Rafael Osuna, secretario provincial de SATSE Córdoba:“Tenemos nuestra provincia hipotecada en términos de salud”

-El próximo 5 de abril está prevista una concentración masiva a nivel autonómico para denunciar el incumplimiento del SAS con respecto a los trabajadores de la sanidad y que afecta especialmente a las enfermeras y fisioterapeutas. ¿Cuál es el origen de este conflicto?

–Los profesionales estamos en pie de guerra con la Consejería de Salud ante el incumplimiento del acuerdo de Atención Primaria y Carrera Profesional firmado por SATSE, CCOO, UGT y CSIF, el pacto fue fruto de una negociación leal y transparente entre las organizaciones sindicales y la Administración en la Mesa Sectorial de sanidad, donde ambas partes reconocieron la representatividad y capacidad negociadora de la otra. La Consejería decidió en 2024, cuando entraba en vigor, no cumplirlo y originó el conflicto. Se trata de un buen acuerdo que el SAS firma e incumple, y que en el Caso de la Atención Primaria pretende eliminar las listas de espera, con un incremento de la plantilla de 2414 profesionales en la comunidad autónoma en 2024 (921 enfermeras, 570 fisioterapeutas) viéndose incrementadas todas las categorías (médicos, administrativos, trabajadores sociales, terapeutas ocupacionales, logopedas, podólogos, etcétera).

–Según denuncian, el modelo andaluz de carrera profesional adolece de varios problemas. Uno de ellos tiene que ver con las diferencias retributivas variables, que puede suponer una merma en los ingresos de los profesionales andaluces de unos 600-700 €

–El modelo Andaluz de Carrera Profesional que afecta a todo el SAS (Hospitales y Centros de salud) es más complejo que los existentes en el resto de las comunidades autónomas, se le exigen más méritos y esfuerzos a los trabajadores de la sanidad para ascender en Andalucía, y las cantidades a abonar están por debajo de la media nacional. El último informe anual del Ministerio de sanidad sobre situación actual y estimación de necesidades de enfermería en España indicaba diferencias salariales de hasta 1000 euros entre regiones. Y es que la propia normativa estatal así lo permite. La Ley 55/2003 del Estatuto Marco de los Servicios de Salud, diferencia las retribuciones de los profesionales entre las fijas (artículo 42) que serán iguales en todos los servicios de salud (sueldo base y trienios), y las retribuciones variables (artículo 43), entre las que están la Carrera Profesional, que podrán ser diferentes en cada comunidad. Lo que se convierte en un arma de las comunidades autónomas para retribuir mejor y hacer acopio de profesionales en un mar revuelto y con escasez de médicos y enfermeras en todo el estado, quedando Andalucía en una situación de vulnerabilidad al disponer de un modelo de carrera que paga menos, lo que ocasiona la actual fuga de profesionales y la incapacidad de retener talento. Más de 100.000 profesionales sanitarios, están discriminados negativamente si comparamos la carrera profesional del Servicio Andaluz de Salud con el resto del Estado, de los cuales 35.000 son enfermeras y fisioterapeutas.

”Cuando un profesional vuelve a Andalucía, se le ha de reconocer el nivel de carrera profesional”

–Junto a los impagos por parte del SAS denuncian que sigue pendiente la homologación de la Carrera Profesional. ¿Qué significa esta no homologación para los profesionales de la sanidad?

–La normativa actual indica que cuando un profesional a través de un concurso de traslados vuelve a Andalucía, se le ha de reconocer y homologar el nivel de carrera profesional que tuviese reconocido en el servicio de salud de procedencia. Estos procesos de homologación que es un simple trámite administrativo tardan en resolverse años.

–¿Qué razones aduce el SAS para explicar los retrasos en los pagos y la homologación?

–El SAS se encuentra acomodado en una situación de abuso de poder, adeuda miles de euros a centenares de profesionales desde enero de 2023 y juega con la ventaja de no pagar intereses de demora, aunque pague dos años más tarde, por lo que el derecho a percibir esas retribuciones puntualmente se ve pisoteado y causa indefensión en el trabajador que observa cómo cualquier retraso de un impago a la administración tiene consecuencias, pero cuando la administración no cumple aquí no pasa nada. Todo ello ocasiona crispación y desencanto.

“El derecho a percibir las retribuciones puntualmente se ve pisoteado por el SAS”

–¿Qué problemas se encuentran los profesionales de la sanidad andaluces que quieren volver a la comunidad? ¿Cuál es su situación laboral y económica?

–La vuelta a casa tiene su cara y su cruz. Nos indican que el aspecto negativo son unas retribuciones más bajas en Andalucía y unas ratios menores de enfermeras por población, lo que incide en que existen menos profesionales por paciente tanto en hospitales como centros de salud, ello ocasiona mayores cargas de trabajo. La parte positiva suele ser personal y la decisión individual.

–Teniendo en cuenta que se produce esa fuga de talento andaluz hacia otras comunidades y las dificultades que se encuentran los profesionales cuando quieren regresar a Andalucía, ¿cómo repercute esta situación al usuario de la sanidad pública?

–No disponer de profesionales suficientes tiene nuestra provincia hipotecada en términos de salud. El SAS en Córdoba no puede rentabilizar sus centros por falta de enfermeras y de médicos. Tenemos centros cerrados al 90% como el Hospital de Palma del Río, y quirófanos y consultas cerradas en los hospitales de Puente Genil y Peñarroya-Pueblonuevo, o el cierre de la Unidad de Cuidados Respiratorios Intermedios del Hospital Reina Sofía, y el tercer punto de Urgencias extrahospitalarias en la capital de Córdoba sin abrir, entre otras. El conjunto de Hospitales y Centros de Salud de la provincia tienen mermadas sus plantillas, y las listas de espera son la dura expresión de esa incapacidad para dar respuesta a las necesidades de la población.