El 10% de los vecinos de Córdoba capital viven ya en parcelaciones y barriadas periféricas

Córdoba/Córdoba capital es el municipio andaluz que cuenta con el mayor número de núcleos dispersos y diseminados, según constata el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) en el nomenclátor de 2023. En concreto, el Ayuntamiento tiene que gestionar 24 entidades singulares, 69 núcleos y 24 diseminados; en total, son 117 conjuntos poblacionales, el mayor número de toda la región para un solo municipio. Después de Córdoba capital, se sitúan Cuevas de Almanzora y Huércal-Overa, en Almería, con 103 núcleos cada localidad, y Níjar, también en Almería, con 86 núcleos.

Los 77 municipios de la provincia de Córdoba suman 349 entidades singulares, 280 núcleos y 297 diseminados. Tras la capital, por el número de conjuntos poblacionales destacan Priego de Córdoba (con 61), Iznájar (48), Palma del Río (42), Fuente Obejuna (39) y La Carlota (33).

El IECA explica que "el territorio nacional se encuentra dividido administrativamente en comunidades autónomas, provincias, municipios y otras entidades locales de ámbito territorial inferior al municipal". Desde un punto de vista estadístico, esta división resulta "insuficiente" para conocer de qué forma se asienta la población, por lo que, aunque carece de carácter oficial, apuesta por "descender a una subdivisión de los mismos".

El efecto de las parcelas

En este contexto, se define como "núcleo de población" el conjunto de al menos diez edificaciones que forman calles, plazas y otras vías urbanas. Por excepción, el número de edificaciones puede ser inferior a diez, siempre que la población que habita las mismas supere los 50 habitantes. Cuando un conjunto de viviendas de una entidad no pueden ser incluidas en el concepto de núcleo, se considera "diseminado". Como detalle, una entidad singular de población puede tener uno o varios núcleos, o incluso ninguno, si toda ella se encuentra en diseminado.

En el caso concreto de Córdoba capital, el IECA detecta 69 núcleos y 24 diseminados, el mayor número de toda Andalucía como resultado del proceso de parcelación de la tierra que se ha producido a lo largo de las décadas. En otros municipios como Fuente Obejuna o Priego de Córdoba, la dispersión poblacional se debe a la existencia de aldeas que en ocasiones tienen tanta historia como el casco urbano. Y en La Carlota, por citar otro ejemplo, refleja el proceso de colonización llevado a cabo en tiempos de Carlos III.

Según el nomenclátor, la provincia de Córdoba cuenta con un total de 773.997 habitantes, de los que 323.763 son vecinos de Córdoba capital. Llama la atención que, en la ciudad, el 10,41% de la población, hasta un total de 33.707 personas, vive en alguno de los núcleos dispersos y diseminados, mientras que 290.056 residen en los barrios en que se estructura el casco urbano consolidado (desde el Sector Sur, el Guadalquivir y el Campo de la Verdad, hasta el Brillante y la Arruzafilla, desde Fidiana, la Fuensanta y el Santuario, hasta el Zoco y el Parque Figueroa). Hace dos décadas, había 21.558 viviendo en la periferia, cifra que suponía el 6,77% del total, lo que significa que es una tendencia al alza.

Alcolea es la barriada periférica más poblada, con 6.101 residentes; les siguen Villarrubia, con 6.010; El Higuerón, con 4.531 habitantes, y la zona de Nuestra Señora de Linares, con 3.150 residentes. Además, el nomenclátor repasa, una a una, todas las parcelaciones, independientemente de su situación urbanística -es decir, de si sus promotores han empezado su proceso de regularización o son reconducibles por estar, por ejemplo, en campo inundable del Guadalquivir o en el ámbito de Medina Azahara-. De hecho, junto a la ciudad palatina, declarada Patrimonio Mundial por parte de la Unesco, residen 693 personas en parcelaciones como La Gorgoja (335 personas) y Las Pitas (195), de actualidad años atrás por la lucha emprendida desde la Fiscalía contra las viviendas sin licencia.

Solo un residente en Prágdena

Los núcleos más pequeños de todos los identificados en Córdoba capital son Prágdena y el Cortijo La Reina, con solo un residente. Según los datos del IECA, en Valchillón residen 22 personas; en Puente Viejo, 25; en Torres Cabrera, 39, y en Santa Domingo, 86, por citar otros ejemplos de caseríos de reducido tamaño.

El nomenclátor permite, por otra parte, saber cuántas personas viven en localizaciones de la Sierra, una de las ubicaciones más deseadas por sus temperaturas algo más suaves durante el verano. Así, en la entiedad singular de Nuestra Señora de Linares residen 3.150 personas, de las que 2.186 lo hacen en Doña Manuela. Mientras, en la zona conocida como Los Arenales hay censados 534 vecinos, de los que 492 son residentes de Las Jaras. En Las Ermitas, por otra parte, hay 417 vecinos. Por último, en la barriada periférica de Santa María de Trassierra, oficialmente reconocida, viven 329 personas; en los alrededores han surgido núcleos como Campo Alegre (158), La Caballera (192) o El Salado (119).