Los nuevos rostros de la Junta

Dos meses y 26 días después de tomar posesión, el Gobierno andaluz ya tiene estructura periférica en Córdoba. El Consejo de Gobierno hizo públicos ayer los nombramientos de los cinco delegados territoriales más la delegada del Gobierno tras un complicado parto por el empeño del presidente Griñán de reducir en un 50% el número de altos cargos de la Junta. Impelido por las prisas del socio en su Ejecutivo, que el lunes dio a conocer quiénes representarán a sus consejeros y vicepresidente, y por un clamor que veía imposible mantener más tiempo los cinco meses de interinidad de los delegados cesantes, el PSOE negoció hasta minutos antes de la cita semanal en San Telmo los nombres de sus representantes. Los equilibrios del partido, la dificultad de cuadrar la paridad y las reticencias de los consejeros pusieron la tensión en el ambiente. Pero se acabó la espera.

Isabel Ambrosio, José Ignacio Expósito, Francisco Zurera, Maribel Baena, Manuela Gómez y María de los Santos Córdoba serán los interlocutores de la Administración autonómica en Córdoba. Se enfrentan a un reto mayúsculo en un momento de grave crisis económica y considerable depresión social. Los recortes de Gobierno central y autonómico y su aplicación ya tienen una amplia contestación ciudadana que en septiembre puede ser aún mayor. A ello habrá que unir que la reducción de la estructura dictaminada por Griñán alumbra áreas de gestión inmensas, en las que un mismo alto cargo lidia con responsabilidades diversas e, incluso, contrapuestas.

La Delegación del Gobierno de Isabel Ambrosio refuerza su papel integrando los servicios periféricos de las consejerías de Administración Local y Relaciones Institucionales, en manos de IU, Justicia e Interior, Hacienda y Administración Pública. Además contará con una oficina de la Vicepresidencia, que, bajo el mando del coordinador provincial de IU, Pedro García -que será nombrado en breve-, velará porque la coalición tenga la visualización que pretende en el desempeño de las labores de Gobierno. Se persigue potenciar además el carácter político de Ambrosio y que tenga mayor presencia y relevancia en el día a día provincial.

Del anterior equipo de delegados repiten Maribel Baena, Francisco Zurera y José Ignacio Expósito. Los dos primeros son dos clásicos y reciben el reconocimiento del PSOE por haber sido de los pocos que han dado la cara en los últimos meses. Baena tiene la difícil papeleta de lidiar con los ajustes que tienen en pie de guerra al estamento sanitario y de compaginar los recortes en la Ley de Dependencia con las necesidades de los colectivos afectados. Además deberá ganar presencia pública y perder el miedo que la mantiene en segunda fila en no pocas ocasiones. Zurera, por su parte, se confirma como hombre fuerte del secretario socialista, Juan Pablo Durán, y a su vasto control de la Agricultura deberá unir la mano izquierda necesaria para que el Medio Ambiente no choque con la Ordenación Territorial. Difícil misión. Expósito, por su parte, pasa de Medio Ambiente a Economía, Innovación, Ciencia y Empleo en el doctorado real de un joven político llamado a mayores hitos en la política provincial.

Las dos novedades son llamativas. Manuela Gómez Camacho da el salto para gestionar Educación, Cultura y Deportes. En el primer ámbito no debe tener problemas dada su extensa trayectoria profesional en el IES Trassiera y será más en la Cultura y el Deporte, dos grandes damnificados por los recortes, donde habrá de demostrar de qué pasta está hecha. María de los Santos Córdoba accede a Fomento, Vivienda, Turismo y Comercio con la experiencia de gestión que tuvo como alcaldesa de Doña Mencía entre 2007 y 2011, una época en la que se destacó por reclamar que la Autovía del Olivar pasase por su localidad soterrada. La Ronda Norte, el Centro de Congresos y la citada carretera serán buenas piedras de toque.