Camino de un récord fuera de casa

Tradicionalmente, el Córdoba ha sido un equipo con muchos problemas para rendir lejos de casa, si bien ha sido precisamente de visitante como ha celebrado de forma mayoritaria sus logros. Pero lo de esta temporada va camino de récord, y para mal. De momento, el conjunto blanquiverde cerrará la primera vuelta de LaLiga 1|2|3 con un paupérrimo 3 de 30, un guarismo que se sitúa como el peor promedio de puntos de toda la historia del club en la categoría de plata. De hecho, sólo en otras cinco campañas alcanzó el décimo desplazamiento sin conocer el triunfo, algo que el equipo de Curro Torres igualó el pasado domingo tras perder en Tarragona ante el Nàstic (1-0).

En estos momentos, el CCF está en la misma situación que en el curso 02-03, aunque cuenta con dos puntos menos en su casillero de visitante. Porque aquel equipo, que ya había optado también por un relevo en el banquillo –la salida de Iosu Ortuondo fue suplida por Fernando Zambrano–, contabilizó cinco empates y cinco derrotas en sus primeros diez viajes, por los tres (Gijón, Zaragoza y Reus) que han conseguido los blanquiverdes en estos primeros cuatro meses y medio de liga.

Estos datos ya dejan al Córdoba actual como el peor de visitante de lo que va de siglo XXI. Y para no serlo todavía más, no queda otra que ganar el próximo sábado 19 al Numancia (Los Pajaritos, 18:00), un rival que se le suele atragantar, pues en aquel ejercicio la primera alegría completa a domicilio se produjo en la salida 11 (1-3 en Almería).

Pero, ¿es este CCF el peor de su historia lejos de casa? A estas alturas del campeonato, sí. Porque las otras cuatro temporadas históricas de plata en las que el cuadro cordobesista no ganó ninguno de sus primeros diez partidos fuera de El Arcángel son todas anteriores al verano de 1995 en el que entró en vigor la liga de tres puntos. Un sistema de competición, todavía vigente, que redujo el valor de los empates (pasaron de ser la mitad del botín a un tercio), dejando en peor lugar aún los números vigentes.

Según los datos aportados por Álvaro Vega (@laligaennumeros) el primer precedente de un inicio tan pobre de visitante fue el curso 58-59. Aquel año, en una liga formada por 16 equipos, el Córdoba terminó sin triunfos fuera, si bien tras sus diez primeros viajes sumaba también 3 puntos de los 20 puestos en juego (ahí está la diferencia, que no es poca, con el balance numérico actual).

Luego hay que trasladarse a un par de cursos nefastos, de 1976 a 1978, en los que los blanquiverdes volvieron a acabar con un cero en el casillero de éxitos a domicilio, tras 38 oportunidades ni más ni menos. En el primer ejercicio, su puntuación al paso por la décima salida era de nuevo calcada a la actual (3), mientras que meses más tarde se redujo a apenas 2, en lo que supone la marca más baja a estas alturas de torneo en las 33 campañas que la entidad suma en la división de plata.

Precedentes poco halagüeños

Pero todavía hay un precedente más, el de la liga 82-83, que el CCF terminó como colista y perdiendo la categoría pese a romper en el último viaje una serie de 18 salidas sin ganar. Pero al paso por la número diez, los cordobesistas contaban con 4 puntos, uno más que ahora. Y es que por mucho que uno se detenga a mirar en el pasado, la situación de este equipo fuera de casa es para hacérselo mirar, más allá de que los números son ridículos.

Porque ante el Nàstic, el equipo de Curro Torres volvió a ofrecer su peor versión lejos de casa y, como no puede ser de otra manera, cosechó una nueva derrota, que es la séptima a domicilio en diez desplazamientos. Sólo ante el Sporting, el Zaragoza y el Reus sumaron los blanquiverdes, que ya saben que terminarán la primera vuelta en zona de descenso, el mismo lugar que ocupan desde la segunda jornada liguera, pase lo que pase el domingo frente al Rayo Majadahonda (El Arcángel, 12:00). Porque la permanencia vuelve a estar fuera de distancia, y esa es la peor noticia que puede dejar una jornada negra.