Roberto Fernández, el talento 'fugado' del Córdoba CF que lidera al Málaga

Córdoba CF

El atacante de Puente Genil, a sus 21 años, es el máximo goleador de los malaguistas con 14 dianas

El cordobés, que se marchó en edad cadete, es otro ejemplo del potencial que se le escapa al CCF

Las peñas del Córdoba CF animan a llenar El Arcángel de blanco y verde ante el Málaga

Roberto Fernández celebra un gol con el Málaga CF en el presente curso.
Roberto Fernández celebra un gol con el Málaga CF en el presente curso. / Carlos Guerrero

El Córdoba CF se encontrará este domingo con un joven delantero que está sosteniendo a todo un histórico como el Málaga con sus goles y que tiene ADN cordobés y blanquiverde. Se trata de Roberto Fernández, el ariete de referencia del club malaguista, que es otro ejemplo de todo ese talento de la provincia que la entidad cordobesista no ha sabido canalizar desde hace décadas, para comprobar después como los jóvenes de la tierra terminan triunfando lejos de El Arcángel.

Roberto, con tan solo 21 años, se ha erigido como el máximo referente de un Málaga que cuenta con otros atacantes de mucha trayectoria y experiencia como Dioni o David Ferreiro. Sin embargo, es el de Puente Genil el que está tirando del carro con sus 14 goles en el equipo de Sergio Pellicer, hasta el punto de doblar en dianas a Dioni, el segundo máximo anotador de los blanquiazules y gran apuesta en el pasado verano de un equipo obligado por su situación económica y por su historia a volver rápidamente al fútbol profesional.

Aunque su irrupción en el Málaga le ha hecho de sobra conocido y ha sacado a la luz sus raíces en Puente Genil, es menos conocido que Roberto Fernández pasó durante varios años por la cantera del Córdoba CF, a la que llegó tras despuntar como alevín en el Salerm Puente Genil. De blanquiverde creció hasta los 15 años y en la temporada 2017-18 vivió sus últimos meses como futbolista del CCF antes de firmar por el Málaga.

Fruto de esa errática política de cantera -o de la ausencia de ésta- que el Córdoba CF ha desplegado desde hace décadas, Roberto Fernández es un claro ejemplo de ese talento de la casa que el club blanquiverde no es capaz de retener y que termina explotando lejos de El Arcángel.

En su caso, pronto se adivinó que dejar marchar el joven atacante iba a ser un error considerable por parte del club blanquiverde. Y es que en el Málaga, en su primer año como juvenil, el pontanés ya marcó diez goles en la Liga Nacional. Tras jugar posteriormente en el San Félix, club de la órbita del Málaga, su explosión definitiva llegó en el curso 2020-21, en el que regresó a la entidad de Martiricos para hacer 18 goles en la exigente División de Honor Juvenil.

Gran irrupción en el Málaga

A partir de entonces, y con solo 18 años, Roberto empezó a estar ya en boca de todos los ojeadores del fútbol nacional. Su progresión siguió siendo fulgurante hasta el punto de disputar 34 partidos en Segunda División en la temporada 2021-22, mostrándose como un activo de presente y futuro en el Málaga.

La temporada pasada, el club malaguista optó por ceder al jugador al filial del Barcelona, con la idea de que se curtiese en una categoría compleja como la Primera Federación, en la que dejó su sello con siete goles y grandes actuaciones, siendo un fijo en los planes del filial azulgrana.

Con ese cartel de hombre conocedor de la categoría de bronce regresó al Málaga el pasado verano tras el descenso de los blanquiazules, pero ya con la idea de ser un jugador de peso, dejando de lado su etiqueta de joven promesa. Y así lo ha confirmado con su rendimiento. Roberto ha sido titular en 29 de los 33 partidos del Málaga y con 14 goles pelea de manera denodada por el título de máximo goleador de la categoría.

Este domingo, Roberto Fernández volverá a cruzarse con el Córdoba CF, un club que abandonó en edad cadete para hacer crecer su talento en el Málaga, equipo del que ahora es un auténtico referente. Mientras tanto, el Córdoba sigue sin ser capaz de hacer que jóvenes de su provincia escalen hasta el primer equipo para consolidarse, hasta el punto de plagar su filial de jugadores de otras canteras. Evitar la fuga de talentos del nivel del pontanés sería un buen punto de partida para que esa idea -más bien un eslogan que una realidad palpable- de basar el futuro del club en el desarrollo de las categorías inferiores empiece a tomar forma.

stats