Francisco Valderas: "Hay aprovechar la discapacidad como un arma para saber que puedes hacer"
Día mundial de la discapacidad
El director de la ONCE en Córdoba apunta que "no nos ponemos los zapatos de la persona con discapacidad"
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El día 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las personas con discapacidad. La Once deja atrás esta denominación, ya que su legado ha sido pionero en accesibilidad y mejora de las personas con problemas de visión. En la entidad son "capaces de ser capaces". El director de ONCE Córdoba, Francisco Valderas, y la subdirectora y la consejera, Irene Jiménez, recuerdan sus inicios en esta casa, donde han descubierto y han hecho saber que los límites no los ponen ni ellos mismos.
Pregunta.¿Cómo llegaron a la ONCE?
Respuesta.(F) Yo no vengo a la ONCE hasta que tengo 24 años, cuando decidí acercarme porque tenía dificultades para estudiar. En ese momento buscaba independizarme y conocí la venta. Al principio era un soporte para los veranos, hasta que descubrí que mi vocación era vender. Hasta el 2015 he estado como vendedor, luego, paso a representar a los trabajadores como presidente de Comité de Empresa. Luego, trabajé como consejero, y posteriormente en 2023 asumí la dirección de este centro.
R.(I) En mi caso, mi patología es de nacimiento, también. Mis padres decidieron, cuando yo tenía un año y medio, acercarse a la Once. En su caso, un médico les dijo que no había nada que hacer conmigo y a ver si yendo tenía alguna oportunidad. Mis padres devastados vinieron aquí. A partir de ahí, la cosa cambió. Empezaron a ver que la discapacidad que tenía no me iba a limitar en la vida, porque iba a tener unos apoyos, que iban a hacer que mi vida fuera como la de cualquier otro.
P.¿Qué es para ustedes la ONCE?
R.(F) En mi caso, digo que tengo dos regalos en la vida: uno, conocer a mi mujer, y lo segundo, entrar en la ONCE. Nos cambió la vida a los dos. Ella no es afiliada, pero se siente parte. Cuando viene la gente en el proceso de acogida, es un momento crítico para la persona, porque reconocen que no ven y ahí siempre vienen con familiares. Cuando vienen ellos entran en el proceso
R.(I) En mi caso, es un poco parecido. Si la once no hubiera estado en mi vida, no me hubiera desarrollado como persona, porque el desconocimiento hace mucho. Solo hay que fijarse en cómo estaban las personas hace unos 70 años. A una persona con discapacidad la escondían. En mi caso, cuando se enteraron que rozaba la ceguera total pusieron medios para que me ayudara la ONCE. A día de hoy, puedo decir que conseguí mi sueño, que era estudiar psicología, ser mamá, formar mi familia. Tengo mi pareja que tampoco es afiliado y ha conocido, también, lo que es la discapacidad y como la Once entra a formar parte, no solo de mi vida, sino también de la suya.
P.¿Cómo se puede acudir a la ONCE?
R.(F) La cuestión es el desconocimiento de la ONCE hoy en día. Se asocia a unas loterías de juego responsable, pero no es su fundamento. Es una entidad que tiene como propósito mejorar la vida de las personas con discapacidad visual. Para que la integración sea a todos los niveles, se consigue con una serie de servicios, que pone a nuestra disposición la once, con unos técnicos para todos los ajustes que necesitamos. Eso se paga con la venta de productos. Eso es lo sé que tiene que conocer. Si te pones en manos de psicólogos expertos, es mucho más fácil llegar a ese periodo de aceptación y trabajar con esa persona mucho más fácil. Nosotros decimos aquí, que menos conducir, podemos hacer de todo. Tenemos un lema que dice: "Somos capaces de ser capaces". Aprovechas esa discapacidad como un arma para saber qué puedes hacer
P.¿Con qué franja de edad comienzan a conocer la entidad?
R.Últimamente, sí que es verdad que la franja suele ser más alta, pero aquí tenemos personas que vienen desde que son pequeñas y también de 90 años. No se va a trabajar lo mismo, con la persona que viene con una discapacidad adquirida, que con una persona que viene con una discapacidad de nacimiento. Cada uno necesita una adaptación. Ni siquiera dos personas con ceguera total trabajan de la misma forma. No hay edad límite ni, por un lado, ni por otro, todas las personas que cumplan los requisitos para poder ser afiliadas.
P.¿Cuáles serían esos requisitos?
R.(F) Baremos de visión un 0,1 en agudeza visual y luego un campo visual inferior a un 10%. Hay mucha discapacidad que no llega a ese baremo y la ONCE está trabajando en crear una fundación de baja visión, para ir orientado a esas personas, porque nos hemos dado cuenta de que realmente los problemas de visión se están multiplicando. Hoy en día, todo es muy visual, utilizamos muchísimo las pantallas. Si es verdad que la ciencia ha avanzado y cada vez hay menos ceguera total, pero si nos encontramos con una discapacidad visual grave, mucho más a menudo. Quizás una de las patologías más comunes es la retinosis. Esta suele presentarse en la adolescencia, porque va asociada a los cambios hormonales, aunque no tiene edad.
P.Respecto al ocio, ¿qué actividades se pueden hacer en la ONCE?
R.(F) Para nosotros la actividad cultural, deportiva y el ocio, todo eso es una de las necesidades que tenemos y somos muy activos en eso. Todos los años se hacen talleres: hay de salón de baile, pilates, cerámica. El año pasado tuvimos un taller de maquillaje sin espejo, porque las personas ciegas también se maquillan. Luego hay viajes, convivencias. Tenemos un deporte que está de moda que es una especie de tenis de mesa, pero que se juega con antifaces.
R.(I) También hay un deporte que es específico de la ONCE que se llama Goalball y es un deporte nuestro, se juega por sonido y en el suelo. Puede jugar tanto gente vidente, como no vidente, pero con antifaz y utilizando el oído.
P.¿Qué aspectos de vuestro día a día habéis mejorado gracias a la ONCE?
R.(F) Todo, porque al final los problemas que tenemos de destreza son esas faltas de ajustes. Yo en mi casa como tengo problema de contrastes, los vasos, a sugerencia de un técnico, son de color azul, que es un color que detecto muy bien, yo los transparentes los tiro. Luego, ponerme un punto de mercurio en la vitrocerámica, para detectar los números. Al final, todo lo que estamos sacando para que la discapacidad se sienta, son facilidades para todos. Nos nutrimos todos de estos avances. La accesibilidad es un índice de desarrollo de la ciudad, te está diciendo la calidad que tiene la ciudad.
R.(I) Lo que tiene que quedar claro, es que aunque tengamos una discapacidad visual, nuestra vida es igual al resto de personas. Tenemos nuestra rutina, trabajamos, hacemos nuestras tareas, únicamente es que necesitamos ciertas herramientas que son las que nos proporciona la ONCE. Hay gente que cuando llega a la ONCE se cree que ni siquiera puede cocinar. Yo vivo aquí sola y de hambre me puedo asegurar que no me muero. Ahora sí, si tu no sabes cómo cocinar de manera segura, aquí están los técnicos para enseñarte técnicas.
P.¿Qué les gustaría celebrar en este Día de la discapacidad?
R.Que no tuviéramos que hablar de discapacidad y, sobre todo, el barrerismo, que no son barreras arquitectónicas. Podemos cambiar la dificultad que nos encontramos todos los días cuando salimos a la calle, que son cosas que hacemos porque no está concienciada la sociedad, no de mala fe, como cuando aparcamos el coche en el sitio reservado. No es de mala fe, es porque no nos ponemos los zapatos de la persona con discapacidad.
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