El Córdoba CF en 2023: cinco retos para otro año ilusionante

Córdoba CF

En lo deportivo, el club buscará el ascenso a Segunda División y la consolidación de un bloque ganador

El nuevo año debe ser importante en la cesión de El Arcángel y la mejora de la Ciudad Deportiva

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Los jugadores del Córdoba CF celebran un triunfo en El Arcángel.
Los jugadores del Córdoba CF celebran un triunfo en El Arcángel. / Miguel Ángel Salas

El Córdoba CF parte en 2023 desde una posición privilegiada para que los próximos 12 meses sirvan al club como lanzadera definitiva hacia su salto y consolidación hacia el fútbol profesional. En el plano deportivo, el conjunto blanquiverde camina con paso firme en Primera Federación y luchará por el salto de categoría directo teniendo como obligación disputar, al menos, las eliminatorias por el ascenso. Ese es el gran reto que se les presenta a los hombres entrenados por Germán Crespo en este año recién estrenado. Del lado institucional, el club también tiene objetivos trascendentales por delante, con la anhelada cesión de El Arcángel como meta prioritaria.

Además, culminar ciertas mejoras en la Ciudad Deportiva actual y avanzar el proyecto de la futura, además de consolidar el crecimiento de la cantera con la recuperación de las categorías perdidas son otros de los bonitos retos que se le presentan al Córdoba CF en un 2023 que puede ser clave para afianzar el proyecto de Infinity y entrar en una nueva dimensión.

Por delante, la entidad blanquiverde tiene 365 días para pelear por sus objetivos y seguir la línea ascendente de los últimos tiempos. Estos son algunos de sus desafíos para otro año ilusionante en El Arcángel:

Renovaciones clave en el plantel

Enero será para el Córdoba un mes clave en el aspecto deportivo. Además de la posibilidad de reforzar el equipo en busca de apuntalar esa privilegiada primera posición, la dirección deportiva tendrá que empezar a valorar el futuro, con media plantilla siendo ya libre para negociar con otros clubes, además de contar con dos cedidos que retornarán a sus equipos de origen y con dos futbolistas clave, Calderón y Gudelj, que pueden quedar atados en base a las cláusulas de su contrato.

Si el Córdoba asciende a Segunda, Gudelj renovará un año más, mientras que a Calderón le faltan solo dos partidos más para alcanzar los 20 que están fijados en su contrato como el número a jugar para extender el vínculo un año más. Con esos casos encaminados, la renovación de Carlos Puga es una de las más complejas, pues desde el año pasado existe un tira y afloja entre el club y el agente del jugador para sellar esa continuidad.

En sus últimas declaraciones públicas, Puga ha dejado caer un cambio de actitud notable y ahora se muestra abierto a seguir en El Arcángel el máximo tiempo posible, pero para ellos ambas partes tendrán que limar rencillas y alcanzar un acuerdo que puede servir de consolidación a un buen proyecto de futbolista, pero que todavía tiene mucho que demostrar.

Carlos Puga, en un partido del Córdoba CF en El Arcángel.
Carlos Puga, en un partido del Córdoba CF en El Arcángel. / Miguel Ángel Salas

Otras renovaciones importantes incluyen a los veteranos del grupo, con Willy Ledesma, Miguel de las Cuevas y Javi Flores como máximos exponentes. Jugadores fundamentales para Germán Crespo, su rendimiento marcará su futuro, aunque cuanto más cerca esté el ascenso, más cerca estarán ellos de seguir vistiendo la camiseta blanquiverde.

El ascenso a Segunda División

Más allá de cómo quede la plantilla a futuro, el reto más importante y apasionante que tiene el Córdoba en estos próximos meses por delante es el de intentar confirmar su ascenso a la Segunda División. Los blanquiverdes han sido el mejor equipo del Grupo I después de 17 jornadas, por más que en las dos últimas dilapidaran una cómoda renta sobre sus perseguidores.

