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La sobrecarga asistencial y la penosidad que suportan los facultativos es "inadmisible". Así lo ha advertido este viernes el Sindicato Médico de Córdoba (Simec), que ha llamado la atención sobre el hecho de que los médicos que prestan su servicio en la provincia se encuentran "agotados". Y no solo eso: "Son presos del hartazgo provocado durante años, muchos de ellos enfermando, sin poder conciliar la vida laboral y familiar".
Así que, en pleno verano, la situación es, de nuevo, "dantesca", como ha advertido el sindicato profesional, que con estas palabras confirma la situación denunciada por vecinos de zonas rurales como Ochavillo, Almodóvar del Río o Guadalcázar, que este jueves se concentraron ante la sede de la Delegación de Salud para exigir mejoras en sus consultorios médicos.
La radiografía del Simec es desalentadora. En los centros de salud, avisan, los facultativos soportan unas "condiciones intolerables", con ausencias que no se cubren, centros de salud "a un cuarto de gas", agendas con números "inasumibles" de citas sin apenas tiempo para los pacientes y con una demora "excesiva" en la obtención de las mismas, que puede alcanzar incluso los 15 días en determinados centros.
Según el Simec, tal es la demora que muchos de estos pacientes acaban acudiendo a un punto de urgencias de Atención Primaria, lo que provoca una "sobrecarga estéril", ya que al carecer de longitudinalidad "no son adecuados para resolver ciertos problemas". Todo esto tampoco es compatible con una "mínima calidad asistencial", lo que como consecuencia "también genera un grave problema de salud laboral entre los compañeros de los centros de salud de la provincia".
Por tanto, la situación de los médicos de los servicios de Urgencias de Atención Primaria tampoco es mejor. El Simec, directamente, la tacha de "lamentable". En la capital, vuelven a quedarse dos facultativos por punto, cuando deberían ser tres, y tanto en la capital como en las zonas básicas de salud "vuelve a existir un intolerable exceso de horas y de noches, con el gravísimo problema de salud laboral que ello genera".
A este respecto, el Simec lanza un mensaje a la población cordobesa: "Debe saber que el médico del que depende su vida o la de su familiar estará con frecuencia agotado y exhausto". El "deterioro" en las condiciones de trabajo de estos especialistas "se produce ya cuesta abajo, sin frenos ni disimulo", pues la Administración "parece empeñada en que sea imposible envejecer en un servicio de Urgencias".
"Las consecuencias son nefastas para la población, pues facultativos que han atesorado experiencia en un campo tan conflictivo y específico como las urgencias y emergencias médicas acaban abandonando el servicio. Nos prometen a bombo y platillo un tercer punto de urgencias extrahospitalarias en la capital, cuando apenas son capaces de dotar dignamente dos. Es, cuanto menos, incongruente", concluye el Simec.
La situación requiere de soluciones urgentes, mientras "la Administración presume de haber ofrecido contratos de seis meses", por lo que "su capacidad para fidelizar nuevos facultativos, lógicamente, ha sido nula". El Sindicato Médico de Córdoba ha denunciado además que sus propuestas para paliar estos déficits no han sido tenidas en cuenta.
La opinión de los facultativos respalda la denuncia pública realizada este jueves por la Córdoba rural, que se rebeló contra los recortes sanitarios que, en los consultorios médicos de los municipios más pequeños, se materializan con retrasos en las citas de Atención Primaria, falta de médicos especialistas e, incluso, cierres temporales. Todos estos problemas son de sobra conocidos en la entidad local autónoma (ELA) de Ochavillo del Río, en Almóvar del Río o en Guadalcázar, cuyos vecinos se concentraron a las puertas de la Delegación de Salud en Córdoba capital, en la avenida República Argentina, para visibilizar su malestar.
Y, también en los últimos días, el alcalde de Doña Mencía, Salvador Cubero (IU), remitió una carta al director gerente al Área de Gestión Sanitaria Sur para expresarle en persona su “preocupación” por “la atención que se presta a la ciudadanía menciana en el consultorio”.
El regidor advertía en su escrito de la “excesiva demora” en las citas médicas, y explicaba que desde Salud Responde, el canal oficial, tardan en asignar “al menos una semana”. También recalcaba la “sobrecarga de trabajo que los profesionales sufren al no contar con médicos de refuerzo”, de manera que –desvelaba– deben repartirse entre dos facultativos los usuarios de los profesionales ausentes por vacaciones, bajas o salientes de guardia.
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