Versos bordados en el C3A de Córdoba por la erradicación de la violencia de género

25N

El tapiz ha sido elaborado por 15 mujeres que han superado una situación de maltrato, fruto del proyecto ‘Cerrando el círculo, poesía como cicatrización’ del colectivo Orilla

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Foto de familia de los participantes en las jornadas.
Foto de familia de los participantes en las jornadas. / Miguel Ángel Salas

Córdoba/Versos bordados en un tapiz de 8 por 2 metros cuelgan este lunes de una de las paredes de la Caja Negra del Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A). Palabras escogidas por 15 mujeres que han participado en el proyecto Cerrando el círculo. Poesía como cicatrización del colectivo Orilla. Se trata de una iniciativa fruto de la colaboración de todas las instituciones públicas, Junta de Andalucía, Diputación de Córdoba, Ayuntamiento de Córdoba, Subdelegación del Gobierno y Universidad de Córdoba, impulsada desde la comisión de Violencia de Género del Hospital Universitario Reina Sofía y en la que también participa el Distrito Sanitario Córdoba y Guadalquivir.

Todas estas instituciones constituyen la mesa técnica que viene trabajando desde marzo en este proyecto, que se ha completado con el desarrollo de unas jornadas técnicas. Así, además de la inauguración del tapiz, se ha desarrollado una jornada estructurada en tres mesas para analizar los recursos existentes dirigidos a mujeres en situación de maltrato y sus familias, tanto por parte de la administración pública como de las asociaciones y colectivos. Además, se ha dedicado un espacio al análisis de proyectos culturales, de diferentes disciplinas artísticas que han trabajado la violencia de género.

El delegado de Gobierno de la Junta de Andalucía en Córdoba, Adolfo Molina, ha participado en la inauguración del encuentro destacando la grandeza de esta iniciativa cuyo éxito se basa en el trabajo en equipo. “Quiero destacar la voluntad política de todas las instituciones que integran la mesa técnica por avanzar en la consecución de un objetivo tan importante como la erradicación de la violencia de género”. Asimismo, ha explicado que las jornadas, que reúnen a 240 personas de instituciones, colectivos y asociaciones, servirán para exponer y detallar los recursos y servicios que existen en la provincia dirigidos a las mujeres en situación de maltrato y a sus familias y cómo se coordinan: “Nuestro objetivo es hacer un mapa de recursos que se materialice en una guía de consulta para que las mujeres puedan conocer las opciones y oportunidades que tienen a su alcance”.

El gerente del Hospital Reina Sofía, Francisco Triviño, ha destacado la importancia de que esta actividad se desarrolle en un espacio cultural referente en Andalucía “porque nos permite, por un lado, hablar de violencia de género sacándola del ámbito socio sanitario. De manera que, este año, hemos intentado sacar a las mujeres del círculo de la violencia y ponerlas como ejemplo para otras, no como víctimas. Sabemos y creemos que la cultura es herramienta transformadora, así lo hemos comprobado en el hospital en muchas ocasiones y ahora, lo hacemos con la violencia de género, con este encuentro”.

La directora del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) en Córdoba, Rosario Alarcón, ha explicado cómo se gestó el proyecto y cómo se ha ido trabajando con las asociaciones y trabajadores del IAM para seleccionar a un grupo de mujeres que ya hayan superado la situación de maltrato y que fuera también representativo de los diferentes tipos de violencia machista que existen.

'Cerrando el círculo. Poesía como cicatrización'

El colectivo Orilla, compuesto por Isadora Donier, Javier Garrido y María Jesús Garcés, presentó en marzo el proyecto artístico a la Comisión de Violencia de Género del hospital. A partir de ese momento, comenzó un largo trabajo hasta este lunes para hacerlo realidad. Según ha explicado María Jesús Garcés, esta iniciativa “surge como respuesta a la necesidad de ofrecer un espacio seguro, inspirador y tranquilizador para mujeres que han sufrido violencia de género. Reconocemos que estas mujeres enfrentan heridas emocionales profundas que requieren atención y cuidado. Por ello, buscamos utilizar la poesía y el arte del bordado como herramientas para sanar estas heridas y transformar el dolor en empoderamiento”.