Ahora, tras el parón navideño, les tocará a los hombres de Germán Crespo demostrar que esos tropiezos fueron un accidente y que están dispuestos a volver al camino de las victorias de manera inmediata. El calendario ofrece una oportunidad para cerrar la primera vuelta sumando, pues los dos siguientes partidos son ante equipos de la zona baja como el San Fernando y la Balona.

Ese deseado salto de categoría haría entrar en una nueva dimensión al proyecto blanquiverde, pues supondría la consecución de la primera gran meta de Infinity: la vuelta al fútbol profesional. A partir de ahí, tocaría consolidarse pensando en un futuro más arriba, pero con la tranquilidad de saberse ya dentro de LaLiga, con lo que ello supone en materia económica para los clubes.

La cesión de El Arcángel

Dejando de lado el apartado deportivo, el gran objetivo del Córdoba CF en 2023 es cerrar por fin la cesión de El Arcángel por parte del Ayuntamiento. Después de años detrás del proceso de adjudicación, el Consistorio está ultimando un pliego que en los próximos meses debe ordenar el proceso y que incluiría ya los usos comerciales de la instalación.

Si por fin se consigue solventar este eterno trámite de manera satisfactoria, El Arcángel pasará de ser uno de los focos de gasto más importantes para la entidad a su principal activo. Además, si el equipo consigue el salto de categoría, las mejoras en el estadio se verán de manera inmediata, pues LaLiga exige ciertos cánones a los que habría que adaptarse.

El Arcángel, antes de un partido del Córdoba CF.
El Arcángel, antes de un partido del Córdoba CF. / Juan Ayala

Quedaría por ver la manera en la que Infinity plantearía la inversión necesaria y los plazos para concluir el proyecto original de El Arcángel, pero esa cesión sería un primer paso por fin sólido para ese anhelo de la ciudad de ver el estadio terminado, más de 30 años después de su inauguración.

Mejoras en la Ciudad Deportiva

Otra infraestructura clave para el Córdoba CF que en este 2023 debe dar un salto de calidad importante es la Ciudad Deportiva. El club pretende tener en febrero ya disponible un nuevo campo de fútbol 7 y trabaja también en la adecuación de los vestuarios.

Además, si la Gerencia Municipal de Urbanismo da luz verde a la regularización de los terrenos propiedad de Tremón, el Córdoba podría empezar a dar uso al campo principal y a su grada para la disputa de los partidos de su filial y del primer equipo femenino. Una demanda histórica de los aficionados que supondría un paso adelante importante.

De manera paralela, aunque seguramente más a largo plazo, el club tratará de dar pasos adelante hacia la construcción de una Ciudad Deportiva propia. Esa es una aspiración de Infinity para dotar al club de más patrimonio propio, si bien el proyecto plantea la dificultad de los terrenos donde ubicarla y el coste de la misma. En todo caso, el club no abandona esa vía y está convencido de que existen alternativas para culminar en unos años esa infraestructura.

Avances en la cantera

Por último, aunque no menos importante, 2023 debe ser un año clave para la cantera blanquiverde. Después del paso atrás notorio que supuso el año pasado perder la categoría en División de Honor Juvenil, el Córdoba va en buen camino para recuperar ese sitio preferente del que nunca debió salir.

Además, el Córdoba B lidera el Grupo X de Tercera RFEF y peleará hasta el final por un hueco en la Segunda RFEF, lo que ayudaría a captar más y mejores talentos para el club blanquiverde y acortaría las distancias entre el primer equipo y el filial.

Los jugadores del Córdoba B celebran un gol en El Arcángel.
Los jugadores del Córdoba B celebran un gol en El Arcángel. / Juan Ayala

Otros retos con la base pasan por mejorar la captación del talento provincial y estrechar lazos, como el club viene haciendo, con todos los conjuntos cordobeses, para frenar en la medida de lo posible la diáspora de futbolistas cordobeses que en los últimos años alcanzan la élite sin haber vestido la blanquiverde.

Si el Córdoba es capaz de afinar en esos cinco objetivos clave, el 2023 puede terminar siendo un año memorable para la entidad y su amplia masa social.

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