El cogobierno culmina el cambio de calles con la simbólica Cruz Conde

Con prisa, los operarios colocan las nuevas placas en la céntrica vía, que ya luce como Foro Romano

Un operario retira los azulejos de José Cruz Conde.
Un operario retira los azulejos de José Cruz Conde. / El Día
Antonio Rodríguez

07 de junio 2019 - 06:00

Tras Cañero y Vallellano, llegó Cruz Conde. El cogobierno ya ha hecho desaparecer del mapa a tres de los nombres que más polémica generaron cuando se conoció la intención de aplicar en el callejero la Ley de Memoria Histórica y Democrática. El Pleno municipal aprobó en febrero del año pasado, hace ya 15 meses, el cambio del callejero; pero no fue hasta noviembre cuando el consejo rector de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) dio el visto bueno las nuevas denominaciones tras recibir las propuestas del Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC).

Unas elecciones municipales de por medio han retrasado, eso sí, los cambios. Una vez finalizado el proceso electoral, el gobierno municipal saliente ha querido dejar cerrado este asunto y se ha puesto manos a la obra. Así lo confirmó ayer a el Día el delegado de Movilidad, Andrés Pino, quien afirmó que “la idea lógica era dejarlo terminado” antes de que entrara el nuevo gobierno.

Se ha hecho con prisas, eso sí, porque de otra manera no se explica que los operarios tuvieran que rotular las nuevas placas en la propia calle, dentro de la furgoneta donde cargaban con el material. “Nos han dado la bulla”, reconocía uno de estos trabajadores mientras cuadraba los azulejos con las letras que compondrán el nuevo nombre de Cruz Conde, Foro Romano.

Los operarios preparan el nuevo nombre en una furgoneta.
Los operarios preparan el nuevo nombre en una furgoneta. / Laura Martín

Desde primera hora de la mañana, los trabajadores de la empresa API Movilidad se afanaban en retirar todas las placas y azulejos de la céntrica vía, que eran varios teniendo en cuenta la longitud de la calle. Placas metálicas, de cemento y azulejos donde rezaba el nombre José Cruz Conde ya han desaparecido, a excepción, curiosamente, de uno de ellos situado en la fachada donde se encuentra la tienda Pronovias y que es de propiedad privada.

Las prisas con las que trabajaban estos operarios impidieron, además, que se pudieran rotular todos los espacios que el nombre de José Cruz Conde dejó vacíos. Sí pudieron colocarse las placas metálicas, las de color rojo oscuro donde también aparece el símbolo del Ayuntamiento. Sin embargo, los azulejos con las letras individuales no se colocaron, teniendo en cuenta, una vez más, que los operarios estaban intentando cuadrar y pegar las letras a las estructuras en la propia furgoneta de trabajo.

Azulejo de Cruz Conde retirado.
Azulejo de Cruz Conde retirado. / El Día

El gran tránsito peatonal de la vía generó, además, muchos comentarios por parte de los cordobeses que se paraban a observar los cambios. Desde gritos de “¡Fuera!” a los trabajadores que solo ejercían su labor hasta quienes lamentaban que no se haya pedido opinión para estas modificaciones, pasando por aquellos que sentenciaban que “A esto siempre se le llamará Cruz Conde” o que “el PP llegará la semana que viene y volverá a poner los nombres originales”.

Esto último sí puede ocurrir, ya que los populares han dejado clara su postura con respecto a este tema en varias ocasiones. En plena campaña electoral, y consultados por este periódico sobre cuál era su intención en este asunto, el PP afirmó que “Cruz Conde, Vallellano y Cañero mantendrán el nombre que han tenido hasta ahora” al considerar que los debates sobre este tema son “estériles e inútiles” y que se debe “dejar de perder el tiempo”.

El nuevo gobierno tendrá que seguir todo el proceso si quiere volver a los nombres originales

El que puede ser su socio de gobierno, Ciudadanos (Cs), sin embargo, no tiene la misma visión. La formación naranja, ante la misma pregunta, manifestó que “tenemos que cumplir la legalidad en cuanto a la Ley de Memoria Democrática”. Sobre los nombres nuevos, Cs considera que hay que “buscar el consenso” y “dejar a un lado la ideología política” para que “no cambien los nombres de nuestras calles cada vez que cambie el gobierno municipal”.

Si finalmente el gobierno entrante decide retornar a los nombres originales, deberá de seguir todo el proceso. Andrés Pino explicó que el “proceso para denominar las calles será el mismo”, lo que supondrá proponer el cambio (con el argumentario necesario, el del cambio actual ha sido la aplicación de la ley), llevarlo a la Gerencia y que la Junta de Gobierno Local lo apruebe de manera definitiva.

Eso sí, antes de que se forme la nueva corporación (el 15 de junio) todas las calles estarán cambiadas. Hoy mismo podría finalizar el procedimiento, ya que como comentó Andrés Pino lo único que queda pendiente es rotular los espacios libres de Foro Romano, la nueva Corto Maltés (antigua José María Pemán) y Escriba Lubna (que era Periodista Quesada Chacón).

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