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Mientras Juan Sabas y sus hombres trabajan en el stage de Torrox, la dirección deportiva del Córdoba CF ha cogido velocidad de crucero en la confección de la plantilla, a la que pronto se sumarán dos nuevos efectivos: Bernardo Cruz y Mario Ortiz. El defensa central y el mediocentro cántabro pasarán el reconocimiento médico este viernes y se espera que su incorporación a los entrenamientos se produzca el próximo lunes, día en el que los blanquiverdes regresarán al trabajo en la Ciudad Deportiva, después de una semana en tierras malagueñas.
El fichaje de Bernardo Cruz, cocido a fuego lento durante las últimas semanas, quedó totalmente desbloqueado con la desvinculación del central cordobés del Granada. El club nazarí hizo oficial este miércoles ese acuerdo para dejar sin efecto el año de contrato que unía a ambas partes y así el menor de los hermanos Cruz ya tiene vía libre para unirse al Córdoba, con el que alcanzó un acuerdo total hace cerca de una semana.
La llegada de Bernardo deja la línea defensiva cerrada, actualmente con ocho futbolistas pero con la previsible salida de Iván Robles. El lateral derecho onubense está llamado a dejar una ficha libre para mayores de 23 años, por lo que el costado diestro de la zaga será el único puesto que no esté totalmente doblado en la plantilla. El joven Álex Robles partirá con ventaja para jugar muchos minutos en ese lateral derecho, si bien la dirección deportiva blanquiverde cuenta también con Farrando y Sidoel como alternativas para ocupar ese puesto en momentos puntuales.
Y si la defensa está ya cerrada, la medular del equipo parece también completa con la llegada de Mario Ortiz. El centrocampista cántabro tiene prevista su llegada a Córdoba este jueves, y se espera que pase las pruebas médicas junto a Bernardo en la mañana del viernes, según confirmaron fuentes de la entidad blanquiverde.
De esta forma, si ambos jugadores pasan sin problemas las pruebas de coronavirus, el lunes podrían estar ya sobre el césped de la Ciudad Deportiva para unirse al grupo a las órdenes de Juan Sabas.
Con las fichas de mayores de 23 años ya cubiertas, incluso con una más de las 16 permitidas mientras Iván Robles se mantenga en plantilla, el Córdoba mira ya al ataque para culminar su plantel. La dirección deportiva del club trabaja en la llegada de Diabate, que como viene informando el Día es el hombre elegido para competir en la punta de ataque con Willy y Piovaccari.
La llegada del delantero costamarfileño está bastante encaminada, aunque pendiente de la forma en que se producirá, bien mediante una cesión del Mallorca o en propiedad si el jugador rescinde con los bermellones. Cuando se concrete su fichaje, el CCF tendrá solo una ficha disponible, para un jugador sub 23, que se espera que sea utilizada para reforzar la posición de extremo izquierdo o mediapunta.
A partir de ahí, la plantilla se daría por cerrada, aunque el club tiene intención de mantenerse muy atento al mercado por si surge alguna buena oportunidad de dar un salto de calidad antes de que comience el curso. En ese caso, el Córdoba valoraría alguna salida extra para hacer un último hueco en el plantel.
Con buena parte del trabajo ya hecho, Valenzuela y Juanito ya piensan en rematar de la mejor forma posible la plantilla que debe luchar por el ascenso a Segunda División.
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