Las parejas retrasan en Córdoba ya su primer matrimonio hasta los 32 años

Las parejas cordobesas retrasan ya su primer matrimonio hasta una edad media de 32 años, según los últimos datos al respecto del Instituto Nacional de Estadística (INE), en los que se hace un barrido de cifras desde 1976 a 2018. Consolidar la carrera profesional y lograr una estabilidad económica son dos de las claves más importantes a la hora de dar ese paso para hombres y mujeres. Según esos datos, en el caso de los hombres la edad media con la que afrontan esas primeras nupcias ha ido creciendo año a año hasta superar levemente ya los 33 años y en el caso de la mujer ha ocurrido lo mismo hasta llegar a los algo más de 31 años.

Las estadísticas reflejan que la edad media del primer matrimonio en Córdoba en el caso de los hombres no sólo es inferior a la media andaluza –que está casi en los 34 años– sino que también es inferior a la media de la mayoría del resto de provincias de la comunidad autónoma. Tan solo los jiennenses arrojan una edad media inferior a la hora de contraer su primer matrimonio, al no rebasar los 33 años.

Y en el caso de las mujeres ocurre lo mismo. La edad media del primer matrimonio en Andalucía para la mujer es de casi 32 años y las jiennenses son la únicas que arrojan una edad media inferior a las cordobesas a la hora de contraer su primer matrimonio, al no superar los 31 años. En el polo opuesto se sitúan los gaditanos y las gaditanas cuyas edades medias a la hora de estrenarse como casados se sitúan por encima de los 34 y los 32,5 años, respectivamente.

Desde 1980, cuando la edad media de las primeras nupcias era para los cordobeses de 26 años –al igual que en 1981– cada año se ha ido incrementado esa cifra, con la excepción de 2008, año en el que experimentó una leve caída con respecto a 2007 –en 2008 fue de 30,09 años frente a los 30,15 años de 2007–. Precisamente, no fue hasta 2007 cuando, en el caso de los cordobeses se rebasaron los 30 años de edad media a la hora de contraer ese primer matrimonio.

En 1980, la edad media a la que las cordobesas se estrenaban como casadas era a los 23 años y seis meses y hace una década esa edad media llegó hasta los 28 años y tres meses. En el caso de las cordobesas, la barrera de los 30 años a la hora de contraer ese primer matrimonio no se superó hasta hace un lustro, tras pasar de los 29 años y casi nueve meses de 2013 a los 30 años y dos meses de 2014.

Los datos del INE detallan asimismo que en el caso de lo que llaman la edad media al matrimonio –es decir la edad media de las parejas que se casan en Córdoba ya sea en primeras nupcias, segundas o terceras– se situaba a principios de este año en los 34,3 años, por los 34,2 de principios de 2018. En el caso de los hombres era a finales del pasado año de 35,4 años y en el caso de las mujeres, de 33,1. Hace 30 años, esa edad media al matrimonio era en Córdoba de algo más de 26 años en el caso de los hombres y de 23 años y seis meses en el caso de las mujeres. En este apartado, la barrera de los 30 años se superó en 2004 en el caso de los cordobeses y en 2011 en el caso de las cordobesas.

Esas últimas cifras del Instituto Nacional de Estadística también revelan que en la última década ha caído en Córdoba un 28% la celebración de matrimonios –en 2008 fueron 3.863, por los 2.819 de 2018– y que en la actualidad los casamientos civiles superan en porcentaje a los religiosos. También que los meses en los que menos gente se casa en Córdoba es en los de enero y febrero y que los meses que son más elegidos para ello son los de junio y septiembre. En concreto, en junio de 2018 tuvieron lugar 464 de los enlaces 2.819 enlaces que se produjeron en Córdoba en todo ese año, 76 menos de los que se celebraron el año anterior, en los que se llegó a los 2.895.

El dato más bajo de los últimos cinco años se produjo en 2013, con 2.336 casamientos. A raíz de entonces, se inició un moderado incremento en 2014 con 2.550 casos y, posteriormente, los matrimonios fueron escalando en el total anual hasta los 2.701 en 2015 o los 2.952 de 2016; muy lejos del techo que se tocó en 1989 con 5.093 bodas, el mayor registro que ha presentado Córdoba desde 1975.

Pero, por encima de todo, lo que sí deben tener claro las parejas con antelación es cómo dar el “sí, quiero”, es decir, en el altar, en el juzgado o en el registro. El pasado año, el 53% de los enlaces matrimoniales que se celebraron en Córdoba – 1.491 de los 2.819– fueron por lo civil, una modalidad que ya le ha ganado la partida al enlace eclesiástico. Y es que desde hace unos años cuando llega el momento de la unión matrimonial, los cordobeses se decantan mayoritariamente por el enlace civil, según el INE.

En 2017, de los 2.895 enlaces que se produjeron en la provincia, el 54% de las parejas –un total de 1.569– se decidieron por una ceremonia civil frente al 44% que lo hicieron por la Iglesia –1.294 casos–, una diferencia del 10% entre ambos. Ese giro se constató en 2016 con 1.528 bodas civiles sobre los 1.410 casos de boda tradicional.

Sin embargo, jurarse amor eterno ante Dios era más solicitado en 2013 con 1.265 parejas en el altar –por debajo quedaban las 1.057 civiles–, también continuó el ascenso en 2014 gracias a las 1.445 bodas católicas –frente a las 1.097 civiles–. Un año después, en 2015, de las 2.701 celebraciones maritales, en el altar se llevaron a cabo 1.369 de ellas; aunque en este punto comenzó a estrecharse el margen con las 1.318 civiles.

En esta media década, 2016 fue el año con más bodas –2.952 en total– y donde la balanza giró hacia el lado de las celebraciones nupciales bien en ayuntamientos o juzgados con 1.518 compromisos de este tipo, por encima de las 1.410 de carácter religioso.