Bodega Tesalia presenta en Córdoba su nuevo vino: Iceni 2019
Enología
La tercera referencia de la marca, tras Tesalia y ARX, es un 'terroir' de Tintilla de Rota y Syrah
Un maridaje en El Bar de Paco Morales ha servido para dar a conocer un caldo muy versátil
Bodega Tesalia, el ambicioso proyecto que la familia Golding inició en 2008 en Arcos de la Frontera (Cádiz) y al que ya se le conoce como La joya del Sur, ha presentado este jueves en Córdoba su tercera referencia, Iceni 2019, durante un perfecto maridaje en El Bar de Paco Morales, el local casual del prestigioso chef con Estrella Michelin que lidera el proyecto de Noor. Este tercer vino de la marca es un terroir muy versátil que completa una trilogía que inició Tesalia, el buque insignia de la bodega, y continuó ARX, todos con sus matices y singularidades que los hacen únicos.
Esta primera añada de Iceni 2019, que ha llegado para quedarse, tiene como referencias principales una uva tradicional como la Tintilla de Rota y la clásica Syrah, si bien como todos los caldos de Tesalia se ve enriquecido con algún porcentaje de Petit Verdot y Cabernet Sauvignon. Esto lo convierte en un vino polivarietal nacido del trabajo de ensamblaje del prestigioso enólogo Ignacio de Miguel, y la enóloga de la bodega, Valle Lorenzo.
Como De Miguel ha destacado en más de una ocasión, el éxito real de la bodega está en el notable trabajo de viticultura liderado por José Ramón Lisarrague (profesor en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Agrónomos de Madrid), que junto al enólogo y el empeño de Richard Golding dieron forma durante años a un proyecto que ya empieza a dar a sus frutos. Porque de aquellos primeros sueños que el empresario británico y su hija Natalia (formada en enología y viticultura) tuvieron en 2008, cuando adquirieron una finca en Arcos de la Frontera para su yeguada, a lo que hoy puede verse en el mercado hay un gran esfuerzo.
De hecho, los primeros vinos no vieron la luz hasta 2016, después de que los estudios de Lisarrague dieran luz verde a la plantación de 12,5 hectáreas de viñedos, de las cuatro variedades antes reseñadas -ahora el equipo trabaja con alguna más en fase experimental-, en una ladera con vistas a la sierra de Grazalema que a la caída de la tarde protege las vides del sol. Eso, un sistema que deja a los racimos a más de metro y medio del suelo y protegidos de sus propias hojas, a modo de túnel, y hasta una vendimia nocturna permiten la creación de unos caldos frescos que poco o nada tienen que ver con los que tradicionalmente ven la luz en el Sur de España.
Así, en 2016 nacieron Tesalia y ARX, orígenes de una tercera referencia, Iceni 2019, que ahora llega con la fuerza justa para hacerse un sitio en un mercado cada vez más floreciente. Todos mantienen la línea de la bodega, que aparta el preestablecimiento de las mezclas de uvas, sino que juega con lo que cada añada es capaz de aportar en cada momento para fabricar el mejor vino posible. Esta primera partida, las variedades Tintilla de Rota y Syrah van prácticamente al 50%, aunque el Petit Verdot y el Cabernet Sauvignon se dejan ver para dotar de mayor personalidad a un vino "muy frutal, fresco, amable y expresivo", según De Miguel.
El enólogo, en su explicación más profesional, recuerda que Iceni 2019 "presenta un color rojo cereza con ribetes amoratados y capa media; su aroma es intenso a fruta fresca y flores blancas y con el movimiento se atisban ligeras notas de cedro y pan tostado, y en boca es sabroso, fresco, rico y con abundante fruta roja y su paso, suave y elegante, deja un grato recuerdo". En definitiva, se trata de "un vino muy versátil, ya que puede acompañar cualquier comida de principio a fin o tomarse para chatear gracias a su excelente relación calidad-precio y, pese a su juventud, aguanta perfectamente hasta tres o cuatro años".
Para completar la presentación de esta tercera referencia de Bodega Tesalia, que se ha presentado en una perfecta armonía con los platos de El Bar de Paco Morales -anchoa del Cantábrico sobre mantequilla de oveja, salmorejo de naranja con bacalao ahumado y nieve de queso, tartar de vaca vieja con yema de huevo curada, alcaparras y pepinillo encurtido, gamba de cristal frita, aguacate y maíz, o presa a la moruna, yogurt y menta, entre otros-, hay que hacer especial referencia al diseño y etiquetado de las botellas de la marca, con la firma de Valentín Iglesias, que tira de mitología y universo equino para gusto de la familia Golding.
Temas relacionados
No hay comentarios