Investigadores cordobeses estudian variedades de cereales resistentes al cambio climático
Agricultura
El Instituto de Agricultura Sostenible busca ofrecer granos con mejores cualidades nutricionales
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Córdoba/El Instituto de Agricultura Sostenible del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IAS-CSIC) de Córdoba se encuentra a la vanguardia en la investigación y el desarrollo de nuevas variedades de cereales que puedan resistir enfermedades, tolerar condiciones climáticas adversas y ofrecer mejores cualidades nutricionales.
La investigadora del Departamento de Mejora Genética Vegetal del IAS-CSIC Elena Prats ha detallado que trabajan con trigo harinero, trigo duro, avena, tritórdeo y arroz, entre otros cereales, explorando la diversidad genética disponible y aplicando técnicas innovadoras para mejorar su rendimiento y resiliencia.
Para Prats, "uno de los retos cruciales" que abordan en el IAS-CSIC es la adaptación de los cereales al cambio climático porque "el aumento de las temperaturas y la variabilidad en las precipitaciones afectan directamente la productividad agrícola".
La biología reproductiva del trigo
El IAS-CSIC estudia la biología reproductiva del trigo y otros cereales con el objetivo de desarrollar herramientas que permitan optimizar su rendimiento.
Desde la manipulación de la meiosis (división de la célula) hasta la implementación de sistemas de androesterilidad para la producción de híbridos comerciales, los avances en este campo tienen el potencial de transformar la agricultura cerealista.
La resistencia a enfermedades y estrés abióticos es otro aspecto crítico en la producción de cereales. Patógenos como el oidio y la roya y estrés que generan la sequía o las altas temperaturas afectan significativamente el rendimiento, lo que obliga a un uso intensivo de fungicidas o requieren insumos limitantes como el agua.
Por ello, "en el IAS investigamos la respuesta de los cereales a estos estreses, explorando las bases celulares y moleculares de la resistencia/tolerancia y evaluando el impacto del estrés en la planta y sus interacciones, para conseguir variedades más resistentes y resilientes", ha detallado.
El trabajo en genética y biotecnología es otro pilar de la investigación con técnicas "como la edición genética mediante CRISPR/Cas y el ARN de interferencia que están revolucionando la manera en que se mejoran los cultivos", señala la investigadora.
Estas herramientas permiten "modificar genes específicos y se están aplicando en el IAS para el desarrollo de cereales con bajo contenido en proteínas inmunogénicas, responsables de la enfermedad celíaca y otras intolerancias al gluten".
Elena Prats ha explicado que uno de los aspectos más destacados de la investigación del IAS en calidad de cereales es el estudio de los carotenoides en el trigo duro.
Estos compuestos, en particular la luteína, no solo determinan el color amarillo del grano, sino que también poseen propiedades beneficiosas para la salud, por lo que "comprender cómo se acumulan estos pigmentos y qué factores genéticos los regulan permite desarrollar variedades con mayor contenido de carotenoides, contribuyendo tanto a la calidad del producto como a la nutrición de los consumidores".
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