Las dos últimas visitas afean la estadística
Córdoba CF
Sendos 0-1 son los únicos triunfos de Osasuna ante un Córdoba que ganó seis partidos e igualó dos
Una decena de partidos, entre Primera, Segunda y Copa del Rey, adornan el balance histórico de los Córdoba CF-CA Osasuna, que tienen un claro color blanquiverde a pesar de lo ocurrido en las dos últimas visitas. Porque en ambas, el cuadro navarro se llevó la victoria por 0-1, afeando unos números que hasta entonces eran prácticamente inmaculados para los cordobesistas: seis triunfos y un par de empates.
El precedente más cercano, en noviembre de 2017 y en el ecuador de la fugaz etapa de Juan Merino como entrenador del CCF, se resolvió a favor de los rojillos con un solitario tanto del ex cordobesista Xisco en los primeros minutos del segundo periodo. Era la primera vez que el balear regresaba a El Arcángel, defendiendo los colores de un Osasuna que en el banquillo tuvo ese día a dos jugadores que ahora actúan de locales: De las Cuevas y Miguel Flaño.
Ese mismo marcador se repitió dos campañas antes, en el curso 15-16 que suponía el regreso del Córdoba a la división de plata tras el paseo por Primera. Y en aquella ocasión el equipo que dirigía José Luis Oltra se quedó a cero tras un gol a la contra de Berenguer ya pasado el minuto 90. Era la fase más cruda de la crisis de resultados en casa de los blanquiverdes –seis derrotas consecutivas y siete choques sin ganar en El Arcángel–, que finalmente terminaron por meterse en el play off de ascenso.
Antes de esos dos borrones, el expediente del conjunto cordobesista ante Osasuna era muy positivo. Aquella primera victoria en la élite, en el curso 62-63, por 3-0 (doblete de Juanín y Miralles) abrió una etapa con tres triunfos más, sin que los navarros marcaran un solo gol, ya en Segunda: 1-0 en la 69-70 (Torres), 4-0 en la 72-73 (Urbano, Manolín Cuesta, López y Escalante) y 3-0 en la 75-76 (Urbano, Mansilla y Burguete).
En Primera, en Segunda y en la Copa
En medio de esa serie de alegrías y para ponerle fin llegaron los dos únicos empates. El primero a dos tantos (doblete de Martínez para neutralizar los tantos de Demetrio y Ostívar) en la 73-74 y el segundo sin goles en la 77-78. Y desde ese ejercicio, un vacío de más de 20 años en competición liguera roto solo por una eliminatoria copera mediados los 90, resuelta a favor de los navarros, que militaban en Segunda, ante un rival de Segunda B; el 3-0 en El Sadar dejó en nada el 2-1 rubricado en la ida con las dianas de Quini y Valentín.
Un marcador que se calcó cuando ambos se vieron las caras en la campaña 99-00 en la categoría de plata, tras el cartagenazo. Entonces fueron Arnau y Andrés Armada los que marcaron para dejar en nada el tempranero tanto de Palacios para los rojillos. Esta es la última victoria del Córdoba sobre Osasuna, en octubre de 1999. Camino de los 20 años, y aunque ya sirva de poco, lo mismo va tocando sumar otra este viernes para honrar, si se puede, la despedida del fútbol profesional de El Arcángel.
En 2008 ya hubo una fiesta en Feria con el Numancia
Con la diferencia, mayor, de que entonces el Córdoba peleaba por una permanencia que amarró en la última jornada a caballo entre San Sebastián y Alicante -el penalti al palo de Abraham Paz para el Cádiz-, el conjunto blanquiverde ya sabe lo que es jugar ante un ascendido que busca ser campeón en El Arcángel y en plena Feria. Ese fue el Numancia el 25 de mayo de 2008, día después al primer sábado de fiesta en El Arenal que la escuadra soriana cató a la perfección. Al final, con un autogol de Boris, que había sido cordobesista años antes, y dos tantos más de Arthuro y Julio Pineda, el triunfo se quedó en casa (3-2, Rafa Jordá y Carmelo para los visitantes) para alegría de todos, pues el Numancia se proclamó campeón a la siguiente jornada.