Manuel García Parody plantea la revisión de los conceptos y mitos de la historia de España
Literatura
El historiador, que ha desarrollado gran parte de su labor docente en Córdoba, señala que el gran problema que tiene la historiografía española es el identificar lo español con lo castellano y con lo cristiano
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La historia de España está plagada de conceptos erróneos y de mitos que hay que revisar, según plantea el historiador Manuel García Parody en La otra historia de España (Almuzara, 2024). García Parody (La Línea de la Concepción, Cádiz, 1946) ha afirmado que "la historia de España tiene muchos conceptos ya preestablecidos, que han hecho que tenga todavía muchas lagunas" y que hay "conceptos que por ahí se están repitiendo que, en mi opinión son conceptos erróneos".
El autor, con más de una veintena de libros de historia publicados, catedrático jubilado de Geografía e Historia y que ha sido profesor de las Universidades de Sevilla, Córdoba y la UNED, ha manifestado su "especial preocupación por la terminología que utilizamos a la hora de transmitir el conocimiento de la historia".
Para García Parody, "el gran problema que tiene la historiografía española, sobre todo desde el siglo XIX, es el identificar lo español con lo castellano y con lo cristiano". De hecho, "el concepto de nación española surge en las Cortes de Cádiz o en esa guerra contra el francés o contra los bonapartistas que mal llamamos de la Independencia", aunque "España como Estado ya se había configurado con los Decretos de Nueva Planta de los Borbones cuando hay una uniformidad jurídica-administrativa, aunque se mantengan algunas singularidades".
A principios de curso, el autor preguntaba a sus alumnos quién había construido la Mezquita y si consideraban al catalán una lengua española. Las respuestas mayoritarias eran que el templo lo habían levantado "los moros" y que el catalán no era una lengua española, aunque aquí "hay un poco más de discrepancia".
La Mezquita y el catalán
"Los que construyen la Mezquita de Córdoba eran tan cordobeses como los de hoy, únicamente que esos, en lugar de rezar a Dios padre a Dios hijo y a Dios Espíritu Santo, rezaban a Alá y se encomendaban a su profeta Mahoma", razona en base a que "nada más que hay que ver la genealogía de los emires y califas de Córdoba, emparentados con reyes y, sobre todo, con mujeres vasco-navarras".
Y ha señalado que "si entendemos que el catalán no es una lengua española, ya estamos diciendo que los catalanes no son españoles puesto que el catalán es una seña de identidad de un territorio español como es Cataluña". De ahí que el problema radique, ha subrayado, "en identificar España solo con lo cristiano y con lo castellano", por lo que "hay que empezar a dar la idea de que España es mucho más que lo cristiano, aunque sea una parte importante de nuestra seña de identidad, y mucho más que lo castellano".
Pero con esta segmentación también "podríamos irnos al otro lado", ha puesto énfasis, "y cuando Cataluña reivindica su derecho a la independencia basándose en argumentos históricos, habrá que decir cuándo fue independiente", ya que "eran unos condados procedentes de la Marca Hispánica Carolingia que se segregan de facto, que no se iure, con Wifredo el Velloso, y que a partir del siglo XII forman parte de otra entidad que se llama la Corona de Aragón".
En La otra historia de España, Manuel García Parody, que ha desarrollado gran parte de su labor docente en Córdoba, aborda cuestiones que considera en ese saco de conceptos erróneos y mitos.
Ni reconquista ni Guerra de la Independencia
No hubo reconquista de los cristianos frente a los musulmanes en la Península: "¿Qué se le había perdido a Fernando III en Córdoba? ¿Qué se le había perdido a los Reyes Católicos en Granada? Absolutamente nada. Es decir, no hay una reconquista, hay unas conquistas. Pero es que, además, las conquistas fueron las mínimas. Lo más que hay en el medievo es una repoblación de territorios vacíos que van siendo progresivamente ocupados por los reinos cristianos del Norte de diferentes maneras".
La lucha contra los franceses entre 1808 y 1812 no fue una Guerra de la Independencia: "España nunca perdió la independencia. España era un reino aliado de Napoleón Bonaparte como también fue un reino independiente con los primeros Borbones, pese a que una serie de pactos de familia vinculaban la política de un lugar y otro".
García Parody explica en su nueva obra "el mito de Pelayo, el mito de Covadonga", ya que "la primera referencia a Covadonga en la fuente cristiana es de 160 años después de que ocurrieran los hechos" o el motivo por el que considera erróneo que a los países del Sur de América se le denomine América Latina en vez de Hispanoamérica. O lo que considera "el remate de los mitos", el de Santiago, porque "¿quién se puede creer que allí está enterrado Santiago? No hay absolutamente ninguna prueba", más allá de la constatación de que sea "un invento de determinados canónigos de la Edad Media porque gracias a ello se le hacía todos los años una ofrenda en dinero y en especie a la archidiócesis compostelana".
Una ofrenda que García Parody califica de "una idea medieval", y no deja pasar por alto se sigue haciendo cada 25 de julio por el jefe del Estado o por su representante con las únicas excepciones de cuando la suprimieron las Cortes de Cádiz y la II República.
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