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Broncano
Córdoba CF
Aunque los focos apuntaron a Carlos Albarrán por su providencial gol, la victoria del Córdoba CF en El Toralín en el inicio del play off de ascenso a Segunda División tuvo otro protagonista fundamental que fue Carlos Marín. El arquero blanquiverde sumó una portería a cero más para sustentar el triunfo de su equipo en Ponferrada y estira ya sus cifras hasta los 19 partidos sin haber encajado gol, más de la mitad de los 37 duelos que acumula ya en la presente temporada.
Y es que, aunque la Ponferradina no fue un rival muy llegador ante el Córdoba CF, Marín supo solventar con acierto el poco trabajo aunque determinante trabajo que tuvo en El Toralín. El almeriense se mostró enchufado desde los primeros compases, sin dudar a la hora de hacerse fuerte en su área en los balones laterales y mostrando una seguridad que dio alas a su equipo para asegurar la primera victoria en las eliminatorias por el ascenso.
No es de extrañar, por tanto, que Marín abandonase El Toralín con cara de satisfacción y un mensaje optimista, siempre dentro de la prudencia, de cara a acceder a las eliminatorias por el ascenso. "La verdad es que estoy muy contento con el desempeño, no solo en lo personal, también con el colectivo. El equipo ha sabido competir ante un rival complicado, que sabíamos que iba a tener sus opciones y las supimos neutralizar, supimos sufrir y conseguimos un buen resultado aquí", apuntó el portero en la zona mixta de El Toralín.
Con la eliminatoria decantada ahora de manera clara para el lado del Córdoba CF, Marín prefirió optar por la prudencia como arma para afrontar el partido de vuelta. "En esta categoría no hay favoritos. La Ponferradina es un rival complicado, al igual que nosotros. Tenemos que usar nuestras armas. Hemos dado el primer paso y en nuestro campo, donde somos muy fuertes, trataremos de dar el segundo", apuntó.
Y es que, a pesar del triunfo sólido de los suyos ante la Ponferradina, el arquero del conjunto blanquiverde asumió que la diferencia entre ambos equipos no había sido tanta. "Es un partido de detalles, nos jugamos mucho y todos se dejan el máximo. Los detalles marcan la diferencia. Tuvimos fortuna de que ellos no materializaron sus ocasiones y nosotros la que tuvimos, la metimos", resumió Marín.
Lo que no es fortuna, a estas alturas del curso, es la seguridad que está mostrando el portero del conjunto cordobesista. Marín ha sido pieza clave para Iván Ania, que le entregó las llaves de una portería que solo dejó de defender en San Fernando, por haber sido expulsado anteriormente en Murcia, y en la última jornada ante el Algeciras, cuando el segundo puesto ya estaba rematado. En Ponferrada sumó su partido 37 en el presente ejercicio y logró dejar la portería imbatida por decimonovena ocasión. Unas cifras al alcance de muy pocos porteros.
Ahora, pese a la prudencia mostrada, Carlos Marín sabe que su equipo tiene el pase bien encarrilado y se mostró seguro de que en El Arcángel se rematará el trabajo: "El Córdoba CF siempre busca atacar e ir a ganar los partidos. El 0-1 es un gran resultado y en casa intentaremos cerrar la eliminatoria".
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