Las familias andaluzas siguen sin valorar la FP

La Formación Profesional aún no está lo suficientemente valorada en Andalucía. Un estudio elaborado por el foro de investigación periodística Educa2020 –en el que colaboran la Fundación AXA, Sigmados, la Consejería de Educación y la Confederación de Empresarios de Andalucía– demuestra que las familias de esta comunidad autónoma tienen una visión peor de los ciclos formativos que la media española.

En concreto, esta percepción se sitúa en el 80,6% de los encuestados, porcentaje tres puntos por encima del total español. Un resultado que no es de extrañar si se tiene en cuenta que los propios padres reconocen que en rara ocasión han sugerido a sus hijos esta opción para su futuro formativo. El 75% de los entrevistados afirma que nunca han hablado con los orientadores sobre esta posibilidad.

El estudio viene a corroborar los datos que han demostrado sondeos anteriores, en los que se evidencia que la universidad sigue siendo el objetivo principal en la mayoría de los hogares andaluces. De hecho, el informe de Educa2020 revela que esta opción es la preferida por los padres que han pasado por las aulas universitarias. Y ello, pese a la realidad de un mercado laboral donde las empresas reclaman cada vez más un perfil técnico para sus empleados, más próximo al que otorga un título en FP que un grado de formación superior.

Para Josep Alfonso, director de la Fundación AXA, “la adecuación de la formación a las necesidades económicas de un país es clave para el crecimiento, de ahí la necesidad de revalorizar e impulsar la Formación Profesional”. En la presentación del informe, que ha tenido lugar este lunes en la sede de la CEA, el presidente de la referida entidad, Javier González de Lara, incidió en “la necesidad de llegar a un pacto educativo en España y, entre otras cuestiones, potenciar la FP Dual, que es una de las grandes alternativas educativas y de futuro para los jóvenes y para las empresas”.

Sobre los motivos de la “mala imagen” de los ciclos formativos, seis de cada diez padres consultados estiman que dichos estudios tienen “peor consideración social”, mientras que la otra razón de esta consideración es la de que “sólo estudian FP quienes no puede seguir carreras superiores”. Razonamientos en todo caso anquilosados en la sociedad española y que hace tiempo que no se corresponden con la realidad de esta enseñanza.

Otro dato de esta encuesta es la preferencia de las familias andaluzas por el Bachillerato de Ciencias (cuyas salidas profesionales tienen un alto grado funcionarial), que elige el 46% de los encuestados (la media española es del 40%) frente al tecnológico, humanístico, de ciencias sociales y arte, al que optan en porcentajes más reducidos. Los estudiantes andaluces a la hora de elegir una FP se decantan por los módulos de gestión administrativa y técnicos en redes.