Un misil de Jacobo basta al Córdoba CF para tumbar al Málaga (0-1)

Córdoba/Tres puntos para tocar ya la permanencia y... seguir soñando. El Córdoba CF asaltó La Rosaleda gracias a un misil de Jacobo que decantó un derbi andaluz parejo y emocionante, más por el imponente ambiente que generaron ambas aficiones que por la brillantez del choque en sí, pero igualmente entretenido y definido por detalles mínimos. Los hombres de Iván Ania se mantuvieron vivos en una mala primera parte y en la segunda supieron aprovechar su momento para agarrar una renta que ya no soltaron hasta el pitido final. De esta forma, el CCF se reencuentra con el triunfo y vuelve a mirar hacia arriba con ilusión, mientras asegura su espalda con 48 puntos que le ponen ya al borde de confirmar la permanencia matemática en LaLiga Hypermotion.

Como era de esperar, Iván Ania recuperó a Carlos Marín para la titularidad, dando entrada en el once inicial a Álex Sala y Alberto del Moral en la medular, para buscar dominio de la pelota y contundencia en la parcela ancha. Fueron los tres cambios de un once inicial, por lo demás, continuista, con el que Ania buscó equilibrio en un duelo que se antojaba largo y pareja en La Rosaleda. Claro que una cosa era la idea del técnico y otra fue la ejecución de sus jugadores, bastante desatinados en líneas generales durante la primera parte.

El Málaga sorprendió de inicio con una presión alta y ambiciosa con la que trató de ahogar a los blanquiverdes en salida de balón. Los de Sergio Pellicer tuvieron las primeras ocasiones, de la mano de un Larrubia veloz a la espalda de los centrocampistas del CCF. El Córdoba, cuando fue capaz de saltar la primera línea de presión, encontró facilidad para construir, pero el problema es que lo hizo en demasiadas pocas ocasiones.

Los pupilos de Iván Ania no terminaron de encontrar su juego en el primer acto y el peligro que fueron capaces de generar ante Alfonso Herrero tuvo el denominador común del balón parado. En un primer córner botado por Álex Sala, Alfonso Herrero despejó con dificultad y Albarrán peinó el esférico sin encontrar un rematador final. Aunque el Córdoba fue ganando protagonismo con el balón poco a poco, los blanquiverdes seguían demasiado incómodos. Y más lo estuvieron cuando una pérdida de Carlos Isaac tras un córner la convirtió Kevin Medina en un contragolpe vertiginoso. Por fortuna, el extremo malagueño falló en su pase de manera flagrante cuando Dani Sánchez ya se relamía ante Carlos Marín.

Chupete se topa con el larguero

Más clara si cabe fue la siguiente ocasión del Málaga, que de nuevo encontró los espacios a la espalda del centro del campo del Córdoba CF para hacer daño. Chupe recogió una buena jugada colectiva de los malaguistas y su disparo en el área se marchó al larguero, después de que Carlos Marín rozase con la yema de los dedos. El almeriense salvó a los blanquiverdes de un primer golpe que les habría hecho mucho daño.

Ania, que no andaba ya muy contento con la puesta en escena de los suyos, se vio obligado a dar entrada a Pedro Ortiz por la lesión de Alberto del Moral. El técnico aprovechó el cambio para dar el eje de la medular a Isma Ruiz y buscar mejor pie por dentro con Ortiz. Mejoró algo el CCF a partir de ese momento, con Carracedo algo más enchufado y haciendo daño. En un centro del catalán, Sala golpeó desviado camino de la media hora de juego. Acto seguido, Obolskii le ganó la partida a Galilea en el área y disparó alto. Con todo, la más clara para los blanquiverdes volvió a llegar a balón parado, con un saque de esquina de Álex Sala que Carlos Isaac golpeó con fuerza obligando a Herrero a hacer un paradón. Al descanso, el duelo se había equilibrado, aunque era más la emoción en la grada que la calidad expuesta sobre el césped por ambos equipos.

A la vuelta de vestuarios, el Córdoba CF fue un equipo muy distinto. Más enchufados, ajustados en la presión y ambiciosos en ataque, los hombres de Iván Ania no tardaron en poner en problemas al Málaga. Fue a balón parado, cómo no, como el CCF agitó el encuentro. Un misil de Jacobo en una falta lejana se envenenó de tal manera que Alfonso Herrero no pudo detenerla y el madrileño ejecutó en La Rosaleda esas piruetas con las que acostumbra a celebrar sus goles.

El gol sentó de perlas a un Córdoba CF que empezó a merendarse al Málaga a base de poderío físico y presión alta en el centro del campo. Sufrieron entonces los de Sergio Pellicer, que se vieron agobiados por momentos ante los constantes intentos de un conjunto cordobesista que forzó hasta tres saques de esquina en un par de minutos, dando la sensación de que el 0-2 estaba cerca.

Ante las dificultades de su equipo, Pellicer reaccionó y refrescó el centro del campo con Aarón Ochoa, que dio otro aire a los malaguistas. En ataque, Dioni tampoco tardó demasiado en enchufarse tras relevar a un frío Lobete. Le tocó sufrir al Córdoba en ese tramo de partido, con un Málaga CF voluntarioso, pese a la poca brillantez de sus atacantes. La ocasión más clara para los blanquiazules la tuvo Dioni, que disparó tras un pase de Larrubia y obligó a Carlos Marín a hacer una gran parada.

Ania volvió a tirar de cambios, dando entrada a Magunazelaia y a Marvel, que tuvo que coger el sitio de Rubén Alves por los problemas físicos del central. Entre esas permutas y bajón del Málaga, el Córdoba CF fue capaz de meter el partido en la nevera y jugar con el resultado a favor, aprovechando que los de Pellicer ya empezaban a perder fuelle. Ander Yoldi fue el último recurso de Ania para enfriar los compases finales y su equipo supo interpretar lo que tocaba para asegurar una victoria que pone ya la permanencia a tiro de piedra. El navarro, impetuoso siempre, robó un balón que Jacobo sirvió a Casas para que el rambleño hiciera un golazo. E l gol, sin embargo, quedó anulado por un fuera de juego milimétrico. Por fortuna, el duelo ya no dio más de sí y los tres puntos no estuvieron en peligro.

Aunque no fue ni mucho menos brillante, el Córdoba CF supo jugar sus bazas y aprovechar un chispazo de Jacobo para llevarse tres puntos de La Rosaleda que supieron a gloria a los 2.000 cordobesistas desplazados y que suponen un paso ya casi definitivo para asegurar la permanencia. Y, además, los blanquiverdes, vuelven a colocarse a seis puntos de la zona noble antes de recibir a dos candidatos al ascenso como el Levante y el Real Oviedo. Un doble duelo que puede volver a reenganchar a los de Ania a la lucha por el play off de ascenso.