Córdoba ampliará su red de parques para perros con siete nuevos

Medio Ambiente

Estas zonas de esparcimiento canino se ubicarán en Fátima, Fidiana, el Parque de Levante, el Parque del Flamenco, Villarrubia, la Asomadilla y Alcolea

Un hombre pasea a su perro en el parque canino de Vial Norte.
Un hombre pasea a su perro en el parque canino de Vial Norte. / Miguel Ángel Salas

Córdoba contará con siete nuevas zonas de esparcimiento canino o parques para perros. A los recintos de este tipo que ya están en funcionamiento en la capital cordobesa, los de Miraflores, Paraíso Arenal, Arroyo del Moro, Parque Cruz Conde, Vial Norte y Fray Albino; se sumarán los de Fátima, Fidiana, el Parque de Levante, el Parque del Flamenco, Villarrubia, la Asomadilla y Alcolea. Además, se reformará el el Parque Cruz Conde.

Los parques para perros son toda una tendencia a día de hoy y hasta casi una necesidad primaria, pues suponen un orden y una limpieza especial para un hábito tan común como que los ciudadanos saquen a pasear a sus mascotas. Por eso mismo, cada vez estos recintos están más instaurados en todos los municipios y Córdoba no se queda atrás en implantar estas infraestructuras tan demandadas por los vecinos.

La empresa de Saneamientos de Córdoba (Sadeco) ha adjudicado las actuaciones a la empresa Contenur por un montante global de 233.285 euros -al concurso para realizar las obras se han presentado cuatro empresas-. En concreto, se trata de dos lotes de obras. En un primero están integrados los parques caninos de Fátima, Fidiana, el Parque de Levante y el Parque del Flamenco, con un presupuesto de 135.613 euros; y en un segundo, los de Villarrubia, la Asomadilla, Alcolea y la reforma del ubicado en el Parque Cruz Conde, con un montante de 233.258 euros. Las obras se desarrollarán durante cinco meses.

El de Fátima irá ubicado en el parque del Doctor Alfonso carpintero, mientras que el de Fidiana, en los jardines que hay junto a la sala de barrio de dicha zona. Mientras, el de Villarrubia se ubicará en los jardines del polígono industrial La Azucarera, junto al ecoparque y el de Alcolea, en los jardines de la urbanización que hay junto al campo de fútbol de la barriada.

En la memoria en la que Sadeco justifica la necesidad e idoneidad de las obras, la empresa municipal recuerda que en enero de 2017 instaló la primera zona de esparcimiento canino en los jardines del parque Cruz Conde "a petición del vecindario y del consejo de distrito" y que continuó realizando nuevas zonas "conforme iban siendo demandadas por los vecinos, asociaciones de vecinos", realizando en los últimos cinco años las zonas, en orden de ejecución, "del parque de Miraflores, la zona verde de la avenida Isla Fuerteventura, parque Paraíso Arenal, Jardines Vial Norte y Jardines Sector Sur".

"Como la demanda continuó, se decidió acumular peticiones y realizar una segunda fase de implantación con un procedimiento abierto", sentencia Sadeco en el documento. "Todas las zonas de esparcimiento canino han sido consensuadas con los consejos de distrito de la ciudad, y suponen una segunda fase de implantación, ya que se están recogiendo peticiones para una tercera, lo que dará lugar a una red de zonas de esparcimiento canino por toda la ciudad", añade.

Tras la construcción de nuevas zonas, la empresa suele poner en marcha una campaña para informar sobre las obligaciones que tienen los usuarios de las zonas de esparcimiento canino, así como otras de formación de los propietarios para el adiestramiento de los animales que favorezca el correcto uso estos espacios.

En estas actuaciones también se informa sobre las nuevas aperturas de este tipo de zonas en la ciudad; se conciencia sobre el abandono cero, las adopciones y se promueve el voluntariado, acciones que se acompañan con el reparto de carteles en los establecimientos de la zona.

En relación al uso de los centros, los informadores de Sadeco explican cómo se debe entrar en el ZEC con el animal; la división de zonas según tamaño; el uso responsable de los recursos: agua, bolsas, papeleras y material de entrenamiento; la recogida de excrementos y el uso de bozal en aquellos que sean potencialmente peligrosos.

La formación a los usuarios es relativa al adiestramiento y el uso correcto del material de entrenamiento (saltímetro, balancín, eslalon, aro y túnel, entre otros); los tipos de agresividad, enfocado en protección derecursos y territorial, o el manejo del conflicto. También se imparten nociones sobre primeros auxilios y recomendaciones sanitarias.

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