Cuando la suerte llena de alegría a quien la reparte

Miguel Ángel Perán, vendedor de la ONCE desde hace cinco años, se despertó ayer lleno "de alegría" tras haber repartido el viernes 2,1 millones de euros en la barriada periférica de El Higuerón y en la localidad de Aguilar de la Frontera. Y es que el premio, que ha sido muy repartido, "no va a venir nada mal a las familias agraciadas en estos tiempos de crisis", apuntó este vendedor.

Ésta la segunda ocasión en la que Perán reparte un premio mayor, además de haber repartido terminaciones de tres y cuatro cifras, por lo que espera que las ventas "aumenten algo". Para este agente la actual situación de crisis está afectando incluso a los que "reparten suerte"; aún y así, aseguró que "vendrán tiempos mejores". En este sentido, Perán manifestó que "repartir premios y no quedarse con ninguno cupón del 76.483 da un poco de rabia", pero al mismo tiempo "la satisfacción de ser uno el que los da también sienta bien". Miguel Ángel Perán está casado y tiene dos hijos, por lo que aseguró que es un "hombre con suerte que reparte suerte". Ahora sólo queda esperar a que toque repartir "el tercer premio mayor" y que los agraciados disfruten.