Los matrimonios descienden un 58% desde el año 1989

Casarse parece no estar de moda en los últimos años. Son muchas las parejas que renuncian a darse el sí quiero, con el que antes tanto se soñaba. Según los últimos datos del estudio Movimiento Natural de la Población del Instituto Nacional de Estadística (INE), el número de matrimonios se ha reducido en la provincia un 58,3%, siguiendo una tendencia generalizada en el resto de regiones. Los motivos pueden ser diversos: el cambio en las costumbres de la sociedad o la crisis económica, que hace que las parejas no tengan en mente celebrar este ritual de unión.

Los datos del INE son contundentes. Desde 1975 hasta el pasado año, el número de matrimonios ha ido decayendo de forma clara. En 2010, se celebraron en Córdoba 2.972 matrimonios, mientras que en 1975 la cifra ascendió a 4.731. El número más alto se registró en 1989 cuando la cifra de matrimonios contraídos en la provincia llevó a superar la cifra de 5.000.

Uno de los motivos principales es el económico. Los datos del estudio Movimiento Natural de la Población ponen de manfiesto que el descenso de los enlaces es más acusado al llegar a 2007, año en el que comenzó la crisis económica. Un enlace motrimonial conlleva unos gastos que cada vez menos parejas están dispuestas a asumir, desde el convite, las fotos, y según sea el enlace civil o religioso, el alquiler del local o el donativo a la iglesia. Un coste que también hay que abordar es el de los vestidos, y sobre todo, el de la novia. "El número de trajes que vendemos ha bajado, no se si es por el descenso de matrimonios o por la crisis, pero vendemos menos", asegura Manuela, dependienta de la céntrica tienda Marta Novias. Los vestidos rondan desde los 1.000 euros hasta los 3.000, depende de la colección elegida y "de lo que la novia se quiera gastar".

Por otro lado, la edad con la que los novios contraen matrimonio ha registrado un ascenso. "La chica que viene a comprar un vestido no es tan joven como antes que se casaban con 23, ahora la mayoría tendrán alrededor de treinta", comenta Manuela.

En cuanto a la forma de la celebración nupcial, sigue imponiéndose la religiosa. Del total de matrimonios en la provincia, 1.862 se celebraron según el rito de la religión católica y 1.100 por el procedimiento civil. Así, las bodas ante la Biblia son casi el doble que las que usan el Código Civil. Las ocho restantes, se llevaron a cabo según ritos de otras religiones. "Los trajes que tenemos son para cualquier tipo de celebración, aunque aquí en la tienda vendemos más para las celebraciones religiosas, que por ahora son más numerosas que las civiles", relata Fátima, vendedora de la firma de vestidos de novia Rosa Clará.

Otro motivo del descenso de matrimonios puede ser el social. Cada vez son más los jóvenes que se deciden a convivir formalizar su relación. El matrimonio se percibe como un papeleo. Con los datos del INE se constata la tendencia a la baja de enlaces, lo que puede servir para estudios posteriores de comportamiento y hábitos sociales. Se trata de un cambio significativo en la sociedad de los últimos años.