Inspirado en la filosofía del kintsugi como guía del proceso creativo, han utilizado el bordado con hilo negro y dorado en las telas para representar la cicatrización emocional de las participantes, destacando la belleza y el valor que reside en las cicatrices emocionales. En esta línea, Isadora Donier señala que “así no se tratará de ocultar las heridas pasadas, todo lo contrario, animamos a las participantes a abrazar sus experiencias y encontrarse en su proceso de sanación. Al coser, estaremos uniendo con hilo los fragmentos de sus historias rotas y transformándolos en algo nuevo y hermoso. Cada puntada será un acto de resiliencia y crecimiento personal. Queremos que integren sus historias en las narraciones de sus vidas en el momento actual”.

En el taller, según ha explicado Javier Garrido, “hemos guiado a las participantes a través de ejercicios de escritura poética inspirados en la secuencia del número pi. 3,141592653589793… Este número, que representa la constante de la circunferencia, se convierte en metáfora de salir del círculo del dolor y la invisibilidad y entrar en el círculo de la palabra, la visibilidad y el vínculo entre mujeres”. Javier ha explicado cómo cada número de la secuencia de pi corresponderá a una palabra con el mismo número de letras, que formará parte de un poema colectivo.

Mujeres participantes en el proyecto, durante la inauguración del encuentro.
Mujeres participantes en el proyecto, durante la inauguración del encuentro. / Miguel Ángel Salas

Por último, Graziela, una de las mujeres participantes, ha realizado una valoración destacando “la grandeza de esta iniciativa, que nos ha permitido reunirnos todas las semanas, dedicar un espacio a la creación, al pensamiento y a tejer una red entre nosotras. Ha sido maravilloso y en mi caso concreto me ha ayudado en este momento personal de inicio de nueva etapa a tomar impulso y, sobre todo, a confiar en mí misma y darme tiempo y valor”.

El proyecto se ha llevado a cabo en seis sesiones, en el C3A, cada una con una duración de tres horas. Todo este proceso, así como una batería de entrevistas a algunas de las participantes, han sido grabados por Richard Horn. El documento audiovisual, centrado en la esperanza y fuerza de los nuevos comienzos, ha sido también proyectado en la Caja Negra.

Las participantes en el taller han sido 15 mujeres usuarias de diferentes asociaciones y del IAM, cuyo trabajo ha dado como resultado final un tapiz de 2x8 metros que estará expuesto un par de días en el C3A y luego irá exponiéndose a lo largo del año por las sedes de las instituciones participantes que lo soliciten. Las asociaciones que han ayudado a hacer posible este proyecto son Cruz Roja, Iemakaie, Cruz Blanca, Mujeres en Zona de Conflicto, EMET, kamira, Fundación Don Bosco, Plataforma contra la Violencia de Género, forum, Fundación Mujeres, Hombres 5 Igualitarios, Todes Transformando, APIC, Fundación Hogar Renacer, Accem, Yerbabuena.

Jornadas técnicas

Las jornadas técnicas se han estructurado en tres mesas redondas. La primera de ellas, centrada en la red de recursos de la iniciativa pública y moderada por la directora médica del hospital, Elena García, ha contado con la participación de la delegada de Igualdad de la Diputación de Córdoba, Auxiliadora Moreno, las Delegada de Salud y Consumo; de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad; y de Justicia, María Jesús Botella, Dolores Sánchez y Raquel López, la vicerrectora de Igualdad de la Universidad de Córdoba, Sara Pinzi, la Jefa de la Unidad de Violencia sobre la Mujer de la Subdelegación del Gobierno en Córdoba, Teresa Varón, y la inspectora de la Policía Local encargada de los casos de Violencia sobre la Mujer, Vicenta Rodríguez.

La segunda mesa ha dado paso al trabajo complementario que se desarrolla por parte de las asociaciones y colectivos. La enfermera y la trabajadora social del hospital, Carmen Jurado y Marisol García, han moderado este debate en el que tres asociaciones han hablado en nombre de las restantes exponiendo así todos los servicios y recursos que ofrecen a las mujeres y sus familias.

Por último, en la mesa tres, Cultura como herramienta transformadora, la periodista y directora de comunicación de la Diputación de Córdoba, Anabel Calero, ha moderado este espacio en el que se han expuesto los trabajos de la pintora y fundadora del colectivo multidisciplinar artístico Algazara, Almudena Castillejo. También ha estado Lasyra, música y vocalista del grupo Dreadsistance. La directora de la Escuela Superior de Arte Dramático y la coordinadora de igualdad, Raquel Jurado y Mariló Puerta, han hablado de cómo trabajan la violencia de género a través de la interpretación y danza con su alumnado y, por último, Isadora Donier y María Jesús Garcés, del colectivo Orilla, han contado a las personas asistentes el proyecto Cerrando el círculo. Poesía como cicatrización.

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