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Córdoba/El Ayuntamiento de Córdoba gastará 4,7 millones de euros hasta el año 2027 en la mejora de la señalización viaria e informativa de la ciudad. El Consistorio ha diseñado para ello un contrato que, si no hay cambio de última hora, adjudicará a la empresa API Movilidad, "que ha sido la que ha presentado la oferta más ventajosa", según la Mesa de Contratación. API Movilidad ha incluido algunas mejoras respecto a las medidas que se especifica en el pliego de la licitación que tiene que llevar a cabo.
Esas mejoras son la aportación de 1.200 señales peninsulares o similares para el Casco Histórico, el inventariado de toda la señalización vertical de la ciudad en un periodo máximo de seis meses (incluyendo software) y la señalización de 30 unidades adicionales de señales Aimpe -señales informativas horizontales superpuestas que informan, por ejemplo, qué dirección tomar para llegar a un hotel, a un monumento...-.
En concreto, el contrato tiene por objeto "continuar con la prestación de los trabajos del mantenimiento, conservación, suministro, instalación y/o reparación de todos los elementos propios de la señalización vertical, señalización horizontal, rotulación del viario y balizamiento dentro del municipio de Córdoba adaptándolo a las nuevas necesidades de la ciudad. Asimismo también quedan englobadas en este contrato los trabajos necesarios en materia de señalización de las fiestas populares y resto de eventos", tal y como detalla el pliego del mismo.
La adjudicataria está obligada a la inspección periódica en la ciudad entre otros elementos de los que componen la señalización viaria e informativa de la ciudad vertical, así como de las placas de denominación de vía pública y las bandas reductoras de velocidad "con el propósito de detectar y corregir anomalías, reponer elementos que hubieran desaparecido o renovar aquellos elementos que por su avanzado estado de deterioro fuera aconsejable, según criterio que se establezca por responsable del contrato.
También a la "comprobación de la adecuada visibilidad general de la señalización teniendo en cuenta cualquier obstáculo que pudiera afectar a la visibilidad (árboles, mobiliario urbano, etcétera); la limpieza y eliminación con medios apropiados de pegatinas o pintadas que pudieran mermar o alterar la información de la señalización afectada; a la corrección de la verticalidad de los postes y la correcta orientación de las señales cuando sea necesario; y a la inspección de los radares pedagógicos existentes y la extracción de datos de los mismos con la frecuencia que estipule el responsable del contrato", sentencia el pliego.
El contrato especifica, entre otras medidas, que la empresa adjudicataria deberá revisar en toda la ciudad, para ver en qué estado están y si tienen que ser sustituidos, elementos como las señales del reglamento general de la circulación, los carteles informativos, las barreras de seguridad, las balizas de señalización, lo bolardos (hitos y pilonas), los espejos convexos, las placas de denominación de vía pública, los radares pedagógicos y las señales de paso de peatones de led, así como comprobar el estado general de las marcas viales.
En el pliego del contrato se insiste en que en Córdoba cada año se celebran diversas fiestas populares y eventos que requieren la actuación sobre la movilidad de vehículos y personas, realizándose cortes de calles, desvíos de tráfico, etcétera, para lo cual es necesaria la colocación de las numerosas señales informativas, vallas de contención peatonal, retirada de obstáculos, etcétera, con el principal objetivo de que se celebren con las máximas garantías de seguridad. "Los efectos negativos que estas fiestas populares y eventos producen sobre la movilidad son principalmente retenciones del tráfico, riesgo de accidentes e incremento de la contaminación ambiental y acústica", subraya el documento.
Esas fiestas populares y eventos anuales son el mercado medieval, los partidos del Córdoba C.F. (el llamado Plan Fútbol) , el Carnaval, la Semana Santa, las romerías de Santo Domingo y la Virgen de Linares, la Batalla de las Flores, las Cruces de Mayo, el Festival y el Concurso de Patios, la Feria de Nuestra Señora de la Salud, la Noche Blanca del Flamenco, las ferias de las barriadas periféricas, la Velá de la Fuensanta, Cabalcor, la Semana Europea de la Movilidad, la Carrera de la Mujer, la Carrera Popular de la Fuensanta, Calle Jugando y la San Silvestre.
Los trabajos que deberá, en estos casos, realizar principalmente el contratista en coordinación con la Policía Local y otros posibles intervinientes comprenderán entre otros la colocación y retirada de vallas peatonales móviles para regulación de tráfico; la colocación y retirada de conos, el montaje y la retirada de reavisos de prohibición de la parada y el estacionamiento, incluida colocación de fechas y horarios en formato plastificado, toma de matrículas de vehículos estacionados en vía pública afectada por eventos y comunicación de la información a la entidad competente; y la colocación y retirada de señal de tráfico bien flejadas a valla peatonal o elemento fijo. "Una vez finalizado el evento la señalización y demás elementos deben ser restituidos a su estado original desde el día siguiente", añade el documento.
El Ayuntamiento ha hecho una estimación económica de cuánto suponen esos trabajos en fiestas populares y eventos y el coste total asciende a más de 272.000 euros. Las cita de mayor gasto son la Semana Santa y la Feria de Nuestra Señora de la Salud, con 90.917 y con 34.782 euros, respectivamente; y las de menor, las Cruces de Mayo y las ferias de Cerro Muriano y Alcolea, con 686 euros, en el caso de la primera cita, y con unos 878 euros en el caso de ambas ferias. Mientras, los trabajos de este tipo en el Plan Fútbol ascienden a 28.776 euros.
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