Un flamenquín de Guinness

Reto conseguido. Córdoba logró ayer entrar en el Libro Guinness de los Récords tras elaborar el flamenquín más largo del mundo con un total de 51 metros, uno más de lo previsto al principio. La iniciativa estaba enmarcada dentro de la programación de la Capitalidad Iberoamericana de la Gastronomía e impulsada por la Asociación de Carniceros de Córdoba y resultó todo un éxito. Aunque la convocatoria estaba prevista para las 13:00, desde mucho antes empezaron a llegar cordobeses y turistas para degustar este plato típico de la gastronomía cordobesa. Los organizadores, como buenos previsores, llevaron ya 500 flamenquines elaborados que fueron repartiendo entre los asistentes, que aportaron un euro a cambio de la ración. De esta manera, en total se repartieron más de 140 metros de flamenquín entre unas 3.000 personas que aguantaron estoicamente una cola kilométrica bajo el sol que ayer apareció de golpe y dejó temperaturas veraniegas. Toda la recaudación ha ido a parar a Cáritas Parroquial del barrio de Santa Rosa.

Marina Molero fue la artífice del récord al cocinar el flamenquín más grande del mundo, para lo que contó con el apoyo del comercio cordobés, familiares y ciudadanos. Y para un plato de estas dimensiones se necesitaban unos ingredientes con cantidades también a lo grande: casi 40 kilos de cinta de lomo, 15 kilogramos de jamón, 20 litros de huevo batido y unos 15 kilos de pan rallado. Todo ello empalmado uno a uno hasta conformar un gigante plato que, para su consumo, ha sido troceado en 750 raciones. El flamenquín de 51 metros -certificados por el notario Rafael Díaz- ocupaba casi media plaza de la Corredera y tuvo que ser partido a trozos para freírlo entre la mirada atenta de las miles de personas que se dieron cita en la céntrica plaza de la ciudad. Así, fue un récord por partida doble, de flamenquín y de asistentes.

El alcalde, José Antonio Nieto, explicó ayer que detrás de una iniciativa de este tipo, que es más que nada un acto simpático y curioso, se esconde un verdadero elogio a uno de los platos clave de la gastronomía cordobesa. Nieto aseguró que el objetivo de convocatorias como la de ayer es dar a la cocina local el sitio que se merece dentro de la oferta de ocio y como atractivo turístico de la ciudad y, además, se mostró convencido de que la gastronomía tiene que ser un pilar más "para sorprender a los visitantes". El alcalde destacó que a partir de hoy a los turistas "les va a quedar más claro" qué es el flamenquín cordobés, cuál es su composición y el valor y la vinculación que tiene con la ciudad.

Nieto no dudó en participar en esta llamada solidaria en la que también estuvo el teniente de alcalde de Turismo, Rafael Navas, pendiente de lograr finalmente el récord. El presidente de la asociación de carniceros, Alfonso Alcaide, se mostró muy contento del éxito de la iniciativa -que ha sido impulsada por él- así como del trabajo de su mujer, Marina Molero, que fue la encargada de cocinarlo. Al filo de las 14:00 el plato estaba todavía en proceso de rebozado, por lo que el flamenquín de récord se hizo esperar. No por eso decayó el ánimo entre los asistentes que no quisieron perder la oportunidad de formar parte de un momento que quedará para la historia: el flamenquín más grande del mundo.