El Ayuntamiento impulsará medidas para reducir los efectos de la pobreza

El Ayuntamiento quiere reducir los efectos de la pobreza energética. La teniente de alcalde de Hacienda y Vivienda, Alba Doblas, aseguró ayer que al final del mandato se acometerá una revisión del estudio para conocer si se ha podido reducir el número de familias afectadas. La concejala consideró "inmoral" que se haya rescatado a la banca "y haya personas si servicios básicos", por lo que insistió en que se pondrán en marcha medidas desde las distintas delegaciones, como la posibilidad de que se destinen ayudas a la rehabilitación de inmuebles enfocadas a reducir los costes, como la mejora del acristalamiento o los aislamientos. El concejal de Educación, Andrés Pino, apostó igualmente por la información y la concienciación como herramientas fundamentales para cambiar la tendencia. De hecho, explicó que los hábitos que se adquieren de niños se mantienen en la vida adulta, mientras que es más difícil cambiarlos cuando ya se llega a una edad. Desde el área de Educación, a través de los programas municipales, se van a impartir tres talleres, además del que ya se ha puesto en marcha: Apaga más, paga menos.

La concejala de Infraestructuras, Amparo Pernichi, destacó por su parte que "hemos recuperado el servicio del alumbrado" y recordó que uno de los objetivos del nuevo plan es "mejorar la eficiencia energética". De hecho, con la primera fase del programa enmarcado en los fondos Jessica el Ayuntamiento ha ahorrado 600.000 euros anuales. El edil de servicios Sociales, Rafael del Castillo, destacó por su parte el trabajo que se está cometiendo desde Servicios Sociales y desde la Oficina de la Vivienda. Del Castillo recordó que este año se "multiplicaron por cuatro" las ayudas de emergencia y adelantó que la intención es aumentar también esta cantidad en las cuentas del año que viene.

En el estudio también se establecen algunas medidas. Así, la puesta en marcha de programas impulsados por el poder público en materia de ayudas para la ejecución de reformas menores n las viviendas para mejorar su eficiencia energética "permitiría no sólo mejorar las condiciones de habitabilidad, sino reducir la factura energética de los hogares" mediante al apoyo de la Administración para las familias con menor renta disponible.

El desarrollo de medidas de información, apoyo a la rehabilitación energética y la puesta en marcha de iniciativas que permitan un mejor acceso a la información, eliminaría la brecha de la cultura energética y permitiría "en el medio plazo recuperar a numerosas personas que hoy deben priorizar" y renunciar a algunas necesidades básicas.

El estudio, por tanto, apuesta por la puesta en marcha de puntos de información dirigidos al consumidor vulnerable o el desarrollo de un programa de detección de necesidades en materia de rehabilitación energética que contara con un programa de ayudas a las pequeñas reformas necesarias. Esto, apunto el informe, no sólo mejorará los índices de pobreza energética, sino que contribuiría al objetivo de la sostenibilidad urbana.