Los hosteleros de Córdoba avisan de la falta de camareros para cubrir la temporada alta del turismo

Bares

Terrazas en la Ribera en Córdoba. / Miguel Ángel Salas

La Semana Santa, las Cruces, los Patios, la Feria de Nuestra Señora de la Salud... Córdoba se adentra en la temporada alta del turismo y el sector de la hostelería lanza una nueva señal de alerta: no hay suficiente personal cualificado para atender la demanda laboral que se avecina en los bares y restaurantes. Así lo ha advertido este lunes el presidente de la patronal de los empresarios de hostelería y turismo (Horeca), Miguel Ángel Morales, quien ha recordado que el sector requiere al menos un millar de trabajadores.

Se trata fundamentalmente de camareros, pero también hace falta personal de sala y de cocina. Y el problema no radica solo en la capital, sino también en los pueblos. "Hasta el momento, muchos establecimientos han estado acortando horarios de comida, pero llega la temporada alta y las perspectivas son buenas, pero necesitamos personal cualificado", ha advertido Morales, quien ha subrayado la inquietud que existe entre los empresarios de este sector.

Horeca recuerda que, de media, cada restaurante emplea en Córdoba a 7,5 personas. La gran mayoría -sostiene el portavoz de la patronal- necesitaría contratar al menos a una persona de manera indefinida, más contar con un refuerzo eventual para fechas concretas como la Semana Santa y los fines de semana de abril, mayo, septiembre y octubre.

La previsión de la patronal es que como consecuencia de la liberalización del horario comercial para esas fechas a raíz de la declaración de la capital como zona de gran afluencia turística la afluencia aumente, lo que genera "incertidumbre". "Como positivo, a más horas de apertura más volumen de venta, lo que se debería traducir a priori en un aumento del beneficio, que es lo que la lógica nos hace ver, y aún más en unos tiempos en que toda venta es bienvenida", rezonan desde Horeca.

La patronal, no obstante, alerta de "una serie de dudas o conflictos empresariales, como por ejemplo la contratación de personal o el aumento de horas de trabajo". Desde las empresas asociadas se hace hincapié en que se encuentran en la tesitura de aumentar plantilla o las horas extras remuneradas. En ambas circunstancias, la asociación indica que los negocios hosteleros van a estudiar las opciones "más viables y rentables", puesto que han de evaluar el coste de contratación de un empleado con respecto al posible aumento de ventas.

Los comercios de Córdoba podrán abrir con libertad total de horarios y días durante Semana Santa y los meses de abril, mayo, septiembre y octubre. Así lo ha autorizado finalmente la Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, que zanja al fin el debate ciudadano de los últimos meses sobre la idoneidad de aplicar al liberalización horaria que, hasta el momento, solo se permitía en el entorno de la Judería y la Mezquita-Catedral, declarado zona de gran afluencia turística.

A partir de ahora, esta medida se extiende a toda la ciudad y tendrá una vigencia "indefinida" mientras se mantengan las circunstancias que la motivan. La primera de ella es superar los 100.000 habitantes (en Córdoba hay 322.071) y que se hayan registradon más de 600.000 pernoctaciones en los últimos ejercicios económicos, tope que la ciudad también rebasa de sobra, con 1,6 millones de noches de hotel de media entre los años 2017 y 2019, según los datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Otro requisito es contar con la declaración de Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco (lo son la Mezquita-Catedral, el Casco Histórico, Medina Azahara y la Fiesta de los Patios) o contar con uno o varios bienes inmuebles declarados Bien de Interés Cultural (BIC). Y Córdoba posee un total de 97 repartidos por todo el municipio.

Y, por último, cumple el requisito de albergar la celebración de un "gran evento deportivo o cultural, de carácter autonómico, estatal o internacional, calificado como tal por las autoridades". Recuerda la Consejería que la Semana Santa cordobesa está declarada Fiesta de Interés Turístico, mientras que el Festival de los Patios tiene la consideración de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad desde diciembre de 2012.

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