Los niños vuelven a las calles de Córdoba tras más de 40 días de confinamiento

Menos mal que en 42 días de confinamiento nadie se olvida de cómo correr, cómo saltar o cómo darle pelotazos al balón. Porque a todo el mundo le afecta estar encerrado en casa durante más de un mes, pero hay que comprender que quien se pasa su día brincando tiene en esto de la cuarentena una tarea mucho más difícil.

Desde este domingo, los niños y niñas de todo el país, mientras sean menores de 14 años, pueden pisar de nuevo suelo firme, atravesar el umbral del portal y echar a correr (con cuidado) para desquitarse de todas las horas que se han pasado en casa demostrando lo bien que saben portarse.

Entre las familias cordobesas, y se entiende de todo el país, había opiniones dispares. Desde aquellas que querían que este día llegara cuanto antes, hasta las que no se fían del todo de que esta medida sea la más adecuada para frenar la pandemia.

Se mire por donde se mire, lo cierto es que de 9:00 a 21:00 está permitido que los menores de 14 años salgan a la calle, respetando siempre las medidas de seguridad, y que incluso utilicen juguetes como pelotas o bicicletas.

Por ello, han sido muchos los cordobeses que han aprovechado este primer día de libertad infantil para salir con sus hijos a la calle. El tiempo no ha sido el mejor posible a lo largo de la mañana, incluso alguna gota de lluvia se ha dejado sentir, pero las ganas de respirar aire puro han podido con todos los fenómenos meteorológicos.

Una de las principales zonas de esparcimiento en la ciudad ha sido el Vial Norte. Sin apenas vida durante este confinamiento, este paseo es uno de los viales de la ciudad que siempre concentra más actividad, ya sea de gente dando un paseo, haciendo deporte o de lugar de paso hacia otras calles.

Hasta allí han ido Manuel López y dos de sus tres niños, Bruno y Noah. Manuel ha contado a el Día que las ganas de salir a la calle eran grandes, a pesar de que la rutina del confinamiento ya ha calado en los más pequeños de la casa. Noah, de dos años, es el que más ilusión ha mostrado cuando ha podido observar más allá de las paredes de su casa y junto a él Bruno, de ocho, que ha podido salir además con su bici.

Manuel tiene otro niño, Leo, de 12 años, que ha preferido quedarse en casa para salir por la tarde. Aunque Leo, como explica su padre, tiene entretenimiento de sobra en casa con la consola o la tablet. De momento, no tienen pensado cómo repartir estas salidas e irán viendo a medida que avancen los días.

Por el Vial también se han dejado ver Rebeca Pantoja y su hijo Alberto, de siete. Diego, el mayor, de diez años, se ha quedado haciendo tareas en casa y saldrá por la tarde. Rebeca comenta que aunque el primer mes de confinamiento ha ido bien, una vez pasado ese umbral parece que la cosa ha empeorado un poco y se ha podido ver algo más de desánimo en los niños.

Por eso, esta salida ha sido un chute de adrenalina para poder afrontar lo que aún queda. Alberto ha salido sin juguetes, de momento, porque Rebeca quería explorar cómo era esta primera jornada de desconfinamiento parcial. Aún así, apunta que la mayor parte de las personas que ha podido ver durante la salida cumplían con creces los mandatos para estos paseos.

A la calle también se han aventurado Macarena Calvo y su niña Martina, de ocho años. Aunque Macarena reconoce que no tenía muy claro si sacar a pasear o no a Martina, finalmente se decidió, principalmente, por las ganas de la niña, pero también tras consultar mucha información sobre las medidas de prevención.

Martina también se ha convertido en una experta a la hora de saber todo lo que no se debe hacer si sale a la calle estos días, por lo que ha aguantado casi todo el trayecto con su mascarilla puesta. Vial, Colón y Ronda de los Tejares han compuesto el paseo de Martina y Macarena, que además tienen pensado ya salir todos los días.

Con Macarena, de 12 años, y Valeria, de cinco, ha salido Adolfo Santos para este primer paseo tras la cuarentena, el cual ha sido, reconoce el padre, "muy divertido", porque las niñas han podido disfrutar con los patines y la bici. "Estaban deseosas de salir", reconoce Adolfo, que también apostilla que "son los niños los que mejor se adaptan a estas circunstancias, incluso más que nosotros".

Cuenta también que viven en la calle Los Chopos y que entre sus zonas para pasear se encuentran el Parque de la Asomadilla o el Vial, aunque han elegido este último por el mal tiempo de ayer. Durante el paseo, además, se han encontrado con compañeros del colegio, aunque las niñas, claro está, han sabido mantener la distancia y respetar todas las medidas de seguridad.

Mientras, en la zona de la Ribera paseaban Daniela y Ángela, dos primas que han coincidido en esta primera salida. Sus madres, hermanas (Ángela y Jose Santos), se han visto por casualidad (y manteniendo las distancias) en la zona del parque Ruth y José donde, como ha comentado la primera, había muchísimos niños a última hora de la mañana.