Un anciano sin movilidad, la víctima del incendio en Las Moreras: "Lo busqué, pero las llamas me impedían pasar"

Córdoba/La fatalidad ha dejado otra víctima mortal de un incendio en la barriada de Las Moreras, solo mes y medio después de que falleciera uno de sus vecinos. Un anciano sin movilidad ha fallecido en la tarde de este jueves en la calle Músico Juan de la Encina tras desatarse el fuego en su vivienda, que también ha dejado heridos al afectar a los dos pisos superiores. Ni sus vecinos ni los cuerpos de seguridad han podido hacer nada para salvar su vida ante un incendio del que se desconocen las causas.

Diego Obrero estaba tranquilamente comiendo en su casa a eso de las 15:15 cuando su madre le advirtió de que de uno de los pisos de la primera planta de su bloque estaba saliendo fuego. Había llegado apenas un rato antes de trabajar y, dejando el almuerzo a medias, Diego no dudó en bajar corriendo para echar una mano. No se lo pensó y, al llegar al rellano del primero, de una patada echó la puerta abajo. Las llamas ya se expandían por gran parte de la vivienda, por lo que lo primero que hizo este joven fue socorrer de urgencia a su vecina.

Cogió a la mujer mayor y la sacó fuera de la casa, dejándola a salvo en el rellano. Una vez había puesto a buen recaudo a su vecina, Diego fue corriendo a rescatar a la pareja de la señora, que estaba en cama inmovilizado. "Busqué al hombre, pero no había manera. Las llamas me impedían pasar. Entonces me tiré de rodillas para buscarlo porque el humo no me dejaba ver bien. Pero era imposible, todo empezó a arder bestialmente y las llamas eran muy fuertes", ha explicado el vecino a el Día de Córdoba, horas después de lo sucedido mientras los bomberos terminaban de apagar las llamas de la vivienda.

Fue una "explosión" lo que impidió a Diego salvarle la vida a su vecino, un anciano que por su inmovilidad física no tuvo opción de huir por su propio pie. Volver atrás fue muy duro para Diego, y es que, aunque no le quedó más remedio que salvar su vida en una situación extrema, en su cabeza tiene muy presentes los "chillidos que daba el hombre" mientras las llamas entraban en su habitación. "¡Que me quemo!", es la frase que escuchaba Diego mientras volvía sobre sus pasos.

"Rescaté a la mujer, pero no he podido hacer nada por él", ha lamentado Diego Obrero en la tarde de este jueves negro para el barrio de Las Moreras, que ha perdido a otro vecino a causa de un incendio, el segundo en poco más de un mes. "Ahora por la tarde debía volver al trabajo, pero ya he avisado a mi jefe de que no estoy anímicamente preparado", ha comentado Diego, que trabaja como vigilante de seguridad y que desde este día se ha convertido en un auténtico héroe.

Allí, en el portal número 7 de la calle Músico Juan de la Encina, se han concentrado más de un centenar de vecinos a causa de lo ocurrido. Uno de ellos ha sido José María, uno de los afectados por el humo que desde el primer piso en el que se originó el incendio, ascendió hasta el tercero donde reside. En esa terraza se encontraba fumando y, al ver el fuego, se asustó y entró corriendo para su vivienda. Se había mudado hace poco tiempo a este hogar de Las Moreras para estar junto a su madre, de 94 años de edad.

Y menos mal, porque José María pudo salvar a su madre. "Nos encerramos y llenamos todo de paños mojados. El humo entró por toda la casa en cuestión de minutos, pero las llamas no, tan solo ardió la ropa que estaba tendida en la terraza", ha comentado el vecino del tercero, todavía intentando recobrar el aliento y explicando a cada uno de los vecinos que se le acercaban a preguntar por lo sucedido. Su madre, por suerte, "está bien", aunque ha tenido que ser trasladada al Hospital Reina Sofía tras haber inhalado humo. "Se la han llevado porque es muy mayor, por suerte está bien", ha asegurado.

Los vecinos de los bloques aledaños a la vivienda afectada han contemplado lo sucedido desde sus casas, no han tenido que ser desalojados. La otra vivienda afectada ha sido la del segundo, a la que no solo ha alcanzado el humo, sino también las llamas. "Gracias a Dios no había nadie en el momento del fuego", ha subrayado Consuelo, madre de la inquilina de ese segundo piso. Su familia ha acudido corriendo a ver qué es lo que había pasado y, expectante todavía, tan solo sabe que "las llamas han entrado a la casa también y que se oyó una explosión", como ha indicado mientras sujeta con amor a su nieta, agradeciendo que no haya estado allí en el momento del incendio.

Hasta el lugar de los hechos han acudido múltiples efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) de Córdoba -que tuvieron que reforzar la asistencia con varios camiones-, de la Policía Local, de la Policía Nacional y los servicios sanitarios para atender a dos heridos. La calle estuvo totalmente cortada durante varias horas.

Dos muertos en apenas un mes

Se da la circunstancia de que el pasado 23 de octubre un hombre de 60 años murió en el incendio de una vivienda en la calle Tenor Pedro Lavirgen, también en el barrio de Las Moreras. En el suceso también resultó herida una mujer con quemaduras de segundo grado en rostro, espalda y brazos. Además, en noviembre de 2022, una mujer y su nieta murieron en este mismo patio de Las Moreras, llamado Poeta Luis Rosales -conocido como las rejas al tener sus balcones este elemento- a causa de un incendio.

Carmen, familiar del propietario de uno de los pisos afectados por el incendio de este jueves, ha recriminado esta sucesión de incendios causados porque "el barrio está totalmente abandonado, ni se arreglan los bloques de viviendas ni nada". Y es que, "muchos no se saben si se origina por enganches de luz o por otro motivo, pero se debería hacer algo". "A qué se debe tanto incendio no lo sabemos, pero la verdad es que los bloques están para que los miren, pues se nos están viniendo abajo las casas", ha denunciado Mari, otra vecina.

Entre la indignación de los vecinos por las malas condiciones en las que se encuentra el barrio y la tristeza causa por este último incendio, los corazones de los más de un centenar de los allí presentes se encogieron cuando, casi tres horas después del incendio y tras el trabajo de los bomberos y la policía, varios agentes sacaron por la puerta de atrás el cadáver de su vecino del primero, directo al vehículo funerario. Una jornada negra más para el barrio de Las Moreras.