El caos en Madeira afecta a otra familia de cordobeses: "La compañía nos dijo que nos buscásemos la vida"

El caos continúa en el aeropuerto de la isla portuguesa de Madeira, la mayor del archipiélago, donde todavía quedan españoles atrapados, algunos desde el 15 de agosto, por la cancelación de sus vuelos en los últimos días debido al fuerte viento que sopla en la zona. "Ryanair desde el primer momento nos dio la opción de reembolso y que nos buscásemos la vida o nos admitían en otro vuelo, pero que nos teníamos que buscar la vida para el alojamiento", relata el córdobés Carlos Pérez, otro de los afectados.

Este profesor de secundaria en Lucena lleva desde dicha fecha varado en Madeira junto a su mujer Irene, de 55 años, y sus dos hijos, Julio y Sara, de 23 y 18, respectivamente, después de que su vuelo de vuelta a Lisboa con Ryanair fuera cancelado el pasado jueves tras vivr dos semanas de vacaciones en la isla con unos amigos.

Tras pasar la primera noche en el aeropuerto de Funchal -capital de la región autónoma de Madeira- esta familia cordobesa se vio obligada a dormir en el suelo, ya que su vuelo inicial, que estaba previsto para las 19:00 (18.00 hora GMT), nunca salió. Por tanto decidieron mudarse a un apartamento que les está costando 400 euros por noche. "El tiempo en Madeira es horrible, hay mucho viento, es comprensible que haya estas cancelaciones, pero hay compañías que han creado otros aviones y otras que han reubicado a los viajeros en hoteles", detalla Pérez vía telefónica.

La aerolíne a Ryanair "desde el primer momento nos dio la opción de reembolso y que nos buscásemos la vida o nos admitían en otro vuelo, pero que nos teníamos que buscar la vida para el alojamiento", agrega.

Según cuenta, lo primero que les ofreció la aerolínea fue un billete para una sola persona este mismo martes, por lo que decidieron que fuera su hijo Julio quien se montara en ese vuelo, aunque la tragedia siguió su curso y les comunicaron que estaba en stand by (espera), lo que ellos entendieron como que había overbooking. Mientras tanto, decidieron buscar vuelos para el resto de la familia y encontraron uno para el día 24 de agosto con EasyJet.

La familia se ha desplazado al aeropuerto este martes a las 06:00 (05:00 hora GMT) con la esperanza de que su hijo pudiera subir al vuelo de Ryanair programado para las 09:00 (08:00 hora GMT), momento en el que han presenciado escenas de desesperación e ira de los pasajeros que llevan días sin una solución. "La gente estaba totalmente desquiciada, aunque al final nosotros sí que hemos podido sacar la tarjeta de embarque", apunta Pérez, quien subraya que se han encontrado de nuevo con otros españoles en el aeropuerto tratando de salir de esta isla portuguesa, incluso les han llegado a comentar que ya no se encuentran vuelos hasta el 2 de septiembre.

Con su hijo esperando para embarcar, él, su mujer y su hija han decidido dirigirse a la ventanilla de la compañía, donde "a los dos minutos sale una chica y nos dice: tengo siete plazas para esta madrugada a las 03:00 de la mañana para Oporto, no Lisboa", explica Pérez. La respuesta estaba clara: "sí". Por tanto, con tal de acabar con ese caos que estan viviendo, compraron los billetes para ellos y sus amigos, que son tres. Su hijo, finalmente, tuvo que salir de la cola, porque su billete de hoy ya no era valido al haber sido sustituido por el vuelo a Oporto.

Ahora ya solo piensan en poder partir: desde Oporto, en el norte de Portugal, tendrán que trasladarse a Lisboa, donde han dejado su coche para volver a casa. Más allá del problema con su vuelo de vuelta, destaca que han pasado "unos días espectaculares en Madeira" y que apenas les ha afectado el incendio que arrasa partes de la isla: "hace dos días se veía humo, pero hoy ya no".

Las cancelaciones de vuelos por los vientos fuertes en el aeropuerto de Madeira, considerado uno de los más peligrosos del mundo, son habituales, aunque la situación actual ha venido agravada por el período vacacional. Tan solo el domingo fueron cancelados más de 60 vuelos hacia y desde Funchal, casi todos los programados para ese día. Este martes, los vuelos están saliendo y apenas hay cancelaciones, pero las partidas acumulan retrasos de horas.