Francisco de Paula Sánchez Zamorano entrelaza poesía y acuarela en 'Los latidos del alba'
Cultura
La presentación de este poemario ha contado con más de 400 asistentes, entre ellos los representantes de las distintas instituciones
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Córdoba/El Rectorado de la Universidad de Córdoba se ha vestido de gala para recibir la presentación de Los latidos del alba, un libro que no solo es una colección de poemas y acuarelas, sino una obra que trata de recoger la sensibilidad artística y humana de Francisco de Paula Sánchez Zamorano, presidente de la Audiencia Provincial. En esta obra, el autor entrelaza dos lenguajes artísticos, la poesía y la pintura, para ofrecer una mirada íntima sobre las escenografías y los aconteceres cotidianos.
Desde la primera página, la pieza literaria invita al lector a detenerse, a observar y sentir los detalles minúsculos del día a día que revelan una belleza profunda. Cada poema, que son romances o romancillos, es una pincelada verbal que encierra un pequeño mensaje educativo, donde se ensalzan valores como la solidaridad, la importancia de la familia, la afición a los libros, el cariño hacia los animales o el respeto por la naturaleza.
Sus nietos, la fuente de inspiración
La obra se titula Los latidos del alba por “el nombre de mi segunda nieta, que se llama Aurora, entonces ya digo, como esos latidos de esa vida que empieza a nacer, y Aurora es un nombre que simboliza luz, amanecer, alba. Pues Los latidos del alba, el nombre venía ya de por sí puesto”, cuenta el presidente de la Audiencia Provincial.
Con mucho trabajo por delante y mil quehaceres más, Sánchez no tenía en mente escribir un nuevo libro. De hecho, la última obra publicada fue Paisajes habitados, hace cuatro años, durante la pandemia. Aun así, ha conseguido hacer hueco porque “esas dos musas, que se llaman Mateo y Aurora, me han inspirado el poemario y ha salido de las emociones, de esa felicidad que siento cuando estoy con ellos”, afirma.
Según explica este escritor, cada poema encierra un mensaje educativo, a veces a modo de pequeño cuento “en los que he trasladado valores que actualmente muchos de ellos cotizan a la baja y, por eso, yo trato de ponerlo en valor y de paso para introducir a cualquiera que le guste la poesía en el mundo de la literatura y de la lírica”, de la prosa trata de viajar a la anécdota, y de ahí a la enseñanza.
La creación de mundos a través del verso y la acuarela
El volumen está destinado para todos los públicos, desde los más pequeños a los más mayores. Aunque combinar poesía y pintura ha sido, principalmente, porque “para los más pequeños, el mensaje soportado con una ilustración es mucho más trasladable” y, además, el “colorido de la acuarela, en mi opinión, va más con lo que es la filosofía de un poemario, que surge como poemario infantil, pero tiene una trascendencia que rebasa el ámbito de la infancia”, explica el escritor y artista.
Buscando la sencillez en los poemas, se persigue que el lector que sea de edad más avanzada, en su obra, pueda sentir “nostalgia y reflejo de su propia infancia porque la infancia, si es feliz, marca para toda la vida. Y qué decir de la infancia como fuente de inspiración en el escritor, en el poeta o en el literato”.
En relación con el público infantil, el libro le va a servir para “ir descubriendo el mundo, lógicamente. El mundo más cercano de sus padres y para ir enfrentándose y descubriendo ese mundo que surge ante él”, según señala.
De hecho, Sánchez define su obra como “ternura, ya que es lo que me ha inspirado. La ternura que siento cuando estoy con los nietos, es el motor de lo que me ha determinado a mí a escribir esos poemas, fundamentalmente”.
La mirada del juez y del artista
Francisco Sánchez es conocido por ser el presidente de la Audiencia de Córdoba y por escribir numerosas ponencias, artículos, conferencias, pregones y varias obras. Facetas totalmente opuestas pero perfectamente combinables. En un ejercicio de introspección, ha sabido encontrar el espacio para que el arte conviva con la racionalidad y la lógica propias de su profesión.
“Es cierto que es un contraste. Y yo también lo he buscado, deliberadamente, no al escribir el libro, pero en algunas partes y en algunas facetas sí he buscado el contraste. Como una persona encargada o resolviendo conflictos, algunas veces con desarraigo triste, problemas humanos graves, se defiende al mundo de la lírica, al mundo más apacible de la poesía”, continúa a la hora de relatar su peculiar contexto.
Del mismo modo, destaca la figura del presidente de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, Manuel Marchena, prologuista del libro y un hombre encargado de resolver conflictos de gran calibre, pero que a su vez se atreve a poder descender al mundo de la lírica, cambiando la lógica jurídica por la sensibilidad de la literatura.
Intervenciones en el acto de presentación
Con más de 400 personas, en el acto intervinieron Manuel Torralbo Rodríguez (rector de la Universidad de Córdoba) José María Molina Caballero (director de la editorial Ánfora Nova), Manuel Egea Manrique (decano del Colegio de Abogados de Lucena) Antonio Pulido Gutiérrez (presidente de la Fundación Cajasol), Salvador Fuentes Lopera (presidente de la Diputación de Córdoba) y José María Bellido Roche (alcalde de Córdoba).
La institución anfitriona, el rector de la Universidad de Córdoba ha destacado algunos de los aspectos más singulares de este poemario y su relación de amistad personal con su autor subrayando su magnífico contenido.
Por su parte, José María Molina ha expuesto que se siente muy agradecido por haber tenido el honor de editar esta importante y entrañable obra que, “según la crítica especializada, está considerada ya como una significativa joya bibliográfica, que hoy tenemos la satisfacción y el orgullo de poder presentar, en el año en que celebramos los 35 años de trayectoria de Ánfora Nova.”
El decano del Ilustre Colegio de Abogados de Lucena expresó su satisfacción personal y la de la institución que representa por haber colaborado en la edición de esta obra, “atendiendo a nuestro compromiso de apoyo a las iniciativas culturales y sociales de nuestra tierra y, por supuesto, a las llevadas a cabo por nuestros colegiados”.
El presidente de la Fundación Cajasol ha comenzado su intervención destacando que “para la Fundación, y para mí en el plano más personal, es un placer respaldar la labor de la revista y ayudar de nuevo a difundir la obra y la creatividad sin límite de nuestro gran jurista y escritor Sánchez Zamorano”. Además, sobre la publicación, Pulido ha destacado que “se trata de manual para que los niños, y también los más mayores, aprendamos a amar la poesía como la mejor herramienta para desarrollar la creatividad, la sensibilidad artística o la capacidad de reflexionar y aprender”.
De igual manera, el presidente de la Diputación de Córdoba ha subrayado el alto nivel de excelencia del libro que se enmarca en el reforzamiento de la línea de colaboración cultural entre ambas entidades, aunando esfuerzos para la puesta en valor de obras de especial interés y relevancia para el mundo cultural cordobés y su proyección nacional e internacional, como es este libro que se presenta.
En su intervención, José María Bellido se ha referido a la colaboración que el Ayuntamiento de Córdoba le ha dedicado a la edición de este “bello libro integrado por cincuenta preciosos y emotivos poemas con los que Francisco de Paula Sánchez Zamorano ha logrado conmovernos, y que están ilustrados por otras cincuenta espléndidas acuarelas realizadas por el propio autor, plasmando en ellas unas estampas visuales donde se reflejan las imágenes que sugieren los textos a los que acompañan.”
Asimismo, el alcalde de Córdoba se ha mostrado muy orgulloso de poder participar en la presentación “de este gran libro rodeado de tantos amigos que han arropado a su autor en un acto multitudinario que todos recordaremos por la entrañable y emotiva atmósfera que en él se respira.”
El acto también ha contado con la actuación musical del Cuarteto Averroes y con el recital de una selección de poemas del libro a cargo del magistrado-presidente de la Audiencia Provincial de Jaén, Rafael Morales Ortega. Del mismo modo, el propio Francisco de Paula ha cerrado el acto con unas palabras y recitando un poema “más íntimo”.
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