Más de 5.000 personas exigen en las calles el fin de la violencia de género

"Todos somos una pieza clave para frenar la violencia de género". Así se pronunció ayer la portavoz de la Plataforma Cordobesa Contra la Violencia a las Mujeres, Elena Vega, justo antes de que diera comienzo la manifestación que se sucede cada 25 de noviembre, en la que participaron, según estimaciones de la Policía Local, más de 5.000 personas. Vega explicó que la de este año es, posiblemente, una marcha en la que se haya salido con más fuerza que en otras. La razón, el juicio abierto por la supuesta violación en los Sanfermines. "Salimos a la calle con más indignación porque vemos que el sistema patriarcal es un obstáculo real incluso para la Justicia", lamentó Vega, quien insistió en que no tiene sentido que en procedimientos como el de La manada (como se conoce el caso anteriormente citado) se ponga el foco en la víctima y no en los autores. Precisamente el mediático caso protagonizó gran parte de las pancartas que se pudieron ver en la manifestación -bajo el lema Ni una más- (como es el caso de una en la que podía leerse "La manada somos nosotras") que culminó en el Ayuntamiento y que contó con gran presencia de políticos, como la alcaldesa, Isabel Ambrosio, el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, o el coordinador de IU Andalucía, Antonio Maíllo. "Nos tocan a una, nos tocan a todas" o "Rompamos las cadenas de la violencia" fueron otras de las consignas que se pudieron escuchar en la marcha donde además también estuvieron presentes varias asociaciones feministas de toda la provincia.

Desde la plataforma organizadora insistieron en la necesidad de crear un pacto de estado para luchar "contra esta lacra" y parar abrir los ojos ante esta realidad: "Hay que luchar contra esa falsa conciencia de igualdad que está en la sociedad y que es mentira. Queda mucho por recorrer, hagamos entre todos una lucha real".

Por su parte, la alcaldesa recordó que cualquier logro "empieza por la sensibilización" y agradeció que los cordobeses "se echen a la calle para mostrar su rechazo al mayor elemento de desigualdad que sigue existiendo en una sociedad y que es la violencia hacia las mujeres". Ambrosio reconoció que se han tomado políticas en este aspecto pero lamentó que no hayan sido "las suficientes", algo que constatan, añadió, "los datos". "Córdoba, en cada una de las batallas democráticas ha sido capaz de coger el testigo y ahora no puede quedarse atrás", pidió Ambrosio, quien lanzó un mensaje a las mujeres víctimas de violencia de machista: "La ciudad de Córdoba está con ellas".

También habló la consejera de Justicia de la Junta de Andalucía y exalcaldesa de la ciudad, Rosa Aguilar, quien hizo referencia a los datos de víctimas mortales, los cuales, apuntó, "nos llaman al conjunto de la ciudadanía a tener la mano tendida a las mujeres para que den un paso adelante y sepan que no están solas". Aguilar añadió además que el gobierno andaluz es "la red" para que esas mujeres puedan salir de la situación en la que se encuentran y también se dirigió a los más jóvenes para pedirles que sean "activistas" porque "con ellos ganaremos la batalla al terrorismo machista".

Maíllo habló de los micromachismos "cotidianos" contra los que se lucha, recordó, desde la educación. "Hay que hacer un nuevo pacto contra la violencia de género a través de actuaciones de carácter integral y preventivas que se vinculen con la educación", apuntó el coordinador de IU en Andalucía. "Desde Córdoba y desde toda Andalucía abogamos por una sociedad de igualdad y eso es incompatible con el machismo en cualquiera de sus manifestaciones", manifestó.

El presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, destacó que desde las instituciones se tiene la obligación de poner las medidas para luchar contra esta violencia y "tenemos la convicción de que hay que seguir avanzando en la igualdad real entre hombres y mujeres", sentenció.