Una mentalidad de aficionados

Córdoba/Por mucho que la situación que atraviesa el Córdoba sea complicada, resulta alarmante la falta de temple que muestran sus futbolistas. Ayer, al cuadro blanquiverde se le escaparon de nuevo dos puntos ante un rival directo al que tuvo maniatado casi sin quererlo, con dos penaltis que castigaron en exceso a una Cultural que trató mejor el balón y acumuló méritos para más.

Sorprendió Merino de inicio, recuperando el 4-4-2 como dibujo y dando la titularidad a Javi Lara y Pinillos, además de colocando a Vallejo de stopper en lugar de Edu Ramos. El gaditano ya dejó entrever en la previa del partido que estaba preparado para sufrir por el juego de la Cultural Leonesa, que acapara mucho el balón. Pese a ello, el equipo entró nervioso y sólo cuando la presión en la medular empezó a ser efectiva se notó una mejoría. La expulsión de Zuiverloon condicionó mucho un partido al que el Córdoba llegó hecho un manojo de nervios pero que culminó en su primer tiempo con una cómoda renta.

Sin embargo, la mentalidad frágil del cuadro cordobesista volvió a aparecer. La Cultural empató en apenas cinco minutos ante la pasividad blanquiverde y ahí los nervios destrozaron al Córdoba. Merino pasó a jugar con un 3-5-2 pero el dibujo ya importaba poco. El problema es de capacidad.