Margarita Robles sobre la misión en la que participan 260 militares de Córdoba: "No podemos permitir que Líbano sea el nuevo Afganistán"

Madrid/La Brigada Guzmán El Bueno, con sede en la base de Cerro Muriano de Córdoba, inició el pasado 14 de noviembre su despliegue en Líbano para coger el testigo, tras algo más de seis meses, de la Brigada Aragón en la base Miguel de Cervantes. En total, 260 militares cordobeses están ya en suelo libanés para darle continuidad al compromiso con la paz y la seguridad de España, en el marco de la misión de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (Unifil), creada en 1978 a raíz de un ataque palestino a Israel.

En julio de 2006, como parte de la operación Libre Hidalgo, España entró a formar parte de la misión Unifil, asignada por las Naciones Unidas para monitorizar el cese de hostilidades en la zona ante el conflicto entre Israel y Líbano. Desde entonces, las Fuerzas Armadas españolas se han desplegado en el país ininterrumpidamente durante 18 años. El número de efectivos ha ido disminuyendo progresivamente en los últimos años en plena fase de estabilización. El 7 octubre de 2023, esta situación cambió bruscamente con el inicio de la guerra entre Israel y Palestina y el apoyo de Hezbolá (grupo paramilitar musulmán chií libanés) a Hamás (organización política y paramilitar palestina).

Ante la difícil situación que vive Oriente Próximo con el Líbano implicado directamente en el conflicto entre Israel y Palestina, la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha comparecido ante la Comisión de Defensa en el Congreso para informar del desarrollo de las operaciones de las Fuerzas Armadas en el exterior, destacando que "ahora es más necesaria que nunca la presencia de Unifil en Líbano para consolidar la situación de paz en el país y proteger las fronteras". Sobre todo porque las fuerzas de defensa israelíes incrementaron el pasado 30 de septiembre sus ofensivas en el sur del Líbano superando la Línea Azul (demarcación entre el Líbano e Israel).

La incursión terrestre entre ambas regiones en la Línea Azul (conocida también como Blue Line), ha alcanzado unos dos kilómetros de distancia en cada eje. Como ha explicado Margarita Robles, dicha situación armada, que ya se ha saldado con "nueve heridos de consideración en la Unifil" (ninguno de ellos español), obliga a los 650 hombres y mujeres que conforman el contingente español (260 desde Córdoba) desplazado al Líbano durante la segunda quincena de noviembre "a ajustar medidas de seguridad".

El contingente español en Unifil comprende un sistema de alerta basado en tres niveles en función de la intensidad de las acciones defensivas que aplique el ejército israelí en territorio libanés. El primer nivel de alerta, como ha señalado la ministra de Defensa, conlleva que el contingente español mantenga su actividad normal de protección de fronteras. En el segundo nivel de alerta, las tropas de Unifil se protegen en las bases más cercanas para garantizar la seguridad, mientras que en el tercer nivel, el más alto, los militares españoles procederán a refugiarse en búnkeres.

"Aunque Unifil no es objetivo de Israel, en la zona están sucediendo enfrentamientos y pueden ocasionarse daños colaterales, por lo que las medidas de seguridad deben estar presentes y actuar en los niveles dos y tres es indispensable, pues ya ha habido posiciones que han sufrido fuego. La situación es tensa, pero nuestros militares tienen una formación y una preparación digna de elogios y un alto compromiso con la paz y la misión de las Naciones Unidas", ha destacado Robles, quien ha hecho hincapié en la figura del general Lázaro al mando del contingente en Líbano y en que recientemente se ha renovado el acuerdo entre España y Unifil hasta el 31 de agosto de 2025.

De hecho, la ministra ha recalcado que "el futuro de Unifil está ligado a las Fuerzas Armadas libanesas", además de que "la capacidad de Unifil es más necesaria ahora que nunca". Hasta la fecha, desde 2006 en el Líbano han fallecido 16 miembros de las Fuerzas Armadas españoles en terreno libanés, 15 de ellos del Ejército de Tierra y uno de la Armada. Pérdidas que son "una lección de mora y heroísmo" y que convierte al Líbano "en un país hermano", como ha señalado Robles.

Acerca de la guerra entre Israel y Palestina, la ministra de Defensa ha condenado "las agresiones y el millón de palestinos y los 60.000 ciudadanos israelíes que se han visto obligados a abandonar sus hogares" un año después del inicio de la guerra. Además, ha lamentado "las actitudes poco colaborativas de Israel y Hezbolá" y ha solicitado "la retirada de Israel del Líbano", país con el que España "tiene un vínculo especial desde 2006".

"No podemos permitir que Líbano sea el nuevo Afganistán", ha enfatizado Margarita Robles durante la Comisión de Defensa de este miércoles en el Congreso, comparando la posible futura situación del país libanés si se implica en la guerra con el "fracaso" que supuso la misión en Afganistán, país en el que España "pagó un alto precio en vidas humanas" con más de un centenar de fallecidos y en el que "las mujeres están sufriendo el silencio de la comunidad internacional". Una honorable responsabilidad en la que, desde el pasado 14 de noviembre, 260 militares de la Brigada Guzmán El Bueno de Cerro Muriano juegan un papel fundamental.