Un investigador de la Universidad de Córdoba recibe la prestigiosa ayuda Emergia para profundizar en la zoonosis

Córdoba/La Consejería de Universidad, Investigación e Innovación ha concedido mediante el Programa Emergia una financiación de 242.840 euros al investigador de relevancia internacional Ehab Kotb Abd Elghany Elmahallawy para que continúe desarrollando su labor científica en el ámbito de la agroindustria y la alimentación en la Universidad de Córdoba (UCO), a través del grupo de I+D especializado en sanidad animal y zoonosis de la Facultad de Veterinaria.

Según ha informado este jueves la Junta, Ehab Kotb Elmahallawy, de 39 años, es uno de los 42 científicos elegidos en la tercera convocatoria de esa iniciativa, que es una de las apuestas estratégicas del Ejecutivo autonómico para fomentar la I+D+I de la comunidad y reforzar su capital humano. Tiene como finalidad atraer investigadores con trayectoria brillante, de cualquier nacionalidad y con capacidad de liderazgo por un período de cuatro años con el fin de que contribuyan a fomentar la investigación científico-técnica de excelencia en la región.

En esta edición, el esfuerzo inversor de la Junta se ha cuantificado en 10,14 millones de euros, una partida que permitirá la incorporación de esos 42 perfiles en siete universidades públicas y ocho centros de I+D, dependientes del CSIC, radicados en Andalucía.

El programa Emergia incorpora por primera vez en esta convocatoria el compromiso de estabilización para ese personal, con el objetivo de mejorar sus condiciones laborales, promover la consolidación de la carrera investigadora y favorecer, además, el retorno del talento andaluz que realiza sus proyectos fuera de la comunidad. De acuerdo con esta novedad, las universidades y los organismos públicos de I+D receptores de esta financiación asumen la obligación de crear una plaza con el mismo perfil del incentivo concedido.

Trayectoria en Egipto y León

Por otro lado, también se exige a los investigadores un periodo de estancia o vinculación laboral de al menos un año en universidades y centros de investigación de otros países para impulsar la internacionalización de sus trayectorias. Este científico de origen egipcio, que realizó su doctorado en Medicina Clínica y Salud Pública, ha sido profesor en la Facultad de Medicina Veterinaria en la Universidad de Sohag (Egipto) y desarrolló su investigación posdoctoral en la Universidad de León.

Su experiencia científica y académica comenzó como parasitólogo, pero se ha involucrado en una amplia variedad de proyectos de investigación que le han permitido ganar un conocimiento transversal en microbiología, farmacología y enfermedades zoonósicas. Además, Elmahallawy se incluyó en 2023 en el ranking de la Universidad de Stanford que clasifica a los mejores investigadores en Veterinaria del mundo.

Este científico continuará profundizando desde la UCO en su línea de investigación relacionada con la caracterización comparativa de cepas de la bacteria Bartonella recuperadas de dos entornos drásticamente diferentes: hospedadores vertebrados y ectoparásitos artrópodos en dos escenarios epidemiológicos diferentes. Las zoonosis emergentes y amenazantes contribuyen en gran medida a la carga mundial de enfermedad y mortalidad.

Entre otras, las bartonelosis comprenden un grupo de enfermedades zoonóticas emergentes transmitidas por vectores que están causadas por varias especies de bacterias pertenecientes al género Bartonella. Desde una perspectiva médica comparada, las Bartonellas son patógenos de importancia crítica y distribución mundial y han sido responsables de una amplia gama de manifestaciones clínicas, entre ellas anomalías cardiovasculares y reumatológicas en seres humanos.

Hasta 120.000 euros para conformar un equipo propio de investigación

Los incentivos de 10,14 millones concedidos por la Junta, además de cubrir la contratación laboral de los 42 investigadores, también incluyen una dotación adicional para desarrollar sus líneas de I+D y para conformar un equipo propio de investigación, con un importe máximo de hasta 120.000 euros, dependiendo, en cualquier caso, de las áreas científico-técnicas en las que se centre la iniciativa.

Estos científicos, que tienen una edad media de cuarenta años, son doctores con una carrera posdoctoral en sus respectivos ámbitos de investigación que oscila entre los cinco y los doce años. De los 42 científicos, 31 son españoles y, en su mayoría, estudiaron en las universidades públicas andaluzas. El resto de los profesionales proceden del continente europeo: Francia, Italia, Portugal, Alemania, República Checa, Polonia y Bulgaria. También de Latinoamérica (Costa Rica y Cuba) y de África (Egipto).

La mayoría de los candidatos elegidos provienen de universidades y centros de investigación radicados en la geografía nacional, europea e internacional, entre los que destacan la Escuela Icahn de Medicina de Monte Sinaí (EEUU), la Organización de Investigación Científica e Industrial de la Commonwealth (Australia), la Universidad de la Sapienza de Roma (Italia), el Fondo de la Investigación Científica - FNRS (Bélgica), la Universidad Mendel de Brno (República Checa), la Universidad de Carolina (República Checa) o el Centro de Ciencias Marinas del Algarve (Portugal), entre otros.