El juego entendido como forma de vida

Jugar al ajedrez está reservado para una minoría en la sexta edición del Festival Internacional de Juegos que ayer dio comienzo en el Palacio de la Merced. Organizado por la asociación Jugamos todos, el encuentro es un referente del mundo de los juegos de mesa llevados al límite y "un lugar abierto para los juegos tradicionales y modernos", explicó la tesorera del colectivo, Sonsoles Fernández.

El mundo de los juegos de mesa ya no es sólo para los amantes del ajedrez, de las cartas, las damas o el clásico parchís. Se trata de un sector que incluye numerosas opciones y posibilidades de ocio para todos los públicos y que incluye juegos de estrategia y también de carácter bélico. "No es un sector que esté en crisis, sino una afición que va creciendo", reconoció Fernández, quien destacó la importancia del festival, ya que traerá a Córdoba a figuras internacionales, como el autor de juegos francés Antoine Bauza, responsable de creaciones como Ghost Stories, Pony Express (con Bruno Faidutti), Hanabi o 7 wonders. Otro de los autores invitados al festival y que acudirá para presentar sus próximos lanzamientos es Gil d'Orey, autor de los juegos internacionales Caravelas y Vintage. La tesorera de la asociación Jugamos todos -colectivo que nació en 2006 y cuenta ya con 80 socios- indicó que con una inversión mínima de 30 euros cualquier persona puede disfrutar de este ocio lúdico y que fomenta también la reunión entre amigos, además del desarrollo de habilidades cognitivas y de planificación. Fernández señaló que en países europeos como Alemania la cultura del juego está en toda su extensión y que en España hay cada vez más aficionados.

Durante todo el fin de semana, los amantes de este tipo de ocio podrán disfrutar de las novedades del sector de juegos y participar en ellos. El festival incluye presentaciones y demostraciones en directo de juegos, como el denominado el del reto de La Isla Prohibida o la del juego Fortuna y Santiago de Cuba.

Junto a la demostraciones, el festival es la sede del tribunal del Juego del Año, que dará a conocer al ganador mañana. Según indicó Fernández, los finalistas que optan a alzarse con este galardón son: 7 wonder, de Antoine Bauza; Félix. El gato encerrado, de Friedemann Friese; Finca, de Ralf Zur Linde & Wolfgang Sentker; y La isla prohibida, de Matt Leacock.

Fernández también hizo referencia al cuarto concurso internacional de Fotografía lúdica incluido en el festival. Las imágenes finalistas forman parte de una exposición que se puede ver hasta el domingo en el Palacio de la Merced y cuyo fallo se conocerá a lo largo del fin de semana.