El anhelado impulso a Caballerizas

En la lista de asuntos pendientes en la ciudad que esperan una solución desde hace años ocupa un lugar destacado Caballerizas Reales. El histórico edificio, ubicado en un enclave privilegiado junto al Alcázar de los Reyes Cristianos y la entrada al barrio de San Basilio, se sitúa en una situación provisional desde hace 15 años, ya que fue en 2001 cuando la entonces alcaldesa Rosa Aguilar firmó un convenio con el Ministerio de Defensa para la cesión del inmueble. La concesión era por 75 años y a cambio de unos terrenos en Turruñuelos que la Administración central quería para unas instalaciones deportivas. El desarrollo del acuerdo nunca llegó a materializarse y, mientras tanto, Córdoba Ecuestre -que ocupa el edificio y desarrolla varias actividades- ha pedido más autonomía para poder crecer y dar más protagonismo al mundo del caballo en la ciudad. En medio ha habido varios intentos de mejorar el acuerdo -en estos momentos hay una cesión provisional por dos años-, un conato de privatización y el planeamiento de dudas jurídicas por parte del actual cogobierno municipal, pero la realidad es que se trata de un inmueble que ahora está infrautilizado porque la entidad concesionaria, Córdoba Ecuestre, tiene poco margen de maniobra con la situación actual.

El presidente de Córdoba Ecuestre, Rafael Blanco, fue tajante al asegurar que la asociación "no puede esperar más" para solucionar esta "situación en precario" que vive el colectivo. "Hemos llegado al tope y, para seguir creciendo, necesitamos una cesión definitiva", aseguró. Córdoba Ecuestre llegó a Caballerizas en 2010 "con el compromiso de regular nuestra situación en un año, pero ya llevamos seis", aseguró Blanco, quien lamentó que "en Córdoba todo lo provisional al final se convierte en definitivo".

Desde entonces han demandado una solución que pasó por la puesta en marcha en 2013 de un concurso público para la concesión del inmueble, a la que concurrieron dos empresas además de Córdoba Ecuestre. El Ministerio de Defensa le recordó entones que no tenía autorización para cederlo a terceros y el proceso se paralizó. En marzo de 2015 el Ayuntamiento y Defensa firmaron un protocolo -un acuerdo de intenciones- sobre el edificio, así como otras propiedades en las que hay interés común como el Cuartel de la Trinidad -conocido como la Zona- o la Farmacia Militar. En el caso de Caballerizas, el Consistorio se comprometió a adquirir ese espacio en un plazo de dos años y, durante ese tiempo, Defensa permitía ceder la gestión y uso del inmueble a una entidad sin ánimo de lucro con el objetivo de desarrollar un espectáculo ecuestre.

Ya ha pasado prácticamente un año de los dos previstos para culminar el proceso administrativo para adquirir Caballerizas, que hay que hacerlo, sí o sí, porque de lo contrario quedaría sin efecto la autorización para la cesión de uso y el gobierno municipal tendría que asumir la gestión del inmueble en las mismas condiciones que el anterior convenio, fechado en 2001. La idea original era la firma de un nuevo convenio para decidir el futuro del antiguo Cuartel de la Trinidad -la Zona Militar-, de manera que la Gerencia Municipal de Urbanismo promueva "las figuras de planeamiento precisas" que permitan un uso lucrativo del inmueble. Defensa preveía que con las plusvalías que se generen como consecuencia del nuevo uso y la rehabilitación del antiguo cuartel se pague Caballerizas. Si esto no fuera suficiente, el Ayuntamiento tendría que aportar en metálico o mediante propiedades el resto y, si la diferencia fuera a favor del Consistorio, el Ministerio tendría que compensarlo.

A finales del año pasado, el teniente de alcalde de Turismo, Pedro García, planteó dudas sobre el protocolo firmado entre las dos administraciones y aseguró que desde la Gerencia Municipal de Urbanismo se iba a acometer un informe para despejarlas. Fuentes del organismo autónomo señalaron que todavía no hay ninguna conclusión sobre este asunto, ya que se sigue estudiando. Las principales dudan se han centrado en la compensación económica que se plantea con el cambio de titularidad aunque, de momento, "no se ha avanzado" en las conclusiones. Urbanismo trabaja en colaboración con la asesoría jurídica del Consistorio para poder encajar el asunto. Hay que tener en cuenta, además, que la Gerencia tenía un ambicioso plan Alcázar-Caballerizas que está pendiente y que se quiere impulsar en este mandato.

La versión oficial por parte del Ayuntamiento es que a principios de febrero la alcaldesa, Isabel Ambrosio, tiene previsto reunirse con el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, para desatascar el asunto. El teniente de alcalde de presidencia, David Luque, aseguró a este periódico que el objetivo del cogobierno municipal es llegar a un acuerdo con el Gobierno central lo antes posible no sólo en lo referido a Caballerizas, sino con el resto de edificios en los que hay interés común, como la Zona o la Farmacia Militar. Precisamente en este último el Consistorio quiere acometer la construcción de un nuevo mercado para Lepanto, un proyecto impulsado por el anterior gobierno municipal del PP.

El presidente de Córdoba Ecuestre, Rafael Blanco, insistió en que "no se puede demorar más" la situación" porque "nos está limitando la oportunidad de crecer". La asociación gestiona el inmueble ya que se encarga de su apertura y cierre, del mantenimiento y limpieza de las instalaciones y celebra diariamente un espectáculo ecuestre. Precisamente las visitas a este evento crecieron un 33% el año pasado, hasta los 65.000 espectadores. En este sentido, Blanco resaltó que el turismo ecuestre es en la actualidad "uno de los grandes aliados" de la ciudad, tras la cultura y el patrimonio y defendió la aportación del colectivo a la oferta turística nocturna a través del espectáculo de Caballerizas. "Nosotros hemos hechos nuestro trabajo y ahora pedimos a la alcaldesa y al subdelegado que se sienten a hablar". La estabilidad de Córdoba Ecuestre en Caballerizas, aseguró, supondría "que pudiéramos desarrollar más actividades y mejorar las instalaciones", insistió Blanco, además de terminar con la incertidumbre del colectivo.

En el sector turístico están igualmente preocupados por la inestabilidad que genera que Caballerizas no está al cien por cien. El coordinador de la asociación de empresarios de la hostelería Córdoba Apetece, Alberto Rosales, aseguró que la cesión del inmueble "debería resolverse lo antes posible para que el edificio esté a pleno rendimiento". Rosales recordó que el turismo ecuestre aporta dos aspectos relevantes al sector. Por un lado "se trata de turismo de calidad, que nos diferencia frente a otras ciudades y ofrece un aliciente para la visita", aseguró. Por otro, "permite llevar el nombre de Córdoba al resto del mundo" a través de las múltiples iniciativas e intercambios que realiza Córdoba Ecuestre.

La evolución del turismo ecuestre en la provincia ha crecido de manera considerable en la última década. La oferta ecuestre de la ciudad incluye exhibiciones y competiciones del más alto nivel, de doma vaquera, doma clásica, salto, completa o enganches, destacando el Campeonato Nacional de Doma Vaquera y de Campo y el Campeonato de Andalucía de Alta Escuela, enumera el sector. Córdoba celebra otros eventos ya consolidados dentro de este campo, como la feria Cabalcor y su concurso morfológico o el Salón Internacional del Caballo y el Campo.

Una de las cuadras de Caballerizas.