La vuelta al cole en Córdoba: "Todos tienen nervios"

Las aulas abren las puertas a los escolares de los ciclos de Infantil, Primaria y Educación Especial este lunes 11 de septiembre, aunque los centros educativos de Córdoba llevan en funcionamiento desde el pasado 1 de septiembre. Esa jornada es la que abre el calendario oficial del curso escolar 2023-2024 y es el día en el que el profesorado regresa a su puestos de trabajo después de las vacaciones de verano.

Durante todos estos pasados días, los centros educativos se han afanado en organizar, limpiar, ordenar y poner a punto cada espacio para dar una gran bienvenida a su alumnado. Junto a estas tareas de puesta a punto, el profesorado también ha celebrado los primeros claustros y han analizado los retos que tienen por delante durante los próximos nueve meses.

El colegio Noreña de la capital, en el barrio del mismo nombre, también abrió sus puertas hace más de diez días con la misma intención: ponerse a punto para el curso escolar 2023-2024. Su director es Iñaki Blanco y reconoce que este trabajo de carácter previo es vital. Son días, detalla, de "preparación, para organizar y repartir los horarios, las clases, los planes a elegir...".

En esta línea, señala que son días de "mucho trabajo porque también implica revisar las instrucciones nuevas, ponernos al día y, en el caso de este curso, adaptarnos a la Lomloe". También admite que durante las vacaciones "hemos cargado pilas, pero lo malo es que las pilas se descargan pronto porque hay mucho trabajo".

En este centro educativo, que este ejercicio escolar contará con más de 450 alumnos de Educación Infantil hasta Primaria y dispone también de un aula específica, la plantilla docente está integrada por más de una treintena de profesores.

No obstante, Blanco también confiesa que en este lunes de apertura para los escolares siempre hay "nervios" porque han pasado dos meses desde que se cerraron las aulas y hay también alumnos nuevos. Es decir, que a fin de cuentas "todos tienen nervios en un día muy importante".

Eso sí, subraya que en la primera jornada del curso escolar se lleva a cabo "un horario escalonado para dar una atención adecuada al alumnado". Es más, ese primer día de clase se dedica a las presentaciones de las asignaturas y "conocerse". Por eso, es al día siguiente -en este caso, el martes-, cuando "arranca el horario definitivo".

Lourdes Gordillo es maestra de inglés de los ciclos de Educación Infantil y Primaria en el colegio Montealto, en la aldea del mismo nombre de La Carlota. Este es su segundo curso consecutivo dando clases en el mismo centro y asegura que todos los nervios que se pasan antes de que se abran las puertas este lunes "merecen la pena, porque si eres docente con vocación, es emocionante".

En su caso, las vacaciones acabaron también el 1 de septiembre y desde entonces "tienes que preparar muchas cosas para el resto del curso". No obstante, añade que "llega el día y, a veces no tienes todo preparado, es imposible porque son pocos días de inicio de curso y hay muchas reuniones".

Muchas reuniones, claustros, preparación de clases y "papeleo" son algunas de las tareas que ha estado llevando a cabo desde que se incorporó a su puesto docente para tenerlo a punto este lunes. Una jornada, detalla, en la que "el alumnado entra un poco más tarde y es una toma de contacto, pero al día siguiente es el horario normal para todo el mundo". "Normalmente los recibe el tutor y explica las asignaturas que tienen, también se hace algún juego para que estén bien, y material; es una toma de contacto", describe.

Gordillo no tiene reparos en asegurar que este primer día de clases con los alumnos tiene mucha emoción, sobre todo, al conocer a los nuevos integrantes de las aulas.