Cunext prevé finalizar su planta de cobre verde de Córdoba en este año

Córdoba/"Estamos a la espera de contar con la licencia municipal de obra para nuestra fábrica de cobre verde, confiamos tenerla durante el mes de abril y desde ese momento comenzaremos una carrera contrarreloj porque nuestro objetivo es tener al final de año la fábrica montada con los equipos instalados". Así se ha pronunciado el presidente ejecutivo del grupo empresarial Cunext, Dámaso Quintana, durante la presentación de la planta fotovoltaica de autoconsumo que el gigante del cobre ha construido junto a sus instalaciones del Parque Joyero.

Una planta que ha inaugurado el consejero de Industria, Energía y Minas de la Junta de Andalucía, Jorge Paradela, que está compuesta por 14.000 placas solares y que, tal y como ha explicado Quintana, aporta hasta nueve megavatios de electricidad a la fábrica del Parque Joyero; o lo que es lo mismo, el 25% de la electricidad que necesita la fábrica, pero que con la maquinaria nueva con la que contará se reducirá hasta el 20%. La futura planta de cobre verde contará con otro planta de autoconsumo, en esa ocasión de 55 megavatios.

Quintana ha destacado que si esa licencia de obra "se retrasa mes y medio o dos meses vamos a ir muy justos de tiempo". Y es que el objetivo de Cunext es empezar a comercializar la producción de esa nueva fábrica de cobre verde durante el primer trimestre de 2026", plazo al que obliga los 30 millones de fondos Perte que la compañía ha recibido de Europa.

El presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), Miguel Ángel Torrico, quien también ha estado presente en la inauguración de la planta fotovoltaica, ha recordado que la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento declaró el proyecto de interés estratégico local, "con el objetivo de agilizar todos los trámites administrativos y plazos necesarios de este proyecto emblemático para Córdoba y facilitarle mayor seguridad jurídica". La Gerencia sentenció entonces que esa declaración la llevada a cabo debido al carácter "estratégico" que la nueva planta de Cunext tendrá para el "desarrollo económico y social" de la ciudad.

La Junta de Andalucía, también con el fin de agilizar los procesos administrativos necesarios, declaró el proyecto de interés estratégico regional. El consejero ha destacado que empresas como Cunext llevan el nombre de Córdoba y de Andalucía por todo el mundo, un nombre además vinculado a un elemento esencial de la transición energética, como es el cobre. Sin cobre es imposible construir vehículos eléctricos, mallar la red de transporte y distribución eléctrica o construir aerogeneradores", ha relatado Paradela.

Mientras, Quintana ha destacado que "la nueva planta va a permitir que fabriquemos el cable de cobre con la menor huella de carbono me atrevería a decir que de Europa y, si no, del mundo. Y para hacer eso no solo vamos a utilizar material reciclado, sino que la fuente de suministro vamos a conseguir que sea totalmente renovable", claves para sectores industriales estratégicos como la automoción, especialmente en la fabricación de coches eléctricos; la industria del transporte o la industria eléctrica, tanto en formas de energía convencional como en energías renovables. En concreto, la nueva fábrica prevé producir 100.000 toneladas de cobre a partir de material reciclado, de alta pureza, que supondrá una contribución a la descarbonización por aproximadamente un millón de toneladas al año.

Quintana ya avanzó que "para conseguir producir cables con la máxima calidad necesitamos tecnología de vanguardia, que se va a implantar en la nueva fábrica, que contará con un proceso electrolítico para extraer el cobre puro". "Es una inversión de 120 millones de euros que arrancaremos tan pronto tengamos los permisos para poder hacerlo", informó, un presupuesto que no incluye la compra de los suelos, solo la obra civil. Pero la inversión no llega solo hasta ahí, porque para poder preparar la chatarra la empresa invertirá otros 100 millones de euros en la instalación que ya tiene en Córdoba. Por lo tanto, la inversión total alcanza los 220 millones de euros para conseguir la circularidad de la materia prima, que actualmente llega por barco procedente de África y Sudamérica.

Unos 80 puestos de trabajo directos y más de 300 indirectos

La factoría para el tratamiento del cobre mediante electrolisis, con la que Cunext creará 80 puestos de trabajo directos y más de 300 indirectos, se situará al sur del núcleo urbano, en el paraje conocido como El Origuero, a unos cuatro kilómetros por la Nacional 432. La finca tiene una dimensión de 307.000 metros cuadrados, en la que las distintas instalaciones sumarán 36.000 metros cuadrados construidos. El proyecto supone que el 50% de la materia prima venga de la chatarra de cobre, lo que significa que la planta transformará 100.000 toneladas de chatarra en cobre "de máxima calidad", tal y como ya apuntó el presidente del grupo empresarial.

Con la construcción de esta nueva planta la compañía pretende, según ya adelantó Quintana," impulsar la transición energética fabricando productos con los más altos estándares de calidad, y con la huella de carbono más reducida del mercado, para satisfacer la demanda creciente de productos sostenibles en sectores con necesidades especiales como es el caso de la industria del automóvil para fabricación de coches eléctricos, o las energías renovables”. Quintana destacó también que esta nueva planta contribuirá a la descarbonización de la industria, además de reducir el consumo de recursos naturales, ya que la vida del cobre es infinita.

¿Cómo será la fábrica de cobre verde de Cunext?

Según consta en el proyecto, el acceso a las instalaciones se realizará a través de un edificio de oficinas, que albergará también los vestuarios con conexión con la zona de trabajo y estará anexo a la nave principal, que albergará la planta de electrolisis.

Otra nave contendrá el almacén de materiales auxiliares, el almacén de productos químicos y el de residuos peligrosos, al que estará anexo una campa descubierta para la recepción y almacenamiento de mercancías. Todos los espacios estarán comunicados por corredores exteriores abiertos que permitirán el movimiento de materiales entre las distintas naves.

El complejo se completará con un área de descanso interior, que dará servicio a los trabajadores de la planta. Además, como edificaciones auxiliares habrá un área de descanso exterior, vinculada al acceso a la parcela, y una subestación eléctrica.