Las notas de los jugadores del Córdoba CF ante el Algeciras

CARLOS MARÍN. Vendido. No tuvo excesivo trabajo, y lo solventó bien, hasta que Roni remató en una posición demasiado franca como para que el almeriense pudiese salvar a su equipo. Debe sentir frustración cuando su buen trabajo no se ve recompensado.

PUGA. Descolocado. Una desaplicación defensiva suya, por ir a encimar a un futbolista fuera de su zona, permitió al Algeciras empatar poco después del gol de Diarra. Partido bastante discreto del granadino, que apenas apareció en ataque.

ALBERTO JIMÉNEZ. Sólido. Pese a la inactividad que acumula de tantos meses, debutó dando una sensación de suficiencia y solidez para defender que sin duda le vendrá bien al equipo. Da la impresión de que ya no saldrá del equipo.

GUDELJ. Sobrio. Buen partido del central neerlandés de origen serbio, que trató de conectar con los puntas en los primeros compases con balones desde atrás y que se las apañó para secara Álvaro Romero y batallar con Roni.

CALDERÓN. Superado. A sus espaldas dejó una autopista que el Algeciras aprovechó en varias ocasiones y que pudo costar caro a su equipo. Con toda la banda izquierda para él, se echó en falta alguna incursión en ataque más para finalizar con centros.

CARRACEDO. Menos presencia. El extremo está habituado a ser un futbolista que aparece mucho en los partidos del Córdoba pero en el Nuevo Mirador lo hizo menos. Trabajó, lo intentó, pero no fue capaz de desbordar y ponerla con acierto.

DIARRA. Luces y sombras. Adelantó a su equipo con un buen gol justo después de pifiar la ocasión más clara del partido. En la jugada del gol del Algeciras también dejó alguna duda en su ayuda a Carlos Puga para cerrar el flanco derecho.

JAVI FLORES. Poca presencia. Debió de tener más peso en el juego de su equipo, que echó en falta su clarividencia en la primera parte. Apareció un par de veces desde segunda línea llevando peligro, pero sin acierto.

KIKE MÁRQUEZ. De menos a más. Le costó entrar en el partido, a buen seguro por esa extraña ubicación en el terreno de juego, tirado a la banda izquierda. La imprecisión que mostró en la primera parte la arregló en la segunda con una asistencia que no aprovechó Diarra y generando la jugada que puso al CCF por delante.

WILLY LEDESMA. Poco vivo. Decepcionante encuentro del extremeño, que no tuvo apenas ocasiones para el remate. Las mejores le llegaron por errores del rival en la salida del balón, pero estuvo poco vivo para aprovecharlas.

CASAS. Desasistido. No estuvo cómodo en ningún momento porque no recibió buenos balones en el área para probar el remate. Su único intento fue desde 20 metros y finalizó con una parada sin problemas de Miño.

SIMO. Inadvertido. Otro de esos partidos en los que el hispano-marroquí se olvida de aportar al equipo y se centra más en acciones estéticas pero poco efectivas. Para colmo, vio una amarilla que le hará ser baja ante el Racing Ferrol.

ARMANDO SHASHOUA. El mejor. Llevaba un mes de extraño ostracismo en el banquillo y en apenas media hora de juego demostró que tiene fútbol y un ritmo distinto, justo el que necesita su equipo. Que tome nota Germán Crespo.

DE LAS CUEVAS. A contracorriente. Da la sensación de que el técnico trata de meterlo con calzador pero una vez más entró en un momento poco idóneo, cuando mejor estaba Kike Márquez. Además, no aportó nada tangible a su equipo.

CANARIO. Anecdótico. Sigue acumulando minutos de la basura cuando parecía llamado a ser un hombre importante en este Córdoba. Esta vez, al menos, lo hizo desde una posición más habitual para él como es el extremo derecho.

MARCO CAMUS. Veloz. Germán Crespo lo ubicó como referencia ofensiva en los minutos finales y el cántabro trató de explotar su velocidad, gozando de una buena ocasión que Amoah cortó con una falta que el árbitro no quiso señalar.