 quiere poner su "granito de arena para que mejore su salud emocional". Así lo dijo ayer en el Palacio de la Merced la doctora Josefina Santos, delegada en Córdoba de este colectivo, que asiste una media de 1.500 llamadas al año, en torno a cuatro cada día.

La organización presentó su nueva sede, en la plaza de Cañero, 31, gracias a la colaboración de Cajasur. El presidente nacional del Teléfono de la Esperanza, Juan Sánchez, agradeció la labor de los voluntarios que trabajan en Córdoba, "un voluntariado profesionalizado que trabaja de manera puntera en muchos ámbitos, siendo uno de los más importantes el que atiende a la prevención de suicidios". Sánchez hizo referencia a la incorporación de las nuevas tecnologías como "nueva forma de acercarnos a ese núcleo de la sociedad que demanda esta ayuda".

El director de la emisora Radio Intimidad, Francisco Javier Ceular, dio su testimonio como "persona que veía y que dejó de ver". "Cuando me encontraba por la calle a un ciego, me decía que si me pasaba algo así me moriría. Y al final tuve que convivir con este cambio", narró. "Cuando tu vida se transforma de esta manera necesitas escuchar y, sobre todo, que te escuchen", contó Ceular, quien dijo que tuvo que "aprender, por ejemplo, a escuchar los huecos de las cocheras, a tomar las referencias y a moverme por la vida".

Pese a lo desgarrador de su testimonio, llamó a la esperanza: "Cuando te encuentras en una situación límite, el cerebro hace clack y te dice que no quiere renunciar a vivir. Entonces empiezas a ver posibilidades". Ceular invitó a "dejar a un lado los prejuicios, porque la discapacidad se prejuzga".

La vicepresidenta primera de la Diputación de Córdoba, Felisa Cañete, destacó que el Teléfono de la Esperanza es una ONG de "acción social y de cooperación para el desarrollo" que ofrece de manera gratuita, anónima y especializada un "servicio permanente de ayuda para apoyar a las personas que se encuentren en una situación de crisis emocional". Destacó, además, que proporciona una serie de recursos profesionales "eficaces" para promover la mejora de la calidad de vida emocional de las personas y de las familias.