Zapatero, Chaves y Griñán tienen que pedir perdón por los ERE, según Arenas

El presidente del PP-A, Javier Arenas, instó ayer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al vicepresidente tercero y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, y al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, a pedir perdón a todos los andaluces y los parados por las prejubilaciones "ilegales" detectadas en los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE). Para Arenas, el escenario idóneo para entonar ese mea culpa habría sido la convención municipal que los socialistas cerraron ayer en Sevilla y que fue clausurada por el secretario general del PSOE.

Arenas, que acompañó en Granada al candidato de su partido a la Alcaldía el 22-M, José Torres Hurtado, que afronta su reelección en estos comicios, volvió a referirse al caso como "un gran escándalo" e insistió una vez más en la necesidad de investigar la trama. El líder de los populares andaluces hizo referencia a las declaraciones de Chaves acerca de que la mejor manera de combatir la corrupción es "darle información a los ciudadanos y a la oposición". "Y lo dice el señor Chaves, que lleva 15 años sin aceptar una comisión de investigación", se quejó Arenas.

"Esto es un gran escándalo para toda Andalucía, en el que unos han cogido unos fondos de empleo, y que a través de esos fondos, de los famosos ERE, han obtenido pensiones ilegales, cuando nunca han trabajado en esas empresas. Y ha habido algunos que han intermediado y se han llevado comisiones de los fondos de empleo de una comunidad con un 1.100.000 parados. Yo tengo que decir que nadie confunda a Andalucía con esos presuntos delincuentes, porque Andalucía es mucho más", enfatizó el presidente del PP-A. Para Arenas, "es una vergüenza que mientras se recortan las pensiones a todos los españoles, se les busquen pensiones ilegales a los amigos".

Todo el asunto de los ERE se ha producido porque en Andalucía, en opinión del número uno de los populares en la comunidad autónoma, "se está huyendo del derecho administrativo" y se ha puesto en marcha una "administración paralela" en la Junta, con más de 300 organismos, y "no hay un control de los funcionarios, ni transparencia, ni publicidad". Aquí enlazó Arenas el caso de los ERE irregulares con el llamado funcionariazo, con el que el Ejecutivo de Griñán reordenará el sector público andaluz, y dijo que si finalmente es elegido presidente de la Junta, los funcionarios serán los que lleven la "gestión diaria", de manera que no habrá "ni un sólo euro" que no tenga el control de ese sector. En su discurso, Arenas animó al secretario general del PSOE de Sevilla y ex consejero de Empleo y Desarrollo Tecnológico, José Antonio Viera, a no querellarse contra los líderes del PP "sino contra sí mismo y con los que se han llevado el dinero de los andaluces a través de los ERE".

Por otro lado, Arenas advirtió que "vienen tiempos difíciles. Aquí hemos vivido todos por encima de nuestras posibilidades, empezando por los bancos, que ahora no tienen un euro para prestar a los ciudadanos. Lo que no es posible es que las pymes, las familias y los autónomos se hayan dado cuenta de que la fiesta se ha acabado y Griñán, Chaves y Zapatero sigan bailando y despilfarrando como están haciendo". También hizo alusión a las declaraciones del ministro de Fomento, José Blanco: "Pepiño, que aunque no le gusta que le digan Pepiño es Pepiño, ha dicho que Rajoy y Arenas son incompatibles con la democracia. Hay que ver las cosas que dices, Pepiño. Estoy seguro que se quedó tan tranquilo", ironizó.