La reforma del Archivo Municipal de Córdoba se prolongará hasta 2024

Patrimonio

El Ayuntamiento adjudica la segunda y última fase de las actuaciones a la UTE formada por las empresas Construcciones Serrot y Actua Infraestructuras por algo más de un millón de euros

Desde las entrañas del Archivo Municipal de Córdoba

Finaliza la primera fase de las obras de rehabilitación del Archivo Histórico Municipal de Córdoba

La directora del Archivo Municipal, Ana Verdú, muestra la grafía de documentos antiguos que guarda en una de las sedes
La directora del Archivo Municipal, Ana Verdú, muestra la grafía de documentos antiguos que guarda en una de las sedes / Juan Ayala

La reforma de la sede del Archivo Municipal de Córdoba, en el número 10 de la calle Sánchez de Feria, se prolongará hasta 2024. El Ayuntamiento, a través de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), ha adjudicado la segunda y última fase de las actuaciones a la UTE formada por las empresas Construcciones Serrot y Actua Infraestructuras por algo más de un millón de euros -concretamente, por 1.087.087- y un plazo de ejecución de ocho meses. La primera fase concluyó en agosto del año pasado después de que se iniciara en diciembre de 2018.

El plazo de ejecución de esa primera fase era, en principio, de 18 meses, plazo que se prolongó por mucho más tiempo dado que las obras permanecieron paradas. Y es que, a lo largo de la primera fase, determinados hallazgos pararon la redacción del proyecto tras haber descubierto muros y la portada mudéjar, que llevaron a replantear el proyecto de rehabilitación del edificio y sus usos. En estos hallazgos también se pudo determinar que, aunque se pensaba que era posterior, el edificio realmente data del siglo XIII, por lo que es el segundo más antiguo del patrimonio municipal de Córdoba.

El Archivo Municipal reúne los documentos demostrativos de derechos, obligaciones y acontecimientos diversos de la colectividad que convive en una misma ciudad, representada y gestionada en su Ayuntamiento. Documentos antiguos y modernos, escritos sobre pergaminos o papel, manuscritos, mecanografiados o legibles por ordenador, en fotografía o vídeo, todos ellos coexisten en el archivo, depositario, en última instancia, de la Historia de la ciudad. Esos documentos se custodian en dos plantas en una sede provisional, ubicada justo al lado de la sede principal, que está siendo objeto de reforma.

El Archivo Municipal de Córdoba es el servicio encargado de custodiar la documentación generada, recibida y tramitada en el Ayuntamiento a lo largo de toda su historia. Como Archivo Histórico conserva documentos desde 1241 y como archivo administrativo es el depositario de la documentación más reciente, tramitada por las diferentes unidades municipales en el ejercicio de sus funciones.

La sede central del Archivo Municipal de Córdoba es un edificio de profundas raíces históricas: la antigua casa solariega de los Guzmanes, noble familia ligada a Córdoba desde los tiempos de la Conquista cristiana. El inmueble, situado en pleno casco histórico, es de estructura típicamente cordobesa. Las habitaciones se disponen en torno a dos patios ajardinados con fuente central. En el segundo de ellos destaca un alfarje policromado y tres ajimeces mudéjares, datados ambos de fines del siglo XV.

La casa ha sido, a lo largo de los siglos, morada de ilustres personajes cordobeses. El médico investigador Bartolomé Sánchez de Feria –nombre actual de la calle- la habitó en el XVIII. A principios del XX la habitó Narciso Sentenach, director del Museo Arqueológico. Posteriormente fue sede del Archivo de la Delegación Provincial de Hacienda y vivienda de su director, el archivero José de la Torre y del Cerro. El Ayuntamiento adquirió esta propiedad con idea de instalar en ella el Instituto Municipal de Cultura cordobesa, aunque, finalmente, fueron el Archivo, la Biblioteca y la Hemeroteca Municipales quienes se instalaron en la casa en el año 1969.

Las obras de la segunda fase

La segunda y última fase se centrará, básicamente, en finalizar parte de la rehabilitación que quedó pendiente de la primera, con labores de pintura y carpintería que hay que ejecutar, donde se descubrió una portada mudéjar que hay que proteger, actuar sobre el suelo de piedra del inmueble, que está generando humedades en las paredes del mismo, y unos trabajos que en un principio no se tenían previstos en los patios del edificio histórico.

Entre las actuaciones inacabadas que es necesario finalizar en el ámbito de la restauración de elementos patrimoniales del inmueble se encuentran las actuaciones de acabado de los alfarjes (artesonados de madera) y de los ajimeces; igualmente se aplicará el tratamiento final a las fábricas de sillería tanto del interior como de la portaba de la fachada. Las vidrieras de las ventanas de la primera planta se restaurarán y se devolverán a su posición original, protegiéndolas hacia el exterior con nueva carpintería.

Sobre la portada mudéjar, descubierta y recayente al patio segundo se realizarán las actuaciones de encuentro con el alfarje de la galería del patio y el correspondiente llagueado. De la misma forma se terminarán los revestimientos, las carpinterías, iluminación, vidrios y otros que no se finalizaron con el contrato de obra adjudicado a la UTE mencionada.

En otro orden de cosas, durante el transcurso de las obras, fueron descubiertas y se pusieron de manifiesto situaciones a corregir en el edificio como el sistema de apoyo y construcción de los pavimentos de los andenes de los patios que son causa de humedades por capilaridad en los muros. Con este nuevo proyecto, se procederá a documentar todo el pavimento de las galerías, para desmontarlo, asegurar la base del mismo, y recolocarlo de nuevo en su posición original, para que el inmueble mantenga su imagen histórica.

Se llevará de igual forma una actuación sobre el pavimento de chino cordobés de los patios, de forma que se recupere su fisonomía y los parterres existentes en ellos y se recuperará la vegetación y plantas que resultaron afectadas como consecuencia de los primeros trabajos.

stats