Una semana frenética

Pasan las horas, los días y la operación de venta de Sergi Guardiola y Álvaro Aguado al Valladolid sigue sin concretarse. El Córdoba, en la figura de Jesús León, se afana en culminar la operación para poder así desbloquear la situación de tensa espera que vive la entidad blanquiverde en el mercado invernal. Pero no está siendo nada fácil. Los detalles finales, que la semana pasada quedaron aparcados para principios de la presente, están alargando sobremanera una operación sobre la que ya existía un acuerdo cerrado a tres bandas, entre el Córdoba, el Valladolid y el Getafe, que tiene a Guardiola a préstamo hasta el 30 de junio.

Sin embargo, diversos medios de comunicación de Madrid informaron ayer que la intención del Getafe es apurar al máximo los plazos para dar su aprobación a la salida de Guardiola. Principalmente, porque el cuadro azulón no ha cerrado aún un refuerzo más para la zona de ataque. Ni siquiera está claro que acabe por hacerlo, pero ante cualquier tesitura, la entidad que preside Ángel Torres está dispuesta a exprimir al máximo el contrato de cesión de Guardiola. Todo ello a pesar de que en la venta del Córdoba al Valladolid, los getafenses se embolsarán una jugosa cantidad de dinero en forma de compensación para romper la cesión.

Por otro lado, en el Getafe no hay prisa alguna por que Guardiola vista de blanquivioleta, pues se considera al equipo pucelano un rival directo en la lucha por la permanencia, por más que el cuadro azulón esté ahora mismo mirando más hacia los puestos europeos que hacia la zona baja de la tabla.

Esa posición de fuerza por parte del Getafe está llevando incluso a que en el Valladolid surja cierta inquietud. Ayer fue el director deportivo del equipo blanquivioleta –Miguel Ángel Gómez– el que, en una entrevista en la Cadena Ser, reconoció que "es una operación complicada a tres bandas, nosotros tenemos un acuerdo con el Córdoba y ahora el Córdoba tiene que resolver la situación con el Getafe", aunque mantienen "la esperanza de que también se mire por el chaval y se tenga un poco de consideración".

Gómez, por cierto, reconoció que el acuerdo incluye la llegada de Álvaro Aguado, del que señaló que "para mí es el mejor medio ofensivo de Segunda", aunque aclaró que "solo vendría ahora si se produjesen bajas notables en la media, si no, para el año que viene", pues entiende que el jugador necesita "continuidad y a mitad de temporada sería complicado".

Al menos cuatro fichajes

Pese al retraso en la oficialidad de la operación –que el Córdoba tenía prevista anunciar a primeros de esta semana tras centrarse el fin de semana en el partido de Soria–, en el club blanquiverde se confía en poder culminarla cuanto antes y poder entonces acudir al mercado de fichajes. El club cordobesista necesita al menos cuatro fichajes, aunque a buen seguro acabarán siendo algunos más, sobre todo porque el capítulo de bajas no está cerrado tras las de Bambock y Jovanovic, más la cantada de Aythami, que acabará recalando de vuelta en Las Palmas.

La intención de Jesús León y de la dirección deportiva que encabeza Rafa Berges es conseguir alguna salida más, para así hacer hueco a la hasta media docena de incorporaciones que podrían terminar por llegar al conjunto de El Arcángel. Una de ellas, al margen de la ya cerrada de Carrillo, será la de Josema, que hace dos semanas que entrena a las órdenes de Curro Torres, con la esperanza de poder ser inscrito cuanto antes y ayudar al equipo en esta segunda vuelta.

Sin embargo, esa reestructuración de la plantilla del Córdoba está demorándose más de lo esperado en un principio. Un retraso que obligará a la dirección deportiva del club blanquiverde a trabajar a destajo en esta última semana del mercado invernal, pues los refuerzos llegarán prácticamente en todas las líneas. Y es que una vez más, el Córdoba se dirige hacia un final de mercado frenético.