La hermandad de San Rafael prepara un congreso de patronos de Andalucía

La junta de gobierno de la Hermandad de San Rafael acordó anoche la celebración de una jornada académica que tendrá lugar el 17 de octubre en Córdoba y que versará sobre los patronos andaluces. El hermano mayor, Julián Hurtado, señaló que se trata de un "congreso inédito" que estará coordinado por Juan Aranda Doncel y el propio Hurtado, que pretenden que tenga una proyección nacional. Insistió en que esta actividad se enmarca en el 300 aniversario de la reorganización de la cofradía y que otro de los acuerdos adoptados pasa por reforzar las actividades con los más necesitados de la ciudad, "que son muchos", de ahí que se esté preparando además una recogida de alimentos.

Otro de los asuntos abordados fue el de una posible salida extraordinaria del Arcángel este año, una propuesta que finalmente se descartó por varias razones. En primer lugar, el hermano mayor hizo referencia al alto coste que supone una procesión de estas características y, en segundo término, "porque tampoco queremos que eso se pudiera interpretar "de manera inadecuada", en referencia a la polémica suscitada en los últimos días por el cuadro del Arcángel en el Ayuntamiento. "Hemos considerado que no es el momento y no queremos que se nos malinterprete", apuntó Hurtado de Molina, quien confió en la participación de toda la sociedad cordobesa y de las instituciones de Córdoba en el programa de actos que están organizando.

De otro lado, Julián Hurtado de Molina lamentó ayer la falta de hermanos que tiene el Custodio San Rafael, lo que provoca grandes problemas económicas. Además, existen otro tipo de inconvenientes para la salida procesional, como la necesidad de encontrar un paso para sacarlo en procesión. La salida extraordinaria se planteó dentro del ámbito religioso, para conmemorar una fecha señalada y no "para crear un grupo de presión ni promover movilizaciones porque esa no es la tarea de la hermandad". Todos los años se abren las puertas de la iglesia del Juramento, en el barrio de San Lorenzo, para que los fieles puedan acercarse a venerar a San Rafael, un símbolo no solo religioso sino también una seña de identidad de la ciudad, insistieron.