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Córdoba/Jesús, que sufre parálisis cerebral, trabaja desde hace varios años con la Asociación Cordobesa de Parálisis Cerebral y Otras Afecciones Similares (Acpacys) y tiene muy clara cuál es una de las principales demandas que sufre este colectivo: la vejez. "Las personas con discapacidad cerebral también envejecemos y, para tener una vida dependiente, necesitamos más apoyo de las administraciones", ha recordado este miércoles en el acto celebrado por la organización para visibilizar a los pacientes que sufren este trastorno del desarrollo psicomotor en el Día Mundial de la Parálisis Cerebral.
Allí, Ana, al lado de Jesús y ante todos los pacientes del centro, ha recordado que "las personas con parálisis cerebral son parte de la sociedad" y que se enfrentan de manera precoz a problemas cotidianos como la menopausia, pues les llega "antes que a las mujeres sin discapacidad", lo que "empeora la calidad de vida" de quienes padecen este trastorno. Las mujeres sin discapacidad, de hecho, también sufren cuando tienen un familiar con parálisis en su familia. Eso lo ha reivindicado Paco, paciente de Acpacys, quien ha lamentado que "muchas mujeres tengan que dejar su trabajo para encargarse de los cuidados".
"Dentro de 10 años los mayores de 65 años tendremos más necesidades y necesitaremos más apoyo", ha destacado el paciente, que ha sido uno de los encargados de leer el manifiesto por el Día Mundial de la Parálisis Cerebral. Un discurso con el que la Asociación Cordobesa de Parálisis Cerebral y Otras Afecciones Similares ha exigido tanto a la Junta de Andalucía, como a la Diputación de Córdoba y al Ayuntamiento de Córdoba- cuyos representantes han asistido al acto en el centro-, que aumenten las ayudas en un mínimo del 10% con respecto al año anterior para "cubrir las necesidades" de sus pacientes.
Así lo ha reivindicado la presidenta de Acpacys, Rafaela Chounavelle, quien ha centrado la celebración adelantada del Día Mundial de la Parálisis Cerebral (6 de octubre) en la necesidad de atender a un colectivo que está envejeciendo porque "la mejor atención alarga su calidad de vida". Y es que, la asociación requiere "medios importantes para atender con calidad" a los 30 pacientes a los que atienden en un centro que este 2024 cumple 45 años trabajando con discapacitados cerebrales y otras afecciones similares y que ahora pasa "por una situación complicada". También cuenta con un centro de atención temprana con más de 100 niños.
"Nosotros somos servicios públicos que trabajamos con colectivos sin ánimo de lucro. Sin embargo, el sistema no es sostenible y, pese a que nosotros nos comprometemos, necesitamos que las administraciones se comprometan más", ha señalado Rafaela, quien ha pedido a las entidades públicas y organizaciones privadas "más financiación para cubrir los costes que desde hace años van subiendo" debido a la subida de los precios de los carburantes, de los alimentos y también de los trabajadores, quienes verán incrementado su sueldo próximamente tras una sentencia judicial en un 8%.
Aunque la presidenta de Acpacys ha confirmado que de un año a otro han subido las ayudas públicas un 6% y que a partir de mayo de este 2024 se aumentaron las subvenciones en un 4,5%, "no es suficiente para funcionar". El 60% de los gastos los cubre la asociación, ha asegurado la presidenta, quien ha lamentado que "no se cubra el ocio" de los pacientes y que, aunque "no hay lista de espera", necesitan "más recursos especializados para abordar el envejecimiento prematuro de las personas con parálisis cerebral, cuyos síntomas aparecen a los 35 años y se necesitan adoptar medidas de prevención".
El delegado del Gobierno, Adolfo Molina, quien ha asistido a la celebración del Día Mundial de la Parálisis Cerebral organizada por Acpacys, ha hecho hincapié en que el Consejo de Gobierno ha autorizado a la Consejería de Salud y Consumo gasto por un importe superior a los ocho millones de euros para la contratación del servicio de Atención Temprana bajo el régimen de concierto social. Como ha explicado el delegado, “estos centros atenderán a la población infantil menor de seis años con trastornos del desarrollo o con riesgo de presentarlos, así como a su familia y entorno, en los términos establecidos en la normativa vigente”. En toda Andalucía, el importe asciende a 96.867.456 euros.
El delegado se ha referido a la importancia de este programa "dirigido a los más pequeños y fundamental para detectar, evaluar y tratar de forma precoz cualquier alteración en el desarrollo infantil". De ahí que los datos facilitados por Molina han arrojado que Andalucía ha aumentado en un 27% su capacidad asistencial en atención temprana gracias a la implantación del modelo del concierto social y a un aumento del presupuesto del 40% respecto a 2016, desde que se regula la atención temprana en Andalucía. La Ley de Atención Temprana entró en vigor en marzo de 2023 y desde entonces, más de 4.000 menores cordobeses se han beneficiado de este servicio.
El delegado de Inclusión en el Ayuntamiento de Córdoba, Bernardo Jordano, y la delegada de Derechos Sociales de la Diputación de Córdoba, Irene Aguilera, han mostrado el apoyo a la reivindicación de un Acpacys, cuya entidad cuenta con un 70% de sus pacientes con una discapacidad de tercer grado y que estará presente el próximo 7 de octubre en el Congreso de los Diputados para trasladarle su exigencia al Gobierno de España.
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