Ricardo García Lorenzo: “Hay proyectos que parecen ciencia-ficción y son realidad”
Entrevista al director de Cajamar Innova
Afirma que los proyectos aunque sean internacionales deben tener intención de radicarse en Andalucía. “El objetivo es convertirnos en una incubadora referente que solucione los problemas específicos del agua”. Cajamar Innova abre el plazo de acceso a su Incubadora de Alta Tecnología para proyectos hídricos
La incubadora de Cajamar, Cajamar Innova acaba de abrir una nueva convocatoria con gran éxito. Su director nos explica las claves de la iniciativa.
–Los resultados de la primera convocatoria han sido positivos y el lanzamiento de la segunda, que acabó el día 11 de marzo, también. Hemos recibido candidaturas de unas 130 empresas que han solicitado los servicios de mentoría. El balance es positivo; estamos muy satisfechos con los resultados.
–¿Cuántos proyectos se seleccionaron en la primera edición?
–Recibimos en la primera edición unos 83 proyectos y de esos pasaron a la fase de aceleración y de incubación 12.
–¿Y cuántos diría que tienen posibilidad de éxito?
–Es una pregunta complicada. De las 12 empresas interesadas, 11 han presentado proyectos y de ellos siete son de iniciación y cuatro de aceleración y el plan de viabilidad determinará la posibilidad de éxito del proyecto. Nosotros estamos satisfechos simplemente por el hecho de que estas 11 empresas incubadas se han presentado. Para ellos solo la presentación del plan de negocios ya debe ser una garantía porque les permite ver o no la viabilidad del proyecto.
–¿Puede explicar alguno de los proyectos más llamativos?
–Todos son proyectos muy de base tecnológica, sin poner nombres y apellidos para que ninguno se sienta violentado, y están orientados a la tecnificación de los diferentes sistemas que nos ayuden a ver de qué manera podemos optimizar ese recurso que es tan limitado como el agua. Hay proyectos que están trabajando con tecnología satelital, otros muy focalizados a lo que son sistemas de riego inteligentes, algunos más dirigidos a sistemas para hacer más eficiente el consumo de agua en producciones agroalimentarias. A veces suenan a ciencia ficción, pero son realidad y los tenemos a la vuelta de la esquina. Para nosotros es una gran satisfacción ver que todo ese talento a nivel tecnológico lo han plasmado en un plan de negocio y ahora el tiempo nos dirá si desde un punto de vista económico esos proyectos son viables.
–¿Por qué centrar el apoyo a startups dirigidas a la gestión eficaz de los recursos hídricos?
–Nosotros hace 3 años junto a la Fundación Incyde decidimos poner en marcha una incubadora muy vertical muy especializada en tema de agua por la sencilla razón de que a nivel económico y a nivel social es un activo más que relevante, sin agua no hay desarrollo económico. Cajamar es una entidad financiera focalizada en la industria agroalimentaria y derivado de los momentos que estamos viviendo en cuestión de sequía, que es un problema fundamental, decidimos hace tres años adelantarnos a todo lo que supone toda la parte de digitalización y tecnificación, que obviamente estamos viviendo todos en este siglo XXI y ¿por qué no focalizar todo este talento a intentar resolver este tema del agua? De ahí surge Cajamar innova junto a la Fundación incyde. El objetivo es convertirnos en un referente tanto nacional como internacional pero que solucione problemas específicos del agua.
–La prioridad del componente tecnológico es indispensable en los proyectos que son aceptados ¿por qué?
–Hoy en día en el siglo XXI con toda la revolución tecnológica que tenemos ¿por qué no utilizar todo ese conocimiento y todo ese ámbito tecnológico que vemos todos los días y que evoluciona a pasos agigantados para solucionar ese problema que es muy serio y muy grave a nivel hídrico? Creo que es el momento de potenciar toda esa tecnología y sobre todo ver si ese tipo de tecnología tiene posibilidad económica. A veces tenemos tecnologías muy disruptivas, que no tienen viabilidad económica y lo que hacemos desde Cajamar Innova es ver que en esa tecnología los números acompañan. Algunas de esas tecnologías de los proyectos que se están incubando nos permiten ahorros y al final eso va a ser beneficioso para todos.
–Aceptan proyectos nacionales e internacionales, pero los internacionales ¿deben tener alguna vinculación con Andalucía?
–Lo que pretendemos es atraer talento y al campo no se le pueden poner puertas; ese talento nos puede venir desde cualquier punto de la geografía española o internacional con lo que nosotros aceptamos proyectos radicados en zonas que no sean territorio nacional, de hecho en la primera convocatoria recibimos 83 solicitudes y 19 de ellas eran proyectos internacionales. En esta convocatoria nueva sí que hemos recibido proyectos internacionales, pero nuestra incubadora nace muy focalizada en Andalucía, con lo cual en principio lo que intentamos es potenciar o fomentar que esas empresas de una manera directa o indirecta tenga una ubicación en el corto o en el medio plazo en Andalucía.
–¿Cajamar cuenta con los mismos socios estratégicos que en la primera edición?
–Una de las grandes novedades de esta segunda convocatoria es que hemos realizado una serie de alianzas estratégicas con entidades de primer nivel que están muy interesadas en solucionar el problema de este recurso tan escaso como es el agua y hemos lanzado una serie de retos tecnológicos con seis empresas para captar iniciativas.
El ecosistema Cajamar
–¿Qué distingue a Cajamar Innova?
–Pretendemos consolidarnos como un referente en el ámbito de la incubación y muy especializados en temas de agua; al final ofrecemos los mismos servicios que otras incubadoras pero formando parte de ese ecosistema que nos gusta llamar ecosistema Cajamar porque no solo facilitamos un asesoramiento y un seguimiento durante el período de mentorización, sino que después de esa fase lo que hacemos es incubar una empresa para ayudarles a montar su plan de negocio y luego no nos olvidamos, sino que hacemos un acompañamiento con posterioridad a la presentación de ese plan de negocio para ayudar a montar las diferentes rondas de financiación y para que esas empresas formen parte de lo que nosotros llamamos ecosistema Cajamar es decir testar todos esos proyectos y esas tecnologías en nuestros centros experimentales concretamente en el centro experimental que tenemos en Almería. Por eso es una de las grandes ventajas es que ponemos a disposición de todos esos emprendedores y todas esas startups ese ecosistema en cuanto a alianzas estratégicas y acceso a una cartera de potenciales clientes que necesitan esa tecnología para su actividad en el día a día.
–¿Por qué animaría a los emprendedores a acudir a Cajamar Innova?
–Emprender es complicado aunque ahora está de moda, yo siempre digo que si alguien tiene una idea y cree que puede solucionar un problema concreto no deben perder esa oportunidad y desde Cajamar y Cajamar Innova vamos a ayudarles.
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