Urbanismo aprueba tres actuaciones en el yacimiento de Medina Azahara relacionadas con el Salón Rico

Córdoba/La comisión de licencias de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) da el visto bueno en su sesión de este miércoles a tres actuaciones relacionadas con el Salón Rico a llevar a cabo en el yacimiento arqueológico de Medina Azahara, uno de los cuatro patrimonios de la humanidad que tiene Córdoba, junto con la Mezquita-Catedral, el Casco Histórico y los Patios. Estas tres actuaciones fueron solicitadas el pasado mes de julio por la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta de Andalucía.

En concreto, se trata de la modificación y restauración de los desagües de la cubierta del Salón de Abd Al-Rahman III (Salón Rico), sobre un proyecto diseñado por los técnicos Pau Soler Serratosa y Luis De Olmedo Gordillo; la consolidación y protección de pavimentos de los andenes fronteros del Salón Basilical Superior y del Salón de Abd Al-Rahman III, de la rampa del Gran Pórtico y de las Caballerizas; y la reordenación y adecuación del itinerario hacia el Salón Rico por el borde oriental de la zona excavada del yacimiento. Los responsables de estos dos últimos proyectos son Pau Soler Serratosa y Víctor Baztán Cascales. 

La aprobación de la Gerencia Municipal de Urbanismo llega después de que la Comisión Provincial de Patrimonio de la Delegación de Turismo, Cultura y Deporte de Córdoba validara el proyecto para la reordenación y adecuación del itinerario que realizan los visitantes hacia el Salón Rico por el borde oriental de la zona excavada de Medina Azahara con el objeto de mejorar la accesibilidad.

El primer tramo, que coincide con el existente en la actualidad, comprende desde el acceso y escaleras hasta la Puerta Norte, con la mejora de los pavimentos del acceso, escaleras y explanada inicial. Por su parte, el segundo tramo, de nueva ejecución, discurre desde la Puerta Norte, por el llamado Camino de los Nogales, hasta la Puerta de la Muralla, para conectar con la rampa y la explanada del Pórtico. En este tramo se ha concentrado la investigación arqueológica para conocer las cotas y estado de conservación del pavimento de dicho camino.

Esta actuación tiene como objetivo documentar la traza del cierre perimetral norte del Camino de los Nogales para realizar las actuaciones de reposición de sillares con cantería y reconstrucción de muros de mampostería de piedra caliza, que servirá como elementos de contención y delimitación espacial. Igualmente, se va a investigar sobre la Puerta de la Muralla que da acceso al Pórtico del Alcázar desde el Camino de los Nogales, para conocer las cotas y pavimentos en rampa y plataforma del Pórtico del Alcázar.

Este proyecto se justifica por el incremento continuo de la afluencia de visitantes en los últimos años a la ciudad califal, lo que se ha traducido en un desgaste progresivo de las zonas por las que transcurre el itinerario de visitas, en especial el pavimento de acceso y la explanada inicial del conjunto arqueológico hasta la Puerta Norte.

Las actuaciones contempladas en el proyecto incluyen la consolidación y recrecido de muros con mampostería de piedra caliza, obras puntuales con cantería de sillares de piedra caliza, consolidación y tratamiento de pavimentos originales, construcción de una pasarela de madera por donde discurrirá la visita pública desde la Puerta Norte hasta la Puerta de la Muralla, así como la mejora de los pavimentos en la zona de la rampa y la explanada del Pórtico del Alcázar. El tercer tramo se centra en conectar la explanada del Pórtico con el Salón Rico, con la mejora de la rampa de conexión y de los pavimentos de andenes de jardines del Salón Rico en su zona oriental. 

Un poco de historia

El Salón de Abd Al-Rahman III, también conocido como Salón Rico, por su exuberante decoración, o Salón de Embajadores, por ser el lugar de recepción de las embajadas del califa, fue el salón del trono de la ciudad palatina o áulica de Medina Azahara. Fue mandado construir por el califa omeya de Córdoba, Abd al-Rahmán III, entre los años 953 y 957, tal como atestiguan diversas basas y pilastras epigrafiadas pertenecientes a la decoración del salón. Su concepción como lugar para atender al estricto protocolo ceremonial permitía recibir a los cuerpos administrativos, embajadores y visitantes extranjeros que pedían audiencia con el califa.

El Salón de Abd al-Rahmán III es el espacio de la ciudad palatina más importante desde el punto de vista artístico y simbólico, puesto que se han conservado importantes vestigios de su decoración que permiten contemplar el arte califal en su período de máximo esplendor. Constituye, junto con la Mezquita de Córdoba, el mejor ejemplo conservado en la actualidad del denominado arte califal, que se desarrolló en la península ibérica durante el Califato de Córdoba. Además, dada su concepción, es una fuente de información muy importante para conocer cómo se desarrollaba el protocolo de recepción de los cuerpos administrativos y embajadas que acudían a la ciudad de Medina Azahara para solicitar el favor del califa.