El colectivo en Defensa del Patrimonio Industrial reivindica el valor de la antigua locomotora de Santa Rita
Bartolomé Olivares considera que el legado industrial continúa sin ponerse en valor y sin la conservación adecuada
Con número de matrícula 020.212, la locomotora Santa Rita pide protección, situada en la Glorieta Conde de Guadalhorce. Las asociaciones en Defensa del Patrimonio Industrial de Córdoba, vecinos Vial Huerta de la Reina y Amigos del Ferrocarril han presentado de manera conjunta una instancia al Ayuntamiento para denunciar el estado de la máquina por el 160 aniversario de la llegada del ferrocarril a la ciudad.
El presidente de la asociación en Defensa del Patrimonio Industrial, Bartolomé Olivares, ha destacado el valor de la locomotora, que “fue una de las primeras máquinas que actuaron en España”, cuando cubría una de las principales vías férreas del país, Madrid-Zaragoza-Alicante.
Ha añadido, además, que esta parte tan importante del legado industrial sigue “sin ponerse en valor y sin conservarse” de manera adecuada. Olivares ha matizado que “está desguazada y es víctima del vandalismo”. Estos son los motivos por los que pide que se trate “de igual forma que el resto de patrimonio”, como el arqueológico o histórico.
La historia de Santa Rita comienza desde su fabricación en París en 1864 hasta que fue recuperada por la empresa cordobesa Electromecánicas, donde estuvo en funcionamiento hasta 1970.
Del mismo modo, ha señalado que los restos romanos cercanos a la locomotora “tienen su cartel y están vallados”. No obstante, esto no ocurre con Santa Rita, por lo que han solicitado la instalación de una placa conmemorativa para unir la historia del ferrocarril con la de la antigua fábrica, que ha celebrado su primer centenario.
En 1996, la fábrica cedió la máquina a la institución pública. Por ello, Olivares ha añadido que “es el Ayuntamiento quien debe restaurar y conservar esta pieza industrial tan destacada”.
Los principales daños observados de la máquina de vapor que deben tratarse son “las chapas y vigas carcomidas”, además de la basura y los graffitis exteriores, por lo que “una capa de pintura no es suficiente”.
Por su parte, el presidente de la asociación de Amigos del Ferrocarril, Álvaro Olivares, ha aclarado que han conseguido logros, aunque se ha retrocedido también. El gobierno local se hizo cargo de la gestión y gastos del traslado, pues en un primer momento, se ubicaba en la glorieta de las Tres Culturas, donde ha añadido que “estaba vallada y protegida”.
Respecto a su último emplazamiento, frente a la Antigua Estación, piensa que es “un sitio idílico” por la simbología, pero se encuentra en la intemperie. Ha aconsejado un mantenimiento y saneamiento periódico y protección para evitar el vandalismo. “Si continúa abandonada, tarde o temprano desaparecerá”.
Santa Rita “movía todo el ferrocarril de Córdoba, con 240 toneladas de cobre y carbón” ha recordado el último maquinista y mecánico de la máquina desde que llegó esta a Córdoba, Alberto Villalba. “Seis vagones llenos y hasta 22 vacíos” transportaba Villalba en dirección a la antigua fábrica.
El maquinista a concluido diciendo que “siento pena por esta joya” porque es “de la más importantes que ha tenido la ciudad” en el último siglo.
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