El 28% de los médicos de Atención Primaria del Distrito Córdoba consume ansiolíticos

Córdoba/El 28% de los médicos de Atención Primaria del Distrito Córdoba necesita consumir ansiolíticos o psicofármacos, según los datos a los que ha tenido acceso el Sindicato Médico Andaluz en Córdoba y que "seguramente sean similares en otros distritos de la provincia". El órgano sindical considera que esta cifra está "infraestimada ya que por diversos motivos la presencia de psicopatología o necesidad de estos tratamientos puede no constar en las fuentes a las que han podido tener acceso". Aún así, es una "cifra bastante relevante".

Aunque este indicativo del nivel de estrés y ansiedad al que se enfrentan los profesionales "puede no ser únicamente debido a causas laborales", sí creen que esta es una "fuente patógena muy importante, que además está estrechamente relacionada con otras fuentes de estrés como la conciliación de la vida familiar". En esta línea van "varias advertencias de la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante la última década".

Además, el colectivo aclara que entre las patologías que puedan precisar tratamiento con psicofármacos están los trastornos del sueño, "patología creciente en un entorno en el que las guardias han pasado a ser turnos de atención continuada con los problemas de salud que esto genera a los profesionales".

Encuesta del Sindicato Médico

Recientemente, el Sindicato Médico Andaluz en Córdoba ha lanzado a modo de encuesta online el test de Maslach, utilizado como uno de los criterios diagnósticos del síndrome de burnout o desgaste profesional. La intención del órgano sindical "no es hacer diagnóstico de burnout, sino más bien hacer una primera aproximación a la temperatura real de la profesión médica". El cuestionario recoge respuestas de médicos de Primaria y de facultativos especialistas de área de atención hospitalaria (FEA). Las valoraciones van del 1 al 6, siendo el 4 "una vez a la semana", el 5 "pocos/varios días a la semana" y el 6 "todos los días".

Los datos preliminares señalan que hasta un 60% de los profesionales encuestados puntúan con un 5 o un 6 la afirmación "Me siento emocionalmente agotado por mi trabajo". Las cifras parecen similares, quizás algo más bajas, en atención hospitalaria. Por otro lado, un 50% de los encuestados da estas puntuaciones elevadas a la aseveración “Cuando me levanto por la mañana y me enfrento a otra jornada de trabajo me siento fatigado“, cifras similares en FEA.

Un 30% de los galenos que han participado en la encuesta da puntuaciones de 5 o 6 la afirmación “Siento que estoy tratando a algunos pacientes como si fueran objetos impersonales“, mientras que un 20% la puntúa con un 4. "Esta sensación no implica intencionalidad en absoluto, sino que es más bien reflejo de que con la falta de tiempo y de medios, así como con la sobrecarga asistencial, no se ofrece la respuesta que nos gustaría ofrecer a los pacientes", señalan desde el Sindicato Médico.

Al respecto, aclaran que esto se da en aquellas situaciones en las que "tanto paciente como profesional comparten frustración: la sobrecarga asistencial y la falta de medios merman la calidad asistencial y además pueden deteriorar la relación médico-paciente; en definitiva, la asistencia de deshumaniza por mucho que el término humanización llene la boca de nuestras autoridades sanitarias". Porque "¿se puede dar una atención humanizada con escaso tiempo por paciente y con miles de trabas a no pocos actos médicos?", cuestiona el colectivo.

Según se desprende de los resultados de la encuesta, un 80% de los médicos de familia de la provincia de Córdoba asignan la puntuación de 5 o 6 a la aseveración “Siento que mi trabajo me está desgastando” y un 60% a “Me siento frustrado en mi trabajo”. Además, un 50% asigna estas puntuaciones altas de 5 o 6 a “Me siento como si estuviera al límite de mis posibilidades”, cifras muy similares en FEA.

Según estos datos preliminares, un 50% de los participantes asigna puntuaciones altas a la afirmación “Me siento estimado después de haber trabajado íntimamente con mis pacientes”, es decir, cuando se da la situación que permite un trabajo más directo con el enfermo. En este caso, la puntuación para los especialistas hospitalarios es peor. "Es lógico al no tener la posibilidad de atención longitudinal que sí se puede ofrecer en Atención Primaria, cuando un mismo médico lleva tiempo en un cupo", por lo que trabaja de "manera más directa y prolongada con los pacientes".

Informe Paime

El Sindicato Médico ha recordado algunos datos del informe Paime (Plan de Atención Integral al Médico Enfermo) de 2023, que refleja que hasta un 78,6% de los profesionales que trabajan en España acuden a estos programas de forma voluntaria espontánea buscando ayuda psicológica, y en aproximadamente un 21% de los casos lo hace de forma voluntaria inducida (con frecuencia por un psiquiatra, un colega de profesión, un familiar, un cargo intermedio o una Unidad de Prevención de Riesgos Laborales).

Entre los motivos de la demanda, un 84,9% son debidos a trastornos mentales (fundamentalmente síndrome ansioso-depresivo y trastornos adaptativos) aunque se encuentran tasas de un 5,6% de alcoholismo y de un 3% de adicción a drogas (por ejemplo, medicamentos ansiolíticos). Un 44;5% de estos profesionales que acuden a estos programas Paime son de la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria y un 87% pertenecen al ámbito urbano, frente a un 13% rural